Ni siquiera conozco tu forma
Solo sé que estás ahí;
Siento realmente, que fui...
Un idiota, al no buscarte justo aquí,
Donde escaseaba la vidaTenía miedo, justo de esto,
De sufrir entre mi imaginación,
Y que te repeliera...
La distancia en este sitio
Por mi carga negativaAhora corro en este valle,
Huye de mí cual presa al acecho,
A temeridad programadaMenuda caminata desdichada
Siento que las imágenes cambian
A la vez, que mi horizonte se baña
En un manto de rojo atardecerPersiguiendo sombras en el valle del desierto
Y entre cada tormento pienso, con temor
Que una ráfaga de viento culminase en mi dolor
Que apagase mis llamasPerfecto vidrio he creado
Destilando mi carbón sobre esta fina arena;
Me tortura por dentro, me apena
Sentir que soy, de esta perfecta mezcla, lo sucioVe y dile que la quiero
Deja de mirarme asqueroso lagarto
¿Qué crees que aporta tu mirada en mí, sino depresión?Porque siéntelo, este amor
Ni siquiera tu asquerosa lengua calla
Deja ya de decirme quién soyYa no recuerdo quién era, es cierto
Ni siquiera mis comienzos;
Pero siento que es perfecto...
Verlo todo de este modo
Y camina sobre tus codos
Antes de esperar verme sufrirSolo algo te quiero decir
Antes de verte fracasar
Dando tu primer paso,
Espero tengas hombros sobre los cuales llorar
Cuando a todos, hayas arrancado, sus brazosMiro la tarde caer...
Que con ella frialdad atrae
Y juntos se mantienen despiertos,
La noche enamorada de la frialdad
Yo enamorado de mi desiertoHa sido el banco natural
Sobre el cual mi vista he fijado
Para notar el amor en mi horizonteY lo abrazo, me acuno en su arena
Para sobrevivir a los elementos que azotan
Siento como brota, cómo aparece esa sensación
Que me inspira deslumbrado a caminar mañana
Me muero de ganas
Por despertar y continuar mi empresaY entre mi cabeza,
Parece tan cerca de mí, la distancia
Ella me ha acompañado...
Todo el camino de mi viaje y siento,
Que he pasado estando cerca de lo lejos,
Desde que en la Ira tuve mi estanciaPara nada me siento agotado
Quisiera añadir que a estas horas,
Aún no consigo obtener el sueño
Y solo sueño...
En soñar, cada noche, despierto,
Por el sueño de mi viajeEntre valles y tormentos,
Diré que ya hoy poco me importa
El ¿dónde vengo?, ¿adónde voy?Y siento realmente que estoy
Como típicamente estuve;
Más acá de lo que quiero
Más allá de lo que obtuveEl despertar, pasar las noches,
En este sitio, algo me ha hecho imaginar;
Y al buscar... más allá de las nubes,Que abrumaban mi vista
Mirando siempre hacia el techo,
Ahora cuelgo en la pendiente que ha hecho
Todo un nuevo campo de visión encontrarApareces donde mí una vez más
Mugrienta criatura...
Dime, di ahora a quién ves bajo mis llamasYa ni siquiera llamas
En mí, motivación alguna, a mirar tu rostro;
Tu verde piel, recordar me hace,
A quienes perecían, a carne sucia,
Bajo el hielo, a tiempo congelado, y pies secosEntre cada especulación
Ya no tienes idea de quién soy
Y la verdad yo aún conozco cada detalle de ti
¿Pudieras hacer algo útil y alejarte de aquí?,
¿Brindar tu mano una vez más?
A aquel quien vida te dio en su carneMuerte, peste atrae tu hambre
Sobre este bello lugar;
Sí, aún no deja de serlo
Me siento feliz de verlo todo de este modo,
Jugar el juegoY de presenciar como las imágenes giran
En torno al sin sentido
¡¡Siempre algo nuevo!!Entre cada desvelo, solo mira al horizonte,
¿Lo ves?
Aún sigue ahí, a pesar de cada locura
Que en este valle encuentro;
Pero ahora siento, presiento...
No me ayudarás a subirTe deseo gratitud de algún modo
Y quisiera que sepas
Que aún con mi garganta seca
En este lugar fui quien soyPero en nada me arrepiento
De apartarme de él
Si por esta pendiente,
De mi colina desértica caigoAunque se sentiría extraño,
Morir, tras ver muerto mi sueño,
Esa es hoy mi desventajaDientes picudos como navajas son las rocas
Que, al fondo de esta vista, miro,
Hay debajo de míCreo que aquí termina mi viaje
Me siento yo por primera,
Y última vez quizás...Y mira bien hacia acá,
Al fuego de mis ojos arder,
Escupiría en tu cara
Antes que tu mano tuviese a lamer
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Prisión Humana
FantasyMakroz y Anna, una historia de amor adornada entre lo absurdo de las metáforas, absurdas casi cual la vida. El arrepentimiento al recordar, el sendero que una vez pisamos de pequeños, y destruimos guiados por palabras de rostros anónimos; acepta con...
Desierto
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