78. Séptimo año: Horrocruxes.

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—Hola.—respondieron al mismo tiempo.

—Rhea ¿sabes si Scorpius está en su habitación? Necesito verlo.—pregunté.

—Si, había vuelto hace poco de las prácticas de quidditch.—respondió.

—Genial ¿me haces pasar a la sala común?

—Claro.—asintió levantándose de su asiento.—Ya vuelvo.—le dijo a Louise antes de irse.

Caminamos rápidamente hacia la entrada, y al hacerme pasar volvió a irse hacia la biblioteca.

Caminé por la sala común en busca de Vinda, evitando las miradas de algunos Slytherins, hasta que la encontré bajando las escaleras.

—Vinda.—dije al verla.

—Alhena, hola.—murmuró.

Algo andaba mal con ella, no se veía para nada bien. Estaba más pálida de lo normal, tenía ojeras bajo los ojos, los labios rotos y las manos con rasguños.

—¿Puedo preguntarte algo?—se puso tensa ante mi pregunta.

—Depende.

—Es para una tarea de historia de la magia.—me miró extrañada.—Estamos leyendo el libro que el profesor nos pidió al comienzo del año pero nombra unos objetos que no se que son y pensé que tal vez tu sepas.

—¿Cuales objetos?—preguntó nerviosa.—¿Por qué yo?

—Vi que sacaste unos libros de la sección prohibida que hablaba sobre eso.—su mandíbula se tensó y soltó un suspiro.—Necesito saber que son los Horrocruxes.

—¿Cómo supiste sobre el permiso falso?—me miró fijamente y la miré sorprendida.

—Yo no dije nada acerca de un permiso falso.—sus ojos se aguaron.

—¿Qué sabes?

—Nada.—negué.—No diré nada acerca del permiso falso si eso quieres.—ella asintió.—¿Qué son los Horrocruxes?

—¿Alguien te envió?—hice una mueca al escucharla.

—¿Qué?—pregunté extrañada.—¡No! Es sólo una tarea.—se quedó callada por unos segundos.

—No tengo la copia del libro.

—¿Hiciste una copia?—cerró sus ojos.

—Ni se te ocurra decir una palabra.—murmuró acercándose a mi.

—No diré nada.—murmuré.

—Lárgate.—dijo con seriedad mientras lágrimas caían de sus mejillas.

La miré por unos segundos antes de voltearme y salir de la sala común de Slytherin para ir a la de Gryffindor.

Vinda falsificó un permiso e hizo copias de los libros prohibidos.

Está ocultando algo.

—¿Alhena?—la voz de James me interrumpió en cuanto llegué a la sala común.—¿Estás bien?

—James, em si.—asentí y me senté junto a el en uno de los sofás.

—¿Dónde estabas?—preguntó.

—Fui a Slytherin.—hice una mueca.—Descubrí más sobre el gira tiempos, creo.

—¿Que descubriste?

—Vinda Rosier falsificó permisos para sacar libros de la biblioteca el año pasado, uno sobre gira tiempos y otro sobre magia oscura, la soñora Dodds dijo que ese libro de magia oscura contenía información sobre Horrocruxes y Vinda hizo copias de esos libros antes de devolverlos.—expliqué.

—¿Cómo sabes eso?

—El año pasado cuando me castigaron, mi tarea era verificar que cada alumno haya devuelto el libro que prestó, Vinda no había devuelto el suyo y la señora Dodds dijo que Vinda no debería leerlos porque con esos libros se habían formado los magos oscuros.—hice una pausa.—El libro de historia de la magia del señor Binns nombra a los Horrocruxes y al señor oscuro pero no tiene permitido decir que es lo que son, así que me colé a Slytherin y hablé con ella.

—¿Te colaste a Slytherin? ¿Cómo?

—Con ayuda de Rhea, pero le dije que iba a ver a Scorpius.—expliqué.—Se veía muy mal, me preguntó si alguien me había enviado a interrogarla, que no dijera ni una sola palabra e incluso lloró.

—Mierda.—murmuró James soltando un suspiro.—¿Y qué tiene que ver todo esto con el gira tiempos?

—Creo que los Horrocruxes tienen que ver algo con el señor oscuro y los necesitan para hacerlo volver.

—¿Si sabes que son?—negué.—No se mucho tampoco, pero puedo decirte lo poco que se.

—Dime.—asentí.

—Son objetos de magia oscura, se utiliza para meter tu alma en eso.—explicó.—Puede ser cualquier cosa, un libro, un anillo, una copa...una persona.—agregó.

—¿Cómo sabes eso?

—Mi padre me lo contó, durante la segunda guerra debió buscar siete Horrocruxes.—hizo una pausa.—El era uno.

—¿Qué?—pregunté asombrada.

—Así es, pero es lo único que se. No le gusta hablar de eso ni que nosotros hablemos de eso tampoco.

—Ahora sabemos algo, por seguro.—lo miré.—Necesitan esos Horrocruxes para hacerlo volver.

—Si pero es imposible, fueron destruídos.

Estrellas (James Sirius Potter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora