Mackenzie se da por satisfecha con esa contestación y se va hacia la cocina, de donde abre la nevera y saca un plato en el que hay dos cupcakes de vainilla con frosting azul. Zoey la mira sonriendo y pone la radio. Suena Cheerleader de OMI, de pronto, Zoey se siente como si estuviese en Iowa otra vez. Cuando se terminan de comer las cupcakes, Zoey hace palomitas y se ponen a ver Toy Story. Cuando se termina la película, Mackenzie se ha dormido en las piernas de su hermana, que la lleva en brazos hasta su habitación y la acuesta. Entonces se acuerda de que su padre no ha vuelto y se empieza a preocupar. Su padre no estaba en la compra. No tenía ni idea de dónde estaba su padre. Decide llamarle, asique coge su Iphone y marca el número de su padre. Da tres tonos hasta que lo cogen.

- ¿Ssssii?

- ¿Papá?

- ¿Zzoeey?

- Joder, ¿estás borracho?

- ¿Yoooo? Pff, para nada...

- Si mamá te viese ahora...

- Dejja de hablar de tuu puta madre, coño, ssuperalo de una vezzz...

Zoey no contesta. Cuelga y deja el teléfono en su mesilla. Se pone el pijama, le manda un buenas noches a Caleb y se mete en la cama.

Un estruendo despierta a Zoey. Se levanta sigilosamente, con su bate de béisbol en la mano, enciende la luz del salón y ve a su padre tirado en la alfombra. Exhala y deja el bate apoyado en la pared. Ayuda a su padre a levantarse y le lleva a su cuarto, donde le tumba de cualquier manera en la cama y se queda levantada por si su padre necesita algo. Cuando el reloj marca las siete de la mañana, levanta a Mackenzie, que se va al cuarto de baño a ducharse. Ella prepara los desayunos y en cuanto Mackenzie sale de la ducha, se mete ella, mientras su hermana desayuna. Luego se viste, desayuna y se va a la parada de autobús, donde la esperan James y Caleb. En cuanto la ven, la saludan con la mano.

- Buenos días.

- Buenos días Zoey.- Dicen al mismo tiempo.

Se quedan callados hasta que llega el autobús que los dejará en el instituto. Cuando llegan, ven el Volkswagen azul de la madre de Olivia. Se queda parado unos segundos en la acera de enfrente del instituto, hasta que se abre la puerta del copiloto, de la que sale Olivia. Se ha cortado el pelo por encima de los hombros y se ha hecho flequillo recto, y ya no es rubia, se ha teñido el pelo de color negro.

- ¿Oli? -Se extraña James.- ¿Eres tú?

Ella asiente varias veces. Zoey puede distinguir que se ha maquillado, marcándose mucho más gruesa la raya de los ojos, tiene una dilatación roja de dos milímetros en la oreja izquierda, y tres agujeros más en la derecha. En el cuello lleva un collar negro, muy apretado, en el que cuelga una cruz cristiana.

- Olivia...- La llama una chica con el pelo teñido de rojo intenso.- ¿Vamos?

Olivia asiente y la indica que vaya yendo, la chica se va a un grupo en el otro lado de la entrada. Olivia suspira y se planta delante de sus amigos, con una expresión nublada.

- James... Lo primero que quiero es hablar contigo.- Dice Olivia.- Pero en el recreo, después quiero hablar con Caleb, y luego contigo, Zoey...

Cuando termina de decir esto, se dirige a un grupo de chicas con colores de pelo extravagantes, y sobretodo, habla con la chica teñida de rojo intenso. A James se le cae el alma a los pies. Sabe porque ha sucedido ese cambio tan radical en Olivia, es por una persona. Isabella.

- Joder...- Consigue articular Caleb.

James y Zoey asienten. Se dirigen a su clase. Las tres horas anteriores al recreo, se les hacen eternas a los tres. Zoey, para distraerse, intenta atender a las explicaciones, pero le resulta imposible, cada dos por tres, no puede evitar mirar al sitio vacío de Isabella, y a su lado, Olivia, que tiene la mochila sobre la mesa, y está más atenta al teléfono que al profesor.

- Señorita Russel.- Al decir su apellido, Olivia mira al profesor.- ¿Qué tiene en la mochila que capta toda su atención?

Olivia se levanta de su sitio. Zoey advierte una cadena rodeando su cintura, y lleva las mangas del uniforme remangadas.

- Verá, Robin, no quisiera ser grosera, pero no le estoy estorbando en su puta clase, asique deje de tocarme los ovarios y déjeme en paz. Quiero suspender su mierda de asignatura, y todas las que pueda, asique, continúe con la clase.

El profesor se queda un poco contrariado, pero manda a Olivia al despacho del director y continúa con su clase. James resopla. No se puede imaginar, que por culpa de un tio, Olivia haya cambiado, y está totalmente seguro de que quiere cortar con él. James no puede evitar soltar otro resoplido y se centra en dibujas cosas en su agenda. Dos horas más tarde, llega el anhelado recreo. Olivia se junta con Caleb, James y Zoey.

- Lo primero que quiero deciros, es que abandono el grupo. No es por mí... Es por vosotros... Me recordáis mucho a Isabella...- Al decir su nombre, las lágrimas amenazan con salir de sus ojos, pero las retiene.- Sé que os puede sonar muy triste, pero no puedo seguir estando con vosotros... He encontrado a gente con mi mismo problema, y pertenezco a la misma raza que ellos... Bueno... James...- James le dirige una mirada cargada de indiferencia.- Yo...

- Cállate, ¿vale? Se perfectamente lo que quieres decirme, y no quiero ni escucharlo, vete con tus putos amigos, y cuando quieras volver, no creo que seas bien recibida.- Le espeta.

Zoey se tapa la cara con ambas manos, para que no la vean llorar, Caleb se pasa la mano por el pelo, nervioso. Olivia le pone una mano en el hombro a Zoey, que la mira a los ojos.

- No me odies...¿vale?- Le susurra al oído.

Zoey asiente con la cabeza. Luego le da un beso en la mejilla a su amiga, que se va con sus nuevos y extraños amigos.

- ¿Qué hacemos...?

- Yo...-Empieza James.-Me voy a casa...

- ¿Te encuentras mal?- Le pregunta Zoey.

- No. Tengo que preparar la maleta.- Confiesa James.

- ¿Te vas de viaje?- Le pregunta su amigo

- No... Me voy...Con mi padre...

Caleb abre la boca de la sorpresa. Zoey no entiende muy bien que pasa, así que decide quedarse callada. James no habla mucho de su padre, asique la chica no sabe por qué Caleb parece tan disgustado.

- No... No me puedes hacer esto...

- Lo siento Caleb, pero, en Wyoming conozco a muchísima más gente...

- Pero... Yo soy tu mejor amigo...- Suspira Caleb.- Pero supongo que te da igual...

- No me da igual, Caleb... Yo que vosotros haría lo mismo... Me escaparía...

A Zoey le brillan los ojos cuando piensa que puede escaparse con Caleb, pero luego, ese brillo se desvanece al ver la cara de su novio.

- Ni de coña...

- A mí me parece buena idea...- Dice Zoey.

Caleb la mira extrañado, esperando que lo diga en broma, pero luego ve que lo dice totalmente en serio.

- Mira, a Zoey le parece bien. Yo me iría lejos... A Long Island... a Nashville... Caleb, ¿no tenías un amigo en Colorado?

- Tengo un primo.- Le corrige Caleb

- Qué más dará. Iros a Colorado, con tu primo.

Caleb mira a Zoey unos instantes.

- ¿Te vendrías conmigo?

- ¿Contigo? -Caleb asiente.- Hasta el infinito, y más allá.

Caleb la besa y sonríen los tres. Cuando suena el timbre, cada uno se va a su casa, listos para preparar las maletas, que iniciarán el nuevo viaje de su vida.

Alma soñadora {Souldreamer}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora