El amor definitivamente era una completa mierda, y era la mierda más bonita y dolorosa que había experimentado en su vida.
- Señor Kanawut ¿Está bien? - estaba tan sumergido en su miseria que no notó que el jefe de guardias estaba ahí.
- Eh... Si, si no se preocupe, solo salí un rato por aire - dijo secándose las lágrimas con rapidez - Gracias Will, de verdad no sucede nada, puede volver a sus actividades - dijo caminando nuevamente dentro de la hacienda sin dejar que el pobre guardia dijera otra palabra.
- "Tan hermoso incluso cuando su rostro está empapado de lágrimas" - fue el pensamiento del guardia mientras lo observaba alejarse.
Era muy cierto que Mew no era el único que había caído ante esos bonitos ojos, y era muy peligroso no saberlo...
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La mañana siguiente llegó con un amanecer hermoso, los rayos del sol no eran tan brillantes como otros días pero definitivamente, habían dado a Gulf la suficiente estabilidad para no caer por los asuntos de su corazón, después de meditarlo mucho tiempo con la almohada llegó a la conclusión de que no dejaría que su amor no correspondido lo derribar, solamente era un detalle insignificante, además, que Mew no lo amara no significaba que no lo quisiera, y con algo de suerte y mucho, mucho tiempo, su marido podría llegar a quererlo un poco, quizá llegaría a escuchar alguna vez un simple "te quiero" de sus labios de verdad, con un significado más allá de un amigo, cómo se quiere a una pareja, así que golpeando sus mejillas y suspirando se levantó antes que su esposo y pidió a Becky su baño, así cuando su esposo se levantará él estaría listo y podría tener una agradable mañana con su hermana, quién tendría que volver dentro de una semana a casa para recibir el año con su madre y hermanas, desconocía si su padre asistirá pero ese ya no sería su problema, tampoco dejaría que él condicionara su felicidad.
- Por favor que suban a la habitación de Mali té de canela con miel, le gusta mucho, también que los panqueques no estén muy cocidos, es una consentida y odia que su comida esté quemada - dijo a una de las cocineras que preparaba el desayuno.
- Si señor -
- Estaré toda la mañana con mi hermana, así que necesito que preparen algunas galletas para la hora del té - informó llevando el mismo la bandeja con el desayuno de su esposo y el suyo.
- ¡Señor no es necesario! ¡Yo lo llevo! - se ofreció una de las sirvientas que recién entraban a la cocina.
- No te preocupes, mejor ayuda a Sally a terminar el desayuno, tenemos casa llena y eso significa más trabajo - habló sonriendo.
Muchas veces el evadir las emociones era el mejor camino para no dejarse caer ante la decepción y el dolor, pero cada ser humano lo enfrenta diferente, Gulf quería pensar que si hoy su marido no lo quería, posiblemente en un futuro sí, y él lucharía con todas sus fuerzas para que ese futuro si se haga realidad, nadie le dijo que la vida matrimonial sería sencilla y tampoco se casó para hacer su vida más fácil, la sociedad miraba al matrimonio como una forma de negocio y salvación, teniendo en cuenta que es lo único que les enseñan a los jóvenes casaderos desde muy pequeños, pues no está permitido saber más que los hombres, ellos estudian, van a la universidad y se preparan toda su vida para trabajar y conseguir una gran fortuna, para luego si quieren casarse y morirse podridos en dinero dejando su legado a sus hijos varones, las mujeres y donceles no tienen esa opción, o te casas o terminas en la calle sin nadie que se encargue de ti y tus gastos, porque no se les permite estudiar ni saber más allá de la escritura y matemática básica, el matrimonio significaba salvación, era un enlace meramente comercial, buscaban el mejor postor para sus hijos pagando una buena dote que sería una mera compensación por el futuro incierto de la nueva pareja, muy conveniente para los hombres que solo reciben dinero por crear descendencia.
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MI AMANECER
RandomPrimer libro de la trilogía "A tiempo para enamorarme de ti" Cuando él apellido de la familia Jongcheveevat se ve amenazado por la falta de herederos, la carga de seguir con la dinastía radica en el hijo menor de los Jongcheveevat, un hombre noble...
CAPÍTULO 15. UN PRETENDIENTE MUY INSISTENTE.
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