🍆18 ~ Mi lugar seguro.🍆

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Tomaba con tranquilidad su piña colada, hasta que un chico que claramente se veía ya casi de treinta años se sentó en su mesa.

— ¿Puedo ayudarte en algo?

— Tal vez, ¿qué hace un omega tan hermoso solo?

— Bebiendo, ¿acaso no ves?

— Ja, lamento ser tan directo, pero eres muy guapo, no quisieras venir a mi habitación.

El chico masajeo el muslo de Joaquin, he hizo que se levantara inmediatamente.

— Ven levántate.

— Que fácil fue conven... ¡agh!

Joaco agarró fuertemente las partes íntimas del alfa, provocándole un gran dolor.

— ¿Qué es lo que ibas a decir idiota?

— N-nada.

— Bien, no vuelvas a molestarme.

Joaquin lo soltó caminando a la salida.

— Esper...

El chico iba a tomar su brazo, cuando su muñeca fue apretada con fuerza.

— ¿Emilio?

— Acaso no escuchaste, dijo que no lo molestaras. — El alfa se aterroriza con la mirada de Emilio.

— Vámonos.

Joaquin y Emilio salieron de la cabaña, las feromonas de Joaquin revelaban su enojo.

— Te defiendes muy bien.

— Eso no es nada, no quería hacer un escándalo.

Ambos caminaron por la blanca arena, en un silencio un poco incómodo.

— Voy a quedarme a ver las olas, ¿quieres acompañarme? — Dijo Joaquin con la mirada al frente.

— Claro.

Ambos se sentaron en la arena, quitaron sus zapatos dejando que el agua tocará sus pies.

— ¿Por qué nunca habías venido al mar?

— No es una bonita historia, prefiero no contarla.

— Bueno, supongo que puedo esperar a que estes listo...

— Sabes, creo que este viaje me ayudó mucho, para aclarar mi mente, y poder tomar buenas decisiones para mi futuro.

— Me alegro, creo que a todo nos ayudó de diferentes formas.

— Joaco, ¿dónde está tu mamá?, casi nunca hablas de ella.

Joaquín rio triste fijando la mirada en el mar.

— Supongo que, trabajando en Guadalajara, yo quiero tener una buena carrera para darle un buena vida a mi madre, después de la muerte de mi padre. Todo se complicó, pero salimos adelanté. Siempre nos hablamos por mensaje, me manda dinero para la universidad y para que me compre cosas, la extraño mucho.

— Ya veo, al menos tu tienes una madre a la cual extrañar, o un hogar a donde llegar.

Joaquin miró confundido a Emilio, viendo la tristeza de sus ojos.

— ¿Y tu madre Emi?

— Ella es parte de la historia que no quiero contar, ella me abandonó a mi suerte a los catorce años, solo me dejó la casa y un fuerte dolor, la familia de Mateo me acogió unos meses en su casa, pero no quería causar más problemas, así que me fui, trabajé en tiendas, en restaurantes, ahorré dinero desde los diez, y así llegué a la universidad, siendo una mierda. Gracias a mis padres, yo quiero una carrera para tener un hogar al que llegar, y sentirme bien y en casa.

Mi destinado Omega [✔] © # [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora