Vigésimo día de un mes cualquiera

7 0 0
                                    


Tres y veintisiete de la madrugada

La última calada a ese asqueroso cigarrillo me hizo hurgar el baúl de los recuerdos

Tal vez te extraño

Tal vez

Pero ahora eso no importa, ¿O sí?

Tal vez sólo deba dejar de pensar en ti

Pero no me importa ni lo más mínimo lo que deba hacer

Sólo cinco minutos más, lo prometo



Tres con cincuenta y seis de la madrugada

¿Es acaso odio esto que siento por ti?

Sigo sentado en el mismo viejo taburete

Mirando las mismas pinturas viejas y descoloridas

Sigo escribiendo los mismos versos tristes

Creo que sé por qué me dejaste

Creo que sé por qué partiste de aquí.



Cuatro con catorce de la madrugada

Por ti he borrado dieciséis veces este poema

Pues, sin saberlo, me haces dudar entre Chopin y Tchaikovsky

Sin saberlo, me haces cambiar de taburete

Haces que cambie aquella descolorida pintura

¿Soy tan patético?

Sigo esperando que vuelvas

Y te esperaré hasta que mi cuerpo decida morir.

Cuarenta y siete horas con cincuenta y cinco minutosWhere stories live. Discover now