Amigos En Las Buenas Y En Las Malas

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Extrañaba sus bromas, que tratara de estar siempre conmigo, cuando se me ocurría o hacia alguna cosa estúpida era el primero en reírse de ella y decirme lo asombrosa que era, pequeños detalles que me hacían sentir afortunada de haberme rodeado de personas asombrosas.

Decidí dejar de entretenerme, borrando las demás cosas innecesarias así como fotos con personas ya no agradables en mi vida, más una persona, siempre que veía alguna cosa que me recordará a él, me preguntaba ¿Por qué alguien que amaste puedes odiar? Y nunca encontraba la respuesta.

Cuando por fin terminé, decidí dejar toda la tristeza a un lado arreglandome, poniéndome un top negro, un short del mismo color al igual que unas medias de red complementandolo con mis botas estilo militar y mi chaqueta de cuero, dejando al descubierto mi tatuaje, poniéndome todas las piezas en mis perforación, estando lista para disfrutar la noche.

Baje las escaleras con rapidez provocando un gran ruido por toda la casa, justamente cuando iba a abrir la puerta escuche como alguien se acercaba, me gire rápidamente para encontrar a nino con un delantal y un sarten en su mano y en la otra un utensilio de cocina.

-¿A dónde vas señorita?

-A divertirme, ¿Por qué? - con falsa inocencia me acerque a mi amigo - ¿Algún problema?

-¿Si tengo algún problema? - dejo lo que tenia en manos en la barra de la cocina para señalar su rostro - Si, lo tengo, mira, me dejaste rojo por lo de hace rato, ademas que estoy preparando tu comida favorita para disculparme por hablar de mas con Adrien, dime ¿Eso no es un problema?

-De echo, no - hizo una pose de ofendido - Te lo merecías, eres mi mejor amigo, si te digo algo no es para que lo andes diciendo, mucho menos a Adrien que era sobre el todo mi problema, sobre la comida puedes dejarla cuando lleguemos la comemos.

-Espera, acaso dijiste ¿Lleguemos?

-Claro, como buen amigo que eres, me vas a acompañar, debes divertirte anda, vete a cambiar, antes que me arrepienta de llevarte conmigo.

Le di un rápido beso en la mejilla para después sentarme en una silla sacando el móvil.

-¿En serio Marinette? - asentí - realmente aveces me sorprendes, ¿Cómo hace rato no dejabas de llorar y ahora quieres salir?

-Nino, eso se llama tratar de olvidarme de "mis problemas" - imitando las comillas con mis dedos - eso no me va impedir poder ir a divertirmeby que mejor compañía que mi mejor amigo o también puedes llamar "evitarlos"-volví a imitar la acción, nuevamente guardando el móvil - Le diría a Alya, pero no está disponible, tiene que ponerse al día, tú no tienes ningún problema, así que ¿Qué dices?

-Si no te quisiera, desde hace tiempo me hubiera alejado de ti, dame unos minutos me voy a cambiar.

-Gracias Ninote.

-¡Ya no me llames así Ladyloca!

Solté una fuerte risa, hace tiempo que no nos llamábamos por esos apodos, unos cuantos minutos después bajó mi amigo, cerre la casa con llave, cuando me gire hacia Nino ya había abierto la puerta de su coche.

-¿Qué crees que haces? - me puse a su lado quitándole la gorra - ¿Por qué vas a entrar al auto?

-¿No es lógico? Pará poder irnos, ademas que no se a donde quieres ir.

-No,no,no - mientras negaba con la cabeza una maliciosa sonrisa se formó en mis labios-Yo te invite, por lo tanto, yo conduzco, yo pago, yo tomo las decisiones esta noche, así que dejando claro lo anterior iremos en mi motocicleta.

-¿Qué? No bromees, me das miedo cuando conduces, lo haces demasiado rápido, siento que me voy a caer, el viento da muy fuerte contra el cuerpo.

Difícil de conquistar (MLB) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora