-¿Aun no lo entiendes Potter? Tu eres mi perra aquí.
Grace transmigra al mundo de Harry Potter, ella tuvo muchas complicaciones en su vida anterior y ahora solo quiere disfrutar de este extraño sueño tan placentero.
Y lo mejor? Se cogería a su Sugar...
—N-no te atreverias! —grito avergonzada Grace viendo como el Potter le sonreía burlonamente antes de abrir su boca y lo que vio la sorprendió.
Frente a sus ojos lo que antes era un lengua perfectamente normal ahora era una larga, gruesa y bífida lengua de serpiente.
Sin esperar James paso su lengua por sus pliegues como si de un helado se tratase logrando que la fémina gritara a todo pulmón, su Succubo vibraba de placer y solo había Sido una lamida.
—Joder Beby sabes delicioso —ambas manos en los muslos de Grace los apretujaron más serca de su cara hundiéndose en el sabor de su compañera que gemía fuerte mientras revolvía su cabello.
Ya no se resistía eso era bueno, James podría reclamarla aquí y ahora nada lo pararía.
Subiendo un poco más arriba encontró ese botoncito que la aria gritar de placer, sonriendo macabramente se lo llevó a la boca chupando con esmero.
Grace se encorvo como nunca antes casi arrancando los cabellos del Potter se aferró a esa exquisita sensación de placer, no sentía eso desde...nunca en realidad.
Jamás un hombre abia llegando a este punto de placer en su persona.
James jugaba con su clítoris dando mordidas leves y chupetones que le robaban el alma del cuerpo.
Era tanto el placer que sentía James que rugió cómo una bestia asustando a Grace que en medio de su éxtasis chillo llegando a su orgasmo asustada y exitada sin duda una combinación realmente rara.
El Potter relamiéndose los labios satisfecho dejo el botón maltratado y bajo lentamente asta llegar al lugar donde se unirían por fin, Grace soltaba fluidos a montones ya preparada por su Succubo.
Pero no lo estaba mentalmente esto por muy jodidamente glorioso que fuera no estaba preparada para hacerlo.
Que? Si bueno ella intento aprovecharse del Caliente Potter dormido pero hey! Ella solamente le hiba a dar una mamada.
Una!!
Tenía que alimentarse y en ese momento no pensó en que la descubrirían.
James abrió sus piernas a mas no poder quedando entre ellas, Grace lo examino con la mirada llegando a su inhumano miembro y rápidamente desvío la mirada.
Sangriento Potter ahora ya no le caía tan bien, tonto y semental Potter no sabes cuánto la molestaba.
Se avergonzaba de si misma y de su cuerpo tan receptivo a el.
—P-Para —Fue lo único que logro pronunciar y las cejas de James se fruncieron.
Su mano acunó su rostro y se odio por querer más de su toque.
Estaba por abrir la boca para cerrarla de golpe antes de bajar la mirada sorprendida.
James movía su cadera de arriba a abajo entre sus piernas su polla estaba en sus pliegues,podía sentir sus venas palpitar atraves de su sexo y el sonido húmedo de su verga al frotar su lubricante natural.
Cada tanto daba una embestida más fuerte contra su entrada tentandola.
Era insoportable ella lo quería joder SI.
Ser uno con su amor platónico.
Pero solo había una cosa que la detenía en sucumbir a sus deseos más carnales y biológicos.
La imagen de un James abrazado a Lily Evans.
No sabía porque, o tal vez si, pero eso no tenía sentido ella quería al Potter pero no esperaba sentir...celos?
Por un hombre que seguramente solo deseaba tener sexo con ella.
No, no podía.
Ella podría acostarse con quién quisiera para alimentarse pero no podía acostarse con el porque el...significaba mucho más.
Mucho más que solo una noche de diversión.
Desplegando sus alas tiró atrás a James que chico contra uno de sus muebles destrozándolo, pronto una gota de sangre broto de su nariz y se apresuró a sacarsela, no tenía tiempo para sangrar.
Eso dijo pero su determinación no fue suficiente para que no se desplomara en el suelo vomitando sangre.
—¡Grace! —Respirando con dificultad vio como sin ningún esfuerzo James salía de los escombros para acercarse a ella,la tomo entre sus brazos y en sus ojos ya no poseian la lujuria de antes —Merlin, debo llevarte San Mungo joder Baby estás débil.
¿Acaso se estaba preocupando por ella?
Porque James, tu no me conoces.
Además ¿Como sabes mi nombre?
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