Cuando oí lo que dijo de inmediato pensé "Si, la quiere de vuelta". Me sentí un poco triste de pensar que me quitaría a Vixey porque ahora la quería mucho y era mi único consuelo para las noches lluviosas.

Estaba a punto de irse por la prisa que tenía pero en cuanto vio el mensaje que traía en el cuello lo agarró y lo leyó en su mente. No podía escucharlo pero su vista recorría cada parte del papel, cuando terminó de leerlo su cara se puso un poco triste y pensé que se iría ya a su reunión con el consejo de guerra para no llegar tarde.

Pero para mí sorpresa no hizo eso; se dio la vuelta y entró de nuevo a su habitación. No tardó mucho cuando regresó con otro papel y se lo volvió a amarrar en el cuello a Vixey. Tocó con sus dedos la cinta que anteriormente era suya y sonrió un poco.

Zuko: Regresa con tu dueña lo más pronto posible, no quiero que siga triste -le dijo a Vixey mientras la acariciaba-

Después de eso se fue corriendo a toda velocidad en dirección a la sala de guerra del Señor del Fuego. Si no se apresuraba ahora si llegaría tarde.

Me asombro mucho que apesar de que tenía el tiempo justo para llegar a su reunión, se haya tomado un momento para responderme mi mensaje.

Después de que se fue, Vixey regreso conmigo y puso sus dos patitas delanteras sobre mi pierna como si quisiera jugar pero en esta ocasión más bien quería que leyera el mensaje.

Nerea: Quieres que lo lea ¿Cierto? -le dije con una sonrisa-

Me acerqué hasta su cuello y desamarre la repuesta de Zuko para mí. La desdoblé y leí lo que decía dentro.

¿Se llama Vixey? Es un hermoso nombre, me pregunto por qué lo habrás escogido.
No estoy enojado, lamento que hayas pensado eso. Últimamente he estado muy ocupado preparando un plan perfecto para "invadir" Ba Sing Se, tú sabes que no podemos dejar que nada salga mal.
No quiero de vuelta a Vixey porque nunca me perteneció, desde un principio pensé en salvarla porque quería que tú la tuvieras y ahora es tuya. Yo te la regalé.
Por favor quema esta nota cuando termines de leerla, no podemos dejar que alguien sepa de nuestro plan.

No sabía que parte de la nota me gustaba más, cada una de sus palabras tranquilizó una parte distinta de mi y al terminar de leerla me sentí muy feliz y tranquila. Abracé en Vixey en mis brazos y me sentí muy agradecida por tenerla conmigo, y aún más por qué ahora sabía que Zuko la había salvado solo para regalármela y que estuviera a salvo.

La última parte de su mensaje me dio un poco de risa porque me pedía que quemara la nota pero yo no podía hacer eso. Supongo que como él era un maestro Fuego no tendría mayor problema en quemar un simple papel, pero yo no era una maestra Fuego sino una maestra Agua.

Nerea: ¿Qué piensas que haré Zuko? ¿Hervir el papel con agua hasta deshacerlo? ¿O congelarlo por la eternidad en un bloque de hielo?

Me dirigí a la cocina no sin antes dejar a Vixey afuera, no quería que le cayeran sus pelos a la comida o peor aún, que se comiera la comida.

Les dije a las cocineras que las ayudaría con la comida de hoy porque no tenía nada más que hacer. Eso era verdad, pero lo cierto era que solo había venido aquí para poder quemar el mensaje de Zuko en el fuego con el que cocinaban la comida.

En cuanto ninguna me vio me acerqué a la estufa y puse el papel cerca del fuego. Lo leí una última vez y después lo quemé.

Me sentí triste al ver cómo el fuego consumía el papel pero no podía hacer nada más. Si alguien descubría nuestro plan nos pasarían cosas muy malas.

Nación TribalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora