NUEVE MESES 嬰兒 kookmin

♡ segundo mes.

Le rogaba que sólo fueran unos malditos chocolates y así poder ir a su cuarto para dormir, realmente está muy cansado, el trabajo lo estresaba mucho. Pero si se trata de JiMin, el sueño podía esperar un poco más... Aunque no sabía si iba aguantarlo por mucho más tiempo.

(...)

Esto es lo que quería evitar cuando iban caminando al supermercado. Quiere matar a su novio, pero no matarlo en serio y llenarse sus grandes manos de sangre, no, así no, matarlo a besos en su cara hasta ya no dar más y aburrirse. Lo cual es muy imposible, teniendo a JiMin cerca de él, es super imposible hacerlo.

—[...] ¡Y en un segundo, hizo bum! —Abrió sus manos en el aire y estirando los párpados, su cara reflejando sorpresa— y así fue como derroté a mí último enemigo en Call of duty, ¡Fue una misión arriesgada! ¡Casi me desmayo! —dramatizó. La señora Rhee abrió la boca ante su sorpresa, poniendo la mano frente a esta— pero por suerte, pude ganarla. —finalizó sonriéndole a la mujer, que suspiró aliviada.

"No puedo creer que le sigan el juego." Pensó mientras estaba esperando a que su chico termine de hablar con la mujer que parecía entretenida charlando con el castaño, que ya ni tanto era rubio porque el tinte se le estaba yendo por descuidarse, se podía ver las hierbas rubias en la cabeza. Ya cansado, tomó en una sola mano las bolsas, sí, 2 bolsas que le hizo comprar JiMin solamente para satisfacer sus necesidades de antojos de hombre embarazado por su culpa, y la verdad que no se arrepentía de nada. Volviendo al tema, se acercó a su novio y tomó su mano viendo que tenía intenciones de sentarse al lado de la mujer y seguir hablando.

—Señora Rhee. —Hace una reverencia— lamento interrumpir, pero debemos irnos. Que tenga bonita noche y duerma bien. —miró a su novio, que lo miraba con enojo y cuando iba a protestar JungKook lo arrastra afuera del lugar con Naranja a su costado que corría lo más rápido que podía porque tenía patas cortas. Agachándose lo tomó en sus brazos, viendo a este acomodarse en el pecho del hombre y JiMin a su lado caminando enojado. —Amor.

—Ni me hables, Jeon.

—Estoy muy cansado, amor. No quise seguir escuchando como le ganaste a TaeTae en un versus en el Call of duty. ¡Mira lo que te compré para complacer tus antojos! —Alzó la bolsa— te dije que tengo sueño, acepté venir contigo para cuidarte, me prometiste comprar y volver, ¿Y qué hiciste? te quedaste hablando, estoy muerto de sueño y tú– ¿Amor? ¿Por qué lloras? —detiene el paso mirando preocupado al menor.

—¡Perdóname Koo! —Abrazó el cuello del mayor con cuidado. Sollozando en su hombro— ¡Soy un tonto! ¡No quise que pierdas tus horitas de sueño, pero en serio tenía hambre y–! —siguió hablando. JungKook sonrió, suspirando al ver que su tonto novio se disculpaba; siendo sinceros no está enojado con él, lo contrario.

No quería seguir estando ahí escuchándolo platicar, ni a él, ni a ella cambiando el tema para seguir hablando. Porque tiene sueño, trabajó muy duro hoy. Se inclinó y besó a JiMin, callando el palabrerío que salía de estos, lo besa dulcemente como suele hacer y deja las bolsas en el suelo para seguir besándolo, atrapó su cintura con el brazo izquierdo y profundizó el beso, unos segundos más y se separó de JiMin.

—No estoy echándote la culpa, tampoco quiero que la tengas y no tienes porqué disculparte. No me enojé, pero tengo sueño y quisiera dormir un poco antes de levantarme a trabajar, aunque sea un poquito. —Habló dulce para el menor, ni se había dado cuenta que le habló como a los demás y por eso su novio pensó que estaba enojado- agradezco que tú trabajes en casa.

—Ni me salvo mucho. —Rió— mañana tengo que ir, después de todo, no me estoy muriendo. Puedo ir y atender la empresa solito, Minnie confía en mí. —le da una sonrisa a su novio. JungKook no tan convencido, asintió y besó sus labios para agarrar la bolsa y volver a casa.