— Así es.

— Pues hoy lo quiero volver a hacer. — Saque la cajita.

— Están hermosos igual que los primeros

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— Están hermosos igual que los primeros.

— Prepárate porque hoy va a hacer tú mejor día. Desayuna y prepárate.

— ¿Y tú desayuno?

— Está abajo, ve comiendo tú. — Le di un beso en la mejilla y salí de la habitación.

La verdad es que yo ya había desayunado lo que iba a hacer era prepararle la primera sorpresa ya que cuando cumplimos siete años ella me preparo todo un día completo como si fuera mi cumpleaños y prometí que algún día se lo iba a compensar.

Le dejé notas por las llaves de la casa, en el refrigerador y en el mesón de la cocina. Sin más salí de la casa sin hacer ruido.

Camí.

Ya había acabado de desayunar y baje para ver si tal vez Juli estaba hablando con su manager o jugando con los niños pero no encontré a nadie, es como si fueran desaparecido.

Cuando pase por el refrigerador para dejar la bandeja en el lava platos ví una nota que llamo mi atención.

duchate y ponte la ropa más cómoda que tengas.

Te amo.

J.”

Sonríe, lave mi plato y en dónde deje la bandeja ví otra nota.

“Cuando ya estes lista le escribes a
Ana para que te recoja y te lleve
a tu primera sorpresa"

Subí y me aliste para mi primera sorpresa.

Cuando estuve lista, le escribí a Ana la cual me dijo que iba por mi en unos minutos, tome mis llaves y al hacerlo ví otra nota

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Cuando estuve lista, le escribí a Ana la cual me dijo que iba por mi en unos minutos, tome mis llaves y al hacerlo ví otra nota.

Sé lo angustiada que estás por tu segundo libro, así que en este día
quise que te relajaras"

Me sospeche un spa pero no estaba segura.

Salí, salude a Ana y ella me llegó al destino el cual si era un spa.

Entre, me recibieron y me guiaron hasta donde me iban a hacer el masaje, y la verdad es que funcionó porque me puede relajar y no pensar mucho en mi segundo libro.

Al salir ví de nuevo a Ana así que me subí a su auto.

Nos despedimos porque al parecer hasta aquí ella era algo así como mi chófer. Caí en cuenta que en dónde me dejó fue en un restaurante mexicano.

 Caí en cuenta que en dónde me dejó fue en un restaurante mexicano

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Estando adentro veo que Juli estaba sentada así que me acerque.

— Al fin que te veo. — Ella se levantó y me abrazo para luego besarme.

— ¿Si te relajaste? — Pregunto.

— Y no sabes cuánto. En serio muchas gracias.

— No me lo tienes que agradecer. Siéntate y pide lo que quieras.

Nos sentamos y pedimos nuestra comida, nos la pasamos hablando y recordando todas aquellas anécdotas que vivimos. Al pagar obviamente iba a existir esa discusión de quién iba a pagar, discusión que yo gané. Nos levantamos y salimos hasta el auto, dónde nos subimos y ella arranco.

Nuestro destino fue una biblioteca que desde que estábamos en París y sabía que nos teníamos que mudar acá, le pedí a Juli ir y hoy fue el día.

Estuvimos allí un buen rato, pedí prestados algunos libros y nos dirigimos a casa.

Juli.

Ya era de noche y con Cami estábamos viendo una película que cuando terminó le dije que se alistará porque este día todavía no acababa.

Nos vestimos medio elegante.

Nos vestimos medio elegante

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Ya casi estábamos llegando y aunque ella insistía que yo le dijera a dónde íbamos yo me negaba

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Ya casi estábamos llegando y aunque ella insistía que yo le dijera a dónde íbamos yo me negaba.

Cuando llegamos le tape los ojos y la guíe a dónde iba a hacer nuestra cena.

Cuando llegamos le tape los ojos y la guíe a dónde iba a hacer nuestra cena

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— Ya puedes abrir los ojos. — Hablé cuando quite mis manos de su cara.

— Wow mi amor. Muchas gracias. — Me abrazo.

Nos sentamos a cenar y a disfrutar de nuestra velada.

odio a esa morena (g!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora