Dama de un vampiro ✓

Capítulo 54

Playlist de DAMA DE UN VAMPIRO número 59 (Tired - beabadoobee)

Agente

Nozomi

Respiro profundo el aroma del mar, el amanecer de este lugar es increíble y pensar que me había perdido de esto...que habíamos perdido. Estoy con Cladis, ambas estamos en un área con mesas, pero directamente estamos en los barandales para ver el mar, el barco es enorme y hay una gran distancia con el agua.

Fran está con Fredom en una reunión con Dereck y todo el clan. Todo está por comenzar y tengo miedo de perderlo.

Cladis se acerca a mi lado, tiene una actitud muy fría, algo que no siempre estoy acostumbrada a ver, ella es divertida, como cuando estaba Oliver.

—Creí que te emocionaría esto— señalo el mar que es inmenso.

Hay algo en su mirada, mira al frente suspirando.

—Sé que no soy quién para decirlo, pero la vida es dura—.

Pongo mi mano en su espalda.

—No digas eso...— no sé porque dice esto sí ambas hemos pasado por tanto —nuestra vida ha sido difícil, no digas que no eres quien, ambas hemos sufrido más que los demás—.

Suspira y su cabello negro es quien le oculta el cuello.

—Si, pero tu has sufrido más...— me dice.

Mis recuerdos sobre eso quieren salir a flote, pero los reprimo viendo esta vista hermosa.

—Ya no me lo recuerdes...— musito.

Niega —No, Nozomi— me mira —sé que crees que el sufrimiento ya acabó, pero esto apenas acaba de empezar— su mirada es muy intensa, algo que me llena de temor.

—Cuando Fredom me hizo saber que era el bueno, me lo creí...— sus dientes rechinan de lo enojada que está —pero siempre es el malo, te hacen creer que eres especial, le elevan el ego solo para saciarse de ti— sus puños impactan contra el barandal, lo que hace que me exalte porque jamás la había visto tan enojada.

—¿Qué te hizo? — abro los ojos porque algo dentro de mi me dice que siempre tuve la razón, los vampiros son...

—Me dejó— dice en un hilo y no aguanta el llanto, me abraza con fuerzas y trato de sostenernos para no caer porque todo su cuerpo está encaramado en mi —me usó para olvidar a Verónica—.

Me siento muy mal por ella y el miedo se intensifica cuando pienso en que Fran podría hacer lo mismo conmigo.

«Tendremos que aprender a ser independientes, no es bueno estar apegados»

Sus palabras vienen hacia mi.

Mi respiración se dificulta y todo de él viene a mi mente... los halagos para luego...morderme...

El día que compró mi vestido viene a mi mente de inmediato, ese día cuando nos metimos en el auto, sin chofer sin nadie que nos molestara, ese momento de lluvia, las buenas cosas que hemos pasado han sido cuando la lluvia viene.

Ambos nos quedamos en silencio después de que dijera «No solamente en eso soy rápido» porque habíamos llegado al auto en una velocidad que solo en él conocía.

El silencio se llenó de gotas sobre el vidrio y nuestras miradas fueron un imán que no podían despegarse.

Sus ojos sobre mi no eran propias de un vampiro, al contrario, sus ojos azules eran los protagonistas al igual que sus manos, me hipnoticé al ver su enorme mano encima de la mía, puesto que mi mano cabía en toda su palma sin ningún problema.