43. For good times and bad times - That's What Friends Are For

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— ¿¡Qué demonios...!?

—No me hables si no me vas a dar de comer.

Namjoon no pudo ni seguir avanzando su camino. Jimin está muy delgado. No al extremo o enfermizo, pero se nota. La sirena da un bostezo enorme y bebe varias botellas de agua. Namjoon le toca la frente y el cuello. Está muy debilitado y puede hacerse una idea de por qué se encuentra así.

— ¿Dónde están los demás?

—En la cafetería. Justo iba para allá.

Jimin camina lento. Con notorio cansancio y dificultad. Al estar en la cafetería no encuentra un panorama muy distinto en los demás. El único que no luce capaz de dormirse con los ojos abiertos y de pie, es Jungkook. Naturalmente, siendo él quien anduvo de glotón campante toda la noche del sábado. Jimin toma asiento y se deja caer sobre Jungkook, roncando en voz baja mientras el Incubo se ríe en silencio. Namjoon se frota las sienes.

—Estas fiestas quedan prohibidas

— ¿Por qué? Todo salió bien, nadie se murió, nadie se dio cuenta de nada y ayudamos a mucha gente que de verdad tenía dieta y otros tantos que la necesitaban. —silba Jin. Muchos de los que recuerda con sobre peso y hablando sobre la necesidad de bajar kilos, ahora tienen varios menos.

Consecuencia de estar sudando toda una noche, alimentar vampiros y dejar a un Incubo comer. Así sea más complicado y leve, los íncubos son capaces de alimentarse con solo masturbar o acariciar por encima de la ropa a las personas. A más atontada estén, más fácil se hace.

—Y no te hagas el santo que tú también estuviste ahí. —quejumbra Yoongi. Tiene las mejillas más gordas y lo ve un poco más ancho. Permitiendo que su camisa de básquet no esté tan holgada.

— ¡Porque ustedes no me dejaron salir! —reclama al instante.

— ¿Uh? ¿De verdad? Yo te encontré muy bien jalándotela viendo a Hoseok—Namjoon enrojece—. Deja de ser tan tímido y bien portado con nosotros. No hace falta—informa Jin relajado, sacudiendo una mano—. Todos andan hablando de esto. No hay quejas. Ni siquiera de los que querían ir a molestar y no pudieron.

— ¿Quien se podría molestar? —pregunta Taehyung—. Yoongi, después de ir al hotel ¿Me puedo quedar en tu casa?

—No.

—Por favorrrrr, eres muy suavecito. Así se me irá el dolor de cabeza. —Justifica la Sílfide entre quejidos. Yoongi blanquea los ojos. El problema es que, si va, intentará comer de él. Nadie pone un bistec frente a un perro de la calle y espera que no se lo coma ¡Es absurdo!

Taehyung es un lindo bistec sin grasa.

Además, aún recuerda su reflejo en el espejo del baño.

— ¿¡Ahora que van a hacer en el hotel!? —chilla Namjoon en voz baja.

—No hay clases de Geografía para nosotros así que decidimos ir a pasar el tiempo allá. Estirar las alas, aletas, colas, serpientes y esas cosas; hablar un rato, comer una que otra botana—explica Hoseok. Namjoon frunce la cara—. ¿Qué? ¿Ese es el plan no? — cuestiona confundido a los demás.

—Sí, si lo es. —confirma Jin.

—Incluso Jungkook está lleno. Solo vamos a pasar el rato. Encontré unas maquinitas tiradas por ahí—cuenta Taehyung—. Pensé que podríamos llevarlas allá y ¡Jugar un rato! Será divertido.

—Y nuestro Hellhound nos va a acompañar para que lo mimen bien tututú~—Hoseok acaricia con cuidado algunos mechones de cabello de Namjoon—. Po'que'ta'mu'cansaduuuu—Pone las manos en las mejillas morenas y anchas—. Pobechiiiito—Saca los labios y le presiona las mejillas—. Hay que darle un premiechitooooo.

Hidden: Outcast Club || BOOK 1#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora