Junto a la fogata

Cuento #6.

Recuerdo haber llorado y gritado por ayuda más de una vez, pero fue inútil, nadie la pudo salvar y ese día, un día que debía ser de celebración para su madre se convirtió en una tragedia y el peor día de su vida, aún recuerdo como su madre lloraba y gritaba maldiciendo a aquellas niñas, las cuales no paraban de llorar asustadas, pues su juego de intimidación las llevo a matar.

Por más que lo intento la señora no pudo hacer justicia, los padres de esas niñas eran tan poderosos que al instante taparon el accidente y se llevaron a sus hijas lejos, solo nos quedó resignarnos y aprender a vivir con eso, recuerdo que pasaron semanas donde todo aparentaba ser normal y todos siguieron con sus vidas intentando olvidar aquel desagradable día.

Vanessa tenía otros planes, su alma se quedó atada y no pudo continuar su camino, al principio los guardias contaban que todas las noches veían como una niña corría por los salones riendo y jugando mientras repetía una y otra vez "ven vamos a jugar" a los conserjes les dio tanta lástima que jamás se asustaron o hicieron algo para ahuyentarla, solo la dejaban ser y cada desastre que causaban ellos lo limpiaban sin decir nada.

Así pasaron semanas donde Vanessa se manifestaba en la escuela, incluso cuando yo escuche los rumores decir ir a comprobarlo y efectivamente era ella, recuerdo haber visto su espíritu corriendo y jugando de un lado a otro sin parar de reír e invitarme a jugar con ella, lastimosamente jamás me le atreví a unirme, pues sabía que los fantasmas eran engañosos, antes de mudarme y que mis padres me alejaran de Alessia por el miedo que le tenían a su don, yo me la vivía en su casa.

Ir a su casa era de lo más divertido y sobre todo estar con su abuela, ya que a la vez que le enseñaba a Alessia también me daba consejos a mí y uno de los recuerdos que tengo más presentes es cuando me hablo de los fantasmas engañosos, son aquellos fantasmas que aparentan ser inofensivos, pero son todo lo contrario, buscan atraerte y envolverte para llevarte con ellos, estos fantasmas tienen en común que murieron de manera injusta y jamás alguien fue castigado por eso.

En mi mente siempre quise negar el hecho de que Vanessa se pudo haber convertido en ese tipo de fantasma, pero fue cuestión de tiempo para que manifestara su verdadera naturaleza, Vanessa tuvo dos víctimas a las cuales lastimo gravemente, afortunadamente nadie murió, el director al enterarse de eso busco ayuda, pero nadie pudo liberar su ala, solo eran estafadores que al ver que el fantasma era real salían corriendo, para esas fechas yo tenía años de no ver a Alessia.

No sabía nada de ella, ni de que había sido de su vida, mis padres prohibieron todo contacto con ella una vez que nos mudamos, pero recordaba sus habilidades y las de su abuela por lo que más de dos días estuve buscando su teléfono o alguna manera de contactarla, pero nada Alessia no tenía ninguna red social y no sabía si realmente seguía viviendo en el pueblo, afortunadamente un día antes de partir al pueblo vi una publicación de Owen en la que aparecía una chica con rasgos similares a los de Alessia cuando era niña, cuando me puse en contacto con él, me informo que si era ella y que su cuñado estaba saliendo que ella.

Lo único bueno que me dejo esta tragedia fue le recontarme con mi mejor amiga de la infancia ya que cuando Owen me paso su número y me puse en contacto con ella al instante accedió a ayudarme, tardaron dos días en llegar, pero cuando lo hicieron al instante se pusieron a trabajar en el caso.

Recuerdo ver a Alessia recorriendo todo el lugar esparciendo una especie de humo, a Jasón detrás de ella sin descuidarla ningún momento y a Damián tomando evidencia de todo, pero lo interesante sucedió en la noche cuando Vanessa aprecio y se enfrentó a Alessia, el espíritu de Vanessa se puso tan furioso que intento atacarnos más de una vez, incluso su voz y vocabulario cambio, cada frase que decía iba acompañada con un insultó y ahí fue cuando entendí que mi alumna se había ido para siempre y eso era una simple cosa que ya no partencia a este mundo.

No lo voy a negar pero si me dolió y desgarro darme cuenta de eso y ver en lo que se había convertido aquella dulce niña que no era capaz de dañar a nadie, pero ahora era capaz de asesinar y su sed de sangre era muy fuerte tanto que para acabar con ella y liberarla Alessia necesito de varias oraciones y fuerza sobre todo para controlarla cuando nos empezó a atacar o bueno solo a ellos porque en ningún momento ninguna de sus agresiones iban para mí, al parecer yo era la única segura en ese lugar.

Al final entre gritos e insultos el alma de mi pequeña alumna desapareció y hoy en día espero que este por fin descansando en paz y sea feliz en el lugar que este.

—Uno de mis casos más impactantes —comento Alessia.

Yo solo asentí en respuesta, pues en ese momento cuando le conté la historia de Vanessa también le afecto y conmovió ya que al igual que yo ella también se identificó. Después de ese accidente deje aquella secundaria, me sentía tan incapaz de regresar y sobre todo de ver aquellas personas que pudieron evitar esa tragedia y no lo hicieron por miedo, hoy en día no sé qué fue de aquellas alumnas, pero si espero que aprendan de sus errores y cambien para bien. Hoy solo me queda pedirle perdón a Vanessa por no haber hecho más para ayudarle.

Lo que si se es que su historia no permitiré que se repita y le hare frente a todo el que me intente detener, con ese pensamiento y sintiéndome algo liberada, comienzo a escuchar la siguiente historia. 

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