¡Buenos días, Yoongi Hyung! 2. -YoonTae.

Extra: Min Yoongi te ama.

-¿Sí, Hyung? -pregunto mirándolo con el mentón apoyado en el pecho ajeno.

-Te amo -lo miro a los ojos fijamente.

TaeHyung sonrío y dejo un beso en los labios ajenos.

-Lo sé, Hyung -asintió el castaño separándose.

-¿Quieres dormir hoy aquí? -pregunto acariciando los cabellos del menor. Tae fingió pensarlo para finalmente mirarlo y regalarle una de sus típicas y lindas sonrisas rectangulares.

-Sí, sí quiero dormir aquí hoy, Hyung –asintió sin borrar su sonrisa.

El pálido asintió y lo abrazo.

Quería dar ese paso, pero no sabía cómo, esta era una oportunidad, ya saben cómo muchas otras, pero esta la tomaría.

Al momento en el que Tae salió del baño con su ropa puesta, Yoongi no pudo evitar mirarlo fijamente, estaba nervioso, pero principalmente estaba ansioso.

-¿Hyung? –Llamo el menor preocupado- ¿te encuentras bien? –pregunto sacudiendo su cabello con la toalla en su mano.

-Kim... yo... te necesito –lo miro fijo, no sabía que decir o hacer, simplemente esas palabras volvieron a salir.

-Yoongi Hyung...

-Te necesito y no de la manera de besarte y abrazarte, te necesito de una manera más íntima y que solo quiero hacer contigo.

TaeHyung bajo la mirada notoriamente sonrojado, comenzó a moverse nerviosamente.

-Yo también te necesito, Hyung –admitió mirando sus pies descalzos.

Min Yoongi se quedó inmóvil ante la confesión de su menor, al no recibir más respuesta, Tae alzo la mirada y se encontró con la oscura y penetrante de su mayor.

¿Qué se supone que debían hacer?

-Pero tengo miedo de hacer las cosas mal –murmuro el castaño.

Yoongi se acercó los pasos que los separaban y tomo el mentón de su bebé entre sus manos, haciendo que ambos se miraran a los ojos.

-No tienes por qué tener miedo, Kim, lo haremos los dos juntos –asintió al igual que el moreno.

Tomo al menor de la nuca y se acercó para besar sus labios.

Comenzaron con un beso lento y temeroso, TaeHyung temblaba ligeramente y eso hacía que el corazón de Yoongi se estrujara de la ternura. Tomo al menor de la cintura y comenzó a guiarlo a la cama, lo sentó y él se sentó a horcajadas del castaño.

Se separaron con la respiración agitada, mirándose a los ojos.

-Todo está bien –murmuro de forma jadeante el pelinegro. Tae asintió con la cabeza y cerró los ojos al sentir los labios de su Hyung sobre los suyos.

El menor se puso un poco nervioso al sentir como Yoongi lo tomaba de los hombros y lo empujaba hacía atrás sin separarse del beso.

-Yoongi Hyung –se separó y comenzó a buscar aire- te quiero.

-Te quiero mucho más –afirmo el mayor acariciando su mejilla.- No tienes idea de cuánto Kim.

Ambos se volvieron a acercar en busca de los labios del otro, continuando con un beso esta vez algo desesperado. TaeHyung llevo sus manos a la cabellera pelinegra y comenzó a acariciar los cabellos y a atraer más a su Hyung hacía él.

Yoongi se separó y beso su mejilla, para después bajar a su clavícula y después besar su cuello.

-Hyung –soltó un quejido el menor. Se sentía bien- más –pidió.