Detuve el cuchillo a mitad de corte, girando mi rostro para mirarle de frente a los ojos. Gael era mas alto que Ángel, pero la posición relajada que estaba adoptando contra la encimera le permitía estar casi a mi altura. El azul profundo de sus ojos me hipnotizó, brillando con tono seductor.
-He pasado muchas horas con él-Susurré medio atontada por su cercanía.
Sus ojos se movieron por mi rostro, bajando hasta mis labios provocando que los humedeciera con la lengua. Volvió a mantenerme la mirada con las comisuras de sus labios alzándose.
-Nunca he visto unos ojos como los tuyos. He leído sobre esa anomalía, pero nunca la he visto en nadie-Admitió en un susurro acercándose un centímetro mas hasta que solo vi el rio cristalino y claro que me ofrecía él.
Tragué saliva, tratando de centrarme a pesar de que mi cuerpo estaba empezando a reaccionar a su cercanía. Su olor, la manera en que me miraba y me enfrentaba me debilitaba. Pensar en como sus manos llenas de sangre me habían acariciado el pómulo o como sus ojos me analizaban como si fuera un acertijo que le encantaría desentrañar, me encendían mas de lo que una persona cuerda debería sentir.
Pero es que yo no estaba muy cuerda.
-Heterocromía parcial-Le expliqué bajando el tono de voz-Es algo fácil de reconocer...
-De ahí las lentillas-Comprendió alzando su mano para coger un mechón de mi pelo y jugar con el-Que alguien tan hermoso como tu tenga que vivir en las sombras, oculta, es algo que no se debería tolerar. Eres digna de admirar Nyx y no solo dentro de Edén.
Sus dedos jugaron con mi pelo conforme lo decía y me quedé como una idiota mirándole. Le gustaba jugar y ahora parecía que lo hacia conmigo, pero incluyéndome en el juego.
Gael era una persona curiosa que no conseguía descifrar tampoco y eso me intrigaba demasiado.
-Ahí estoy segura.
Frunció sus cejas castañas levemente, ladeando la cabeza con curiosidad.
-Ya no-Me recordó molesto-Pero no te pasara nada con nosotros. Si Moon nos puso contigo es porque somos lo mejor para cuidar de ti...
-No necesito que cuiden de mi, ya os lo he demostrado-Le recordé-No me pillaran con la guardia baja de nuevo.
Mi determinación le hizo sonreír, relajándose. Volvió a convertirse en el hombre despreocupado y coqueto que me hacia reír con facilidad al contagiarme su humor.
-Este pequeño caos es una caja de sorpresas-Bromeó repasando mi mejilla con el dorso de los dedos que aun sujetaban el mechón de mi cabello-Me pregunto como será oler tu piel por la mañana con la esencia de la mía-Mi respiración se detuvo, a la par que mis ojos se abrieron con sorpresa-También sentir como es escuchar vibrar tus gemidos contra la mía mientras mi polla es la que te explora y te atraviesa.
Puse todo mi empeño en que mis rodillas no flaquearan y me lanzara a por su boca entreabierta a escasos centímetros de la mía. Me estaba atrayendo como un imán, deseando saber también lo que seria sentir cada una de las cosas que había murmurado con esos labios rosados.
Como un fogonazo paso por mi mente la alianza que envolvía su dedo anular y lo convertía en algo prohibido para mi. Si me había tirado a algún casado, nunca fue bajo mi conocimiento.
-Tu mujer...-Murmuré incomoda, rechazando la caricia con la mayor delicadeza que pude.
Su sonrisa se amplió, descarada y burlona.
-Mi mujer estará mas que encantada de que mantenga mi polla lejos de ella. No solemos congeniar en la cama últimamente... al menos no juntos.
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Edén
RomanceVive entre sombras, de noche y siempre encerrada en Edén. Es su hogar, su refugio, el lugar donde ella se encuentra a salvo y puede experimentar con su arte y con ella misma. No tiene pasado, tampoco tiene futuro, solo tiene el ahora. No puede sent...
Capítulo 10
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