─ Hace unos días te odiaba. ─ Dijo Jungkook y abrió sus ojos asustado por haberlo dicho en voz alta.

Hoseok rió algo dolido.

─ Lo sabía. ─ Le dijo sin poder evitar que sus ojos se pusieran llorosos. No estaba seguro por qué de repente quería llorar.

Él ya sabía que Jungkook quería dañarlo, por qué de repente le dolía que aquello fuera verdad.

Jungkook se apresuró a tomar su rostro entre sus manos.

─ ¿Qué cambió? ─ Preguntó el pelinaranja. ─ ¿Qué hice para que dejaras de odiarme? o... ¿Aún me odias?

El dios del hielo besó sus labios y Hoseok no pudo evitar temblar con aquello, sollozaba silenciosamente porque dolía estar enamorado de esa forma.

─ Ya no te odio. ─ Le dijo Jungkook.

─ Dime,¿Por qué me odiabas? ─ Preguntó Hoseok, pero rápidamente la historia de Jungkook hizo click en su cabeza. ─ ¿Yo era uno de ellos?

Jungkook lo observó algo sorprendido, pero sinceramente era lo obvio, no había otro motivo por el cuál Jungkook odiara a alguien. Se lo había explicado, le había dicho el motivo por el cual fue exiliado, había dejado la verdad oculta en bandeja de plata al decirle que lo odiaba.

─ ¿Lo soy? ─ Preguntó Hoseok comenzando a jadear y sintiéndose algo asustado.

─ No. ─ Le dijo Jungkook.─ Creí que lo eras. Eso es todo.

Hoseok lo miró con lágrimas en el rostro y temblando, ¿Quién quiere darse cuenta que un dios te odia? Especialmente si eres un simple humano.

Ambos se quedaron en silencio unos segundos.

─ Hoseok...

─ ¡Dime la verdad! ─ Exigió Hoseok cerrando sus ojos con fuerza y abrazando sus piernas, sintiendo miedo de Jungkook.

─ Es la verdad. ─ Le dijo Jungkook. ─ Creí que me habías hecho daño, pero no lo hiciste.

─ Dímelo en idioma humano, por favor. ─ Le dijo Hoseok abriendo sus ojos y observando los de Jungkook.

─ Hoseok. ─ Jungkook volvió a tomar su rostro con ambas manos y Hoseok lo miró con los ojos bastante abiertos. ─ Creeme, cuando te digo que si lo supieras sufrirías mucho. No quiero que duela, no más de lo que ya ha dolido por muchas vidas.

─ ¿Qué te hice? ─ Preguntó llevando sus manos a las de Jungkook. ─ ¿Te vengaste de mí? ¿Te estás vengando de mí aún?

─ No hiciste nada. Tú eres Hoseok y aquello es un pasado de hace demasiados años.

─ Deja de mentir, por favor. ─ Pidió. ─ Deja de hablar como si fuera nada.

─ No fue nada. ─ Afirmó Jungkook. ─ Lo fue todo para mí y para tí. Pero ya no eres esa misma persona.

─ ¿Quién? ─ Preguntó Hoseok.

─ Nunca supe tu nombre. ─ Le dijo el dios del hielo. ─ Nunca me lo dijiste.

─ Lo siento. ─ Dijo el humano.

─ No te disculpes, ya, ha sido suficiente de eso.─ Le dijo Jungkook.

─ ¿Qué hice para que me dejarás de odiar? No sé si creerte.

─ No debías hacer nada. ─ Le dijo Jungkook. ─ Yo necesitaba despertar.

─ Mierda... no entiendo. ─ Dijo Hoseok con frustración.

─ Hoseok. ─ Ambos se miraron a los ojos de nuevo. ─ Lo único que necesitas conocer es lo que ha pasado y pasará entre nosotros en ésta vida. Las demás ya no importan.

El chico negó con la cabeza soltandose de Jungkook y corriendose para alejarse un poco de él.

─ No puedo creerte, no después de verte llorar en la hora justo antes del amanecer, todos los días. ─ Explicó. ─ El pasado significa mucho para tí. No puedo creerte.

─ Me importa ahora más este presente.

─ ¡No mientas! ─ Le pidió Hoseok. ─ ¿Por qué habría de importarte más éste presente?

Esa era una excelente pregunta. Jungkook tenía la respuesta en la punta de la lengua. Miró al chico frente a él. Hoseok siempre terminaba llorando, él siempre lo haría llorar ya fuera de miedo o tristeza, de alegría o de placer. Jungkook sabía que su destino era ver sus hermosas lágrimas, pero también lo era ver su hermosa sonrisa.

─ Por ti. ─ Le dijo finalmente. ─ Porque... estás aquí. No temas el pasado, ni te cargues pensando en el futuro. Solo quédate conmigo aquí en el presente y aunque mi corazón está lleno de odio, también se llenará de algo más.

─ ¿De qué? ─ Preguntó Hoseok.

Jungkook le mostró una sonrisa ladeada y se acercó a Hoseok hasta hacerlo caer de espalda en la cama y colocarse sobre él. Acomodó las piernas de Hoseok en su cintura y se agachó apoyándose en un brazo. El pelinaranja tragó saliva.

─ Tal vez sea nieve. ─ Le dijo Jungkook y Hoseok frunció el ceño, pero su rostro se relajó cuando el dios del hielo se inclinó un poco más hasta tomar sus labios.

Suspiró sobre ellos y abrazó a Jungkook por el cuello.

─ Estoy cansado. ─Susurró cuando Jungkook se separó de sus labios.

Jungkook observó el rostro del humano y se miraba verdaderamente cansado.

─ Ya va a acabar el día y aún no me das mi regalo. ─ Comentó Hoseok sonriendo.

El dios del hielo sonrió y extendiendo una mano hizo hielo de la nada. Hoseok lo miró completamente sorprendido cuando Jungkook le ofreció un collar de hielo delgado con una H y una S.

─ Nunca se derretirá. ─ Le dijo.

─ Lo mismo dijiste de tu corazón y mirate. ─ Le dijo Hoseok, Jungkook sonrió y acarició su mejilla.

Hoseok sonrió de regreso, pero pensaba en que necesitaba saber, ¿Por qué Jungkook lo odiaba? ¿Qué fue lo que sucedió? Jungkook le dijo que saberlo dolería, pero aún así, quería saber. Especialmente, porque esa voz en su interior no lo dejaba tranquilo y su pecho dolía.

Como si hubiera leído su mente, Jungkook colocó su mano sobre su corazón y se acomodó a su lado. Hoseok se giró y se dejó atraer hacia el centro de la cama. 

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ICE Heart [Disponible En Físico] | JungHope | Donde viven las historias. Descúbrelo ahora