Capítulo 21: Castigo merecido.

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Hagamos que H aún no tiene tatuajes ¿Ok?

Al llegar a al departamento dejé la mochila a un lado y fui corriendo a la cama del cuarto donde dormía con Louis, me tiré en ella y sentí todo mi cuerpo relajarse estar en casa era un alivio. Escuché la puerta de la habitación abrirse y ví a Louis pasar todas las maletas.

En el cuarto en 20 minutos - Su voz se escuchaba demandante y un chasquido resonó en la habitación, ahora cada que estaba en completa sumisión Louis hacía ese chasquido, lo ví salir de la habitación y rápidamente me levanté de la cama, cuando estaba en sumisión a Louis le gustaba que estuviera solo en bragas y mis medias hasta los muslos, cumpliría todo lo que el me pidiera.

Me quité la ropa y me cambie de bragas, me puse unas color piel con bordes de encaje negro y las medias a juego, me apliqué un poco de gloss de sandía en los labios y fui directo al cuarto que el se refería, era el cuarto de invitados pero con el tiempo se volvió un cuarto de juegos, entré y las luces de la habitación esta vez estaban de un color azul marino, caminé con los ojos fijos en mis pies y me pare en frente de Louis, el estaba sentando en un sillón color negro y aún tenía la ropa del viaje debía admitir que se veía jodidamente sexy.

Hace unos días me dejaste un poco mal, Harold - Su voz era ronca y con una pizca de poder que tanto amaba, se levantó del sillón y fue a buscar un collar de cuero sintético color negro - Creo que eso no fue muy lindo de tu parte, nena - Habló mientras me ponía la correa en el cuello, ya puesta en mi se volvió a sentar en el sillón - ¿Que crees que amerita eso? - Preguntó.

Un castigo, Señor - Sentí la correa alar de mi y me acerqué un poco más al sillón.

Eso es correcto - Al terminar de decir esas palabras aló tan fuerte del collar que me hizo caer al suelo haciendo que mis rodillas retumbaran por toda la habitación, alzó mi mentón con sus largos y finos dedos para que lo viera a los ojos, estaba oscuros de lujuría - No seré para nada suave contigo, Harold - Dijo en un susurro.

No quiero que sea suave, Amo - Dije con las mismas ganas y lujuría que él.

Cierra la boca, no pedí que hablaras - Una cachetada vino después de sus palabras y el ardor que sentía era fascinante - Quítate las bragas y ve a esa esquina con las piernas abiertas - Me señaló la esquina y me quité las bragas dejándola a un lado de mi y luego fuí a la esquina sin rechistar.

En la esquina habían 2 esposas pegadas en la pared para las muñecas y otras 2 pegadas en el suelo para mis tobillos, era uno de mis juegos favoritos. Al estar ya ahí Louis me puso primero las esposas de los tobillos dejando así mis piernas flexionadas pero inmóviles, luego puso las otras en mis muñecas dejadome así inmóvil y totalmente expuesto.

Te pondré esta corbata en los ojos y está mordaza - Decía mientras me ajustaba la mordaza en la boca y luego la corbata en el rostro, ya sin ver nada solo dependía de mi oido, olor he instinto - Si no gimes tal vez esta noche tu culo será mio - Sentí sus dedos lubricados entrar en mi, haciendo tijeras en mi ano expuesto y círculos como preparación, en mi garganta se reprimía cada gemido y jadeo haciéndome sentir el famoso nudo en la garganta, mi cintura se movía de adelante hacía atrás en busca de más, un latigazo me tomo por sorpresa - Quedaté quieto, pareces una gata en celos - Sentí sus dedos salir de mi interior y con ello ese vacío que tanto odio.

Escuché un armario abrirse y algunas cosas removerse, luego escuché la puerta cerrarse sentí a Louis venir hacía mi - Pondré este artefacto entré tus piernas, hace embestidas y puedo subir y bajar la intensidad, pondré un consolador grande y estará prendido - Asentí, escuché un botón y luego sentí la punta del consolador en mi agujero junto a sus vibraciones, sentí el corbatín ser quitado, la luz aún estaba azul marino, de repente sentí el vibrador entrar en mi y sin ningún aviso el artefacto comenzó a moverse, eras duras y rápidas embestidas. Por más que quisiera gemir de placer no me lo permitía, quería tener la polla de Papi.

Princesa ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora