ʺ¡Oh por Dios! ¿Desde cuándo le importa tanto la vida privada de sus empleados?ʺ
Contestó Isaí, visiblemente frustrado. Simplemente no podía entender por qué su jefe usaba su tiempo libre para monitorearlos, al grado de entrometerse en sus relaciones amorosas. ¿Que no se suponía que todos esos asuntos personales eran privados?

ʺNo me importan los demás empleados, pero con ustedes dos es muy diferente, pues trabajan directamente conmigo y darme cuenta de lo que está sucediendo es muy fácil para mí. Ustedes dos habían trabajado juntos por varios años, pero recientemente fue que se enamoraronʺ.
Hyun se sentía muy feliz por Isaí y Ana. Estaba siempre tan cerca de ellos que realmente le importaba cómo se sentían.

ʺ¡Nos descubrió! Supongo que ya no tiene sentido ocultarlo, pero por favor no le diga nada a Ana al respecto. Le prometí que no lo comentaría con nadie, y si llegara a enterarse de que se lo dije a usted, se enojará mucho conmigoʺ.
Dijo Isaí con la cabeza agachada. Le había prometido a su novia que mantendrían su relación en secreto y si alguien más llegara a enterarse, estaría en serios problemas.

ʺ¿Creían que podrían mantenerlo en secreto para siempre? No se puede tapar el sol con un dedo. ¿Pero por que mantenerlo en secreto? ¿Por qué les da tanto miedo que los descubran? No tienen por qué ocultarse, solo díganles a todos que están saliendo, y yaʺ.
Hyun nunca tuvo miedo de decir con quién se relacionaba; siempre decía que Saeng era su esposo y que tenían un hermoso hijo.

Aunque al principio sí era un poco reservado. Ante sus ojos, aceptar que estaba enamorado no era nada vergonzoso, por lo tanto no había necesidad de ocultarlo.

ʺSeñor Kim, como bien sabe, Ana es muy tímida. Un día la invité a salir y afortunadamente aceptó, ahora debo ser muy cuidadoso antes de dar cualquier paso. No la quiero hacer enojar o me quedaré sin novia, pues la conozco muy bienʺ.
Justo como Hyun acababa de decir; esos chicos trabajaban directamente con él, y como era muy observador, pudo darse cuenta de todo. Les había resultado imposible encubrir su relación con su jefe, e Isaí no tuvo más remedio que aceptarlo.

ʺComo ustedes lo deseen, pero así como yo me percaté de que ustedes eran novios, Min también podría hacerlo, pues tiene mucha experiencia con cosas del amor. Estoy seguro de que se dará cuenta, créemeʺ.
Hyun no quería hacer pública la relación de esos chicos, solo quería confirmar sus sospechas, por lo que le había pedido a su asistente que le hablara con franqueza.

ʺEso no me preocupa en lo absoluto pues el señor Park ha estado pensando mucho en el joven HyungJun recientemente, así que no tiene tiempo para prestar atención a cosas sin importancia para él, como mi vida personalʺ.
Isaí no se preocupó cuando Hyun le mencionó a JungMin pues él parecía estar muy desanimado en esos días y no mostraba interés en nada, de tal suerte que no estaba de humor para chismear acerca de la vida amorosa de los demás.

ʺ¿Están hablando de mí?ʺ
De pronto Hyun e Isaí escucharon la voz perezosa de JungMin, quien estaba recargado contra la puerta, mostrando una gran sonrisa y parpadeando sus encantadores ojos.

ʺNo. ¿Por qué estaríamos hablando de usted? Usted no es el rey de Romaʺ.
Contestó Isaí con ironía, como si nada hubiera pasado.

ʺNo soy el rey de Roma, sino el dios del amor. No me confundas, podrías arruinar mi reputaciónʺ.
Respondió JungMin, quien parecía estar de mal humor. Su ego estaba más inflado que nunca, pero de pronto, su sonrisa maligna fue reemplazada por una mueca de depresión y soledad.

ʺ¿Cómo va el proyecto militar?ʺ
Preguntó Hyun quien ya estaba acostumbrado al narcisismo de su amigo, así que no dijo nada para refutarlo, después de todo, su amigo era mucho más valioso para él que esos mentados dioses.

ʺNo te preocupes, todo va bien. Nada sucederá sin que yo lo autoriceʺ.
Contestó JungMin mientras caminaba hacia el sofá y se sentaba, apoyándose en el respaldo con su habitual posición de perezoso.

ʺPresta mucha atención a eso, ya que es un proyecto muy importante y no puedes tomarlo a la ligeraʺ.
Dijo Hyun en un tono serio, frunciendo el ceño. Se trataba de un proyecto de construcción en la base del ejército dónde trabajaba su esposo, y no podía avergonzarlo.

ʺ¡Entendido! Ya sabes que puedes confiar en mí. Todo va a estar bien. Ah, si no me equivoco, estaban hablando de mí cuando lleguéʺ.
Dijo JungMin mientras levantaba un dedo, haciendo que pareciera el tema más importante del mundo. Después miró fijamente a Isaí y a Hyun, pues presentía que algo andaba mal.

Habían guardado silencio en cuanto notaron su presencia, de tal forma que estaba completamente seguro de que estaban hablando de él.

ʺMírate, Min. De verdad me preocupasʺ.
Hyun hizo todo lo posible por desviar el tema.

ʺSeñor Kim, si ya no hay ningún otro asunto pendiente entonces volveré a mi trabajoʺ.
Añadió Isaí, pues quería salir de allí lo antes posible. Le sería imposible mantener la calma si JungMin seguía hurgando en el tema, pues no quería que nadie más se enterara de su romance con Ana.

ʺDe acuerdo. ya puedes regresar a tu trabajo. Y no pierdas de vista los movimientos de Kompass Group. Avísame de cualquier cambioʺ.
Dijo Hyun apartando la vista de la pantalla de la computadora para mirar a su asistente. Él creía que Shaun pronto descubriría que las acciones de su compañía habían sido adquiridas en secreto. Había tenido que adquirirlas todas de una sola vez, para anticiparse a cualquier cosa que ese hombre pudiera hacer.

ʺPor cierto, Isaí, ¿tú y Ana ya fijaron una fecha para la boda?ʺ
Preguntó JungMin levantando las cejas y sonriendo perversamente. Esa pregunta puso muy nervioso al joven asistente, quien no sabía qué contestar ni dónde esconderse.

Un Verdadero Amor. 5a Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora