Franco aguantó sus ganas de decir nada.
Nicolai le miró algo extrañado, pero no dijo nada. Simplemente siguió a su jefe y se marchó.
María pintaba en su taller tranquila cuando alguien entró por la puerta algo rápido.
Era Leo.
- qué quieres - dijo seca.
- tenemos que hablar
- no sé de qué
- sí lo sabes
María puso los ojos en blanco y resopló.
- si lo dices porque mañana lo más probable es que esté el demonio que me maldijo... tranquilo, soy muy consciente de ello - le miró desafiante. - por eso no iré.
- irás
- joder, ¿no podemos estar de acuerdo ni siquiera en lo más evidente? por qué iría a donde puede que me hechicen otra vez o incluso me maten
Leo cerró los ojos algo molesto por su comentario, pero mantuvo la calma.
- irás
- por qué
- porque no quiero demostrarles que era una debilidad
- ¿debilidad? - torció la cara.
Leo suspiró lentamente sin dejar de mirarla.
- María, he aguantado este comportamiento de no hablarnos, evitarnos y hasta incluso ignorarnos demasiado tiempo. Basta ya. - dijo calmado.
- deja de ser un gilipollas entonces
Él arqueó una ceja.
- quieres que vaya... ¿y si me la encuentro y quiere volver a hechizarme qué?
- estarás conmigo así que no permitiré que ocurra nada
- ya claro
- ¿qué dices?
- ¿ahora vas a ser mi guardaespaldas?
- no, serás mi pareja
La cara de María se paralizó.
Todo el mundo de María se detuvo.
Tras unos segundos de asombro, ella reaccionó.
- ¿es una broma?
- serás mi pareja, por tanto no habrá motivo para tener que separarme de ti
- pero qué coño estás diciendo Leo, vamos a ver...
- debo llegar hasta ese demonio
- p-pero...
- así yo mismo me encargaré de él
- pero ¿Leo estás loco? cómo que tu pareja
Leo arrugó la cara.
- joder María, ¿puedes concentrarte? fingiremos ser una pareja mañana para dar caza a ese demonio, qué coño no has entendido
María se quedó callada y algo dolida.
Leo suspiró exasperado.
- ni de coña
- joder - resopló molesto el ángel empezando a perder la paciencia.
- no pienso fingir ser nada tuyo, no quiero ir
- la prensa ya habla de nosotros de todas formas
- ¡me importa una mierda la prensa rosa Leo! deja ya de querer jugar conmigo
- ¿te crees que esto es un juego?
María calló.
- ¿no entiendes que estoy harto de todo esto? ¿que estoy harto de este mundo? ¿que estoy harto de tener que soportar comportamientos mundanos como los tuyos? - hizo una pausa mirándola intensamente - quiero regresar a donde pertenezco, y dejar esta mierda de mundo - se desahogó.
Se hizo el silencio.
María se le quedó mirando sin decir nada. Su mirada era apagada y triste.
Leo resopló.
- pero también quiero hacerlo al menos un poco menos peligroso para ti - dijo sin mirarla.
María no entendió.
- debo encontrar a ese demonio y exorcizarlo. Sabe que eres una debilidad nuestra y no creo que dude en ir a por ti de nuevo - explicó. - no quiero irme sabiendo que estás en peligro - la miró por fin.
María siguió callada, pero le aguantó la mirada.
- te prometo que no te ocurrirá nada estando a mi lado - dijo serio.
Ella tragó saliva. Luego apartó la mirada, suspiró profundamente y asintió levemente aguantando las ganas de llorar.
Franco esperó en la salida a Nicolai. El vampiro sonrió al verle.
- ¿cansado?
- no tanto como lo estaré mañana - respondió el vampiro con una mueca y una sonrisa irónica.
Franco le sonrió.
- irá todo bien, el equipo lo ha dado todo
- es una gran oportunidad para la empresa
- lo es
Comenzaron a caminar.
Nicolai se percató del frío que hacía.
- ya es invierno - miró al cielo.
Franco miró también.
- se acerca la Navidad...
- ¿sabes lo que es?
- sí, he leído sobre ello, ¿te gusta?
- ¿si me gusta la navidad?
- es algo que gusta mucho por lo que he visto
- gusta si tienes con quien pasarla como familia o amigos, pero para la gente solitaria es algo doloroso
- ¿doloroso?
- un mes entero que te recuerde lo solo que estás no es fácil de llevar... - apretó los labios.
Franco le miró serio.
- pero tú tienes a tus hermanos, a María y a Carlota... - quiso arreglarlo.
Franco bufó y miró a otro lado.
- mis hermanos... - dijo con voz desagradable.
Nicolai le miró algo preocupado por la situación entre él y sus hermanos. Era evidente que algo había ocurrido.
- la familia es lo más importante Franco...
El ángel le miró de nuevo. Aguantaron la mirada un par de segundos. Luego, el jefe sonrió.
- no te lo niego, pero quiero que sepas que también te tengo a ti, y tú me tienes a mí - le dijo como si nada.
El vampiro abrió los ojos sorprendido. Se sonrojó.
- serán una navidades diferentes - terminó de decir. Y luego miró su coche aparcado. - nos vemos mañana Nicolai
- a-adiós, o sea, hasta mañana - dijo torpemente el secretario mientras veía irse al ángel.
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Seres caídos del cielo.
FantasyTres hermanos ángeles son desterrados a la Tierra injustamente. Tienen un plan y lo ejecutarán poco a poco con la ayuda de un par de humanos. Sin embargo, como en toda buena historia, los planes tienen fugas, imprevistos y en esta incluso romances i...