𝓝𝓸𝓼𝓸𝓽𝓻𝓪𝓼

El reencuentro

No puedo dejar de mirarla, de tocarla, de probarla, de olerla.

Nuestras lenguas parecen bailar entre ellas; su cuerpo se perla de una fina capa de sudor al igual que el mío.

No hay principio ni fin, solo ella y yo.

Todo se vino abajo cuando abrí los ojos de pronto y me senté en la cama.

Era solo un sueño. Pero lo que había sentido parecía muy real.

Estaba completamente duro y gotas de sudor caían por mi frente.

Todavía podía oír sus jadeos en mi cabeza.

Volví a tumbarme para ponerme cómodo. Lentamente mi mano bajó hasta mis pantalones. No podía resistir más, con la respiración agitada y su imagen en mi cabeza empecé a masturbarme.

Al principio lento, pero cada vez más rápido, más agresivo.

Su imagen, sus labios, sus ojos, toda ella nublaba mis pensamientos.

Cuando terminé fui al baño a echarme agua en la cara para bajar la temperatura de mi cuerpo.

Más relajado volví a la cama.

¿Que mierda pasaba conmigo? ¿Que me había hecho esa mujer? Quizás es algún tipo de bruja o de ramera que encandila a hombres ricos para dejarlos secos. Pero ella no tenía pinta de saber quién era yo.

Eso era imposible, todo el mundo sabe quiénes son los Uchiha, estoy dandole muchas vueltas al asunto.

Con ella en la cabeza volví a caer en los brazos de Morfeo.

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Seguía con los ojos cerrados cuando escuché como alguien abría la cortina y dejaba entrar toda la luz en mi cuarto.

-Sasuke debes despertar ya- era mi madre. Intenté cubrirme la cabeza con mi almohada pero ella la retiró.

-Mph- hice un sonido algo molesto para que se fuese

-No rechistes y vístete, hoy te comprometiste a salir con Karin - no recuerdo eso, pero siendo sinceros no me acuerdo de casi nada de lo que ocurrió ayer

Mi madre salió de la habitación y yo me levanté ha vestirme.

Recordaba todavía el sueño de la noche anterior, quizás salir con Karin y tirarmela sacaría a aquella mujer de mi cabeza.

Baje a la cocina donde ya no había nadie excepto mi tío.

-Sasuke, muchacho, ¿Que tal?- aunque sus palabras pareciesen amables, su tono era frío e indiferente

-Estoy bien tío, hoy saldré con Karin -

-¿La hija de Mito y Hashirama?- noté como todos sus músculos se tensaban.

No era un secreto que Naori y Madara se casaron por puro acuerdo, pero también corría el rumor de que Madara y Hashirama siempre fueron grandes amigos; pero los dos pelearon por el amor de la misma mujer, está eligió a Hashirama, y esto rompió la amistad entre los dos hombres.

Madara nunca hablaba de sus sentimientos por lo que nunca supe si eran ciertos los rumores.

-Tio, ¿Puedo preguntar algo?- dije tomando asiento en frente.
El solo asintió así que empezé a hablar - ¿Los rumores sobre el amorío entre tú y Mito sin ciertos?

Él se tenso aún más y afiló su mirada. Paso un largo rato antes de que hablase- Sasuke, solo puedo decirte una cosa, las mujeres son como una mala droga, te vuelven completamente adicto y te sientes en la cima del mundo, pero a la larga destruyen todo lo que queda de ti.