Sostenía mi mejilla con una de sus manos, acariciando con suavidad y sellando nuestros labios en un profundo beso.

Mis manos buscaron su cuello pegando su rostro al mío para que aquel beso jamas terminará.

El celular de Ran interrumpió el momento.

—No contestes. —Imploré susurre a centímetros de su boca.

—Lo siento,es importante. —Contesto mirando por detrás mío la pantalla de su celular.

Tras eso se alejo de mi dejandome sola en la sala.

Mientras lo esperaba decidí acomodar las bolsas y observar una que otra cosa que se encontraba en ellas.

De la nada apareció Ran nuevamente pasando por la puerta de la sala.

—Debo salir un momento por asunto de negocios,ya sabes donde se encuentra mi recámara,puedes ducharte y vestirte a tu merced,prometo no tardar. —Me informo.

—¿A dónde vas? —Pregunte sin respuesta alguna de su parte.

—Llegaré lo más rápido posible,no quiero que te acerques por ningún motivo más allá del cuarto de Rindo o el mio. —Decía tomando mi cara con ambas manos y depositando un cálido beso sobre mi frente.

Sin más que decir,Ran solo salió dejandome nuevamente sola en el lugar.

Contemplando la escena volví en mi dirigiendo mi mirada a las bolsas que se encontraban en el sofá.

Tome de ellas las cosas que necesitaría mas tarde al salir de bañar y camine hasta el cuarto de Ran.

Deje las cosas sobre la cama sentandome al filo de esta.

Mis pensamientos se hicieron escuchar mientras contemplaba a la nada cuestionando el por que siempre terminaba sola,las veces que me encontraba acompañada era gracias a los chicos y rara vez mis amigas.

Pero al final del día siempre terminaba igual.

Aquella nube abrumadora fue deshecha cuando de la nada comencé a escuchar ruidos extraños.

No se distinguía si gritos muy pero muy leves o alguna otra cosa.

Decidí asomarme observando por los pasillos fuera del cuarto.

Seguí aquel sonido que cada vez se hacia notar más pero que a pesar de eso aun seguía siendo débil.

Llegué a los pasillo oscuro  y me acerque a aquella puerta de donde provenía el ruido.

—¿Hay alguien ahí? —Pregunté pegandome a esta.

Quejidos se hicieron notar después de aquello.

Mi cerebro comenzó a procesar posibles escenas de lo que podria estar adentró pero todo llegaba a la conclusión de que los chicos estaban implicados en esto y no era nada bueno.

Tome el pomo de la puerta tratando de abrirla pero fue imposible.

—Buscare la llave,no te desesperes por favor, mantén la calma. —Inquirí saliendo del lugar.

Volví al cuarto de Ran buscando por todos los cajones,cualquier rincón en donde se pudiera encontrar la llave pero todo fue en vano.

Mi mente se iluminó al recordar el saco que Ran habia dejado sobre el sofá.

Corrí a el con el corazón exaltado esperando que Ran no llegará en un mal momento.

—¡BINGO! —La había encontrado en uno de sus bolsillos.

Volví a la puerta e introduje la llave haciéndola girar.

De un click la puerta quito el seguro y aquel ruido se habia convertido en una chica de complexión parecida a la mia pero de estatura baja sentada en medio de la habitación amarrada de manos y pies.

𝐎𝐍𝐄  𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 -𝐓𝐎𝐊𝐘𝐎  𝐑𝐄𝐕𝐄𝐍𝐆𝐄𝐑𝐒 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora