"Olivia"

"Si, majestad"

Olivia sonrió lo mas suavemente posible, aún así, su mirada miró hacia la puerta.

'... ¿Por qué no obtener una señal?'

Cuando todo terminara, se había prometido que el purificador vendría a Olivia vestido de sacerdote, preocupado por su salud, el sacerdote pretendería sacarla de aquí naturalmente.

'¿Está tomando tanto tiempo?'

Sin embargo, el purificador no llega incluso después de que haya pasado el tiempo esperado

'¿Qué esta pasando?'

'¿Será que lo atraparon?'

'No, entonces no podría estar tan silencioso'

Si el purificador y los demás fueran atrapados mientras realizaban su trabajo, el palacio imperial habría tenido que entrar en caos en este momento. Porque un forastero irrumpió en el palacio imperial, pero ahora está quieto.

'Hasta el punto de asfixia'

El palacio imperial estaba extrañamente tranquilo

'¿Qué diré ahora?'

Olivia había intercambiado varias conversaciones con el emperador, desde la historia de si se encontraron los cuerpos del primer y cuarto principe, hasta la pregunta de si el cuerpo y la mente del emperador están bien, e incluso mientras le decía al emperador que estaba preocupado por su lesión que estaba bien, incluso dio matices de que aún estaba enfermo, además de eso, trató de traer todo tipo de historias para continuar esta conversación, es el límite, pero eso también ha llegado a su límite.

"En primer lugar, no he hablado con su magestad durante tanto tiempo"

El emperador se preocupó por lo principes primero y cuarto, tanto como favoritismo, en cambio, prestó atención a otros niños, sin descuidarlos.

"Olivia"

El emperador llamó a la princesa una vez mas

'Maldita sea'

Escupió palabras duras en su adentros y se encontró con la mirada del emperador, en el rostro del emperador,  como en el de ella, sobresalían líneas negras como una telaraña, una suave sonrisa apareció en los labios del emperador, como un padre trata a sus hijos.

"Creo que podemos dejar de hablar ahora ¿Verdad?"

"... Padre"

Olivia llamó al emperador como si estuviera impactada, mirandola el emperador preguntó

"En cambio, quiero que me digas el porque estás aquí"

El corazon de Olivia se hundió cuando miró la cara del emperador cuya sonrisa había desaparecido.

'Como era de esperar, no hay forma de que el emperador vea mi visita como algo inocente'

¿Qué tengo que hacer?

Por un momento, Olivia tuvo ese pensamiento, pero al mismo tiempo también tuvo ese pensamiento.

'¿Qué puedo hacer? No tengo nada que decirle'

Viva y muerta.

Eso también hace un tiempo.

Y entonces una verdad incleiblemente feoa agitó la cabeza de Olivia, los últimos días, en toda su vida, nada había sacudido su mundo en tan poco tiempo, para Olivia, que había pasado por tal cosa, la existencia de un padre intentando averiguar las intenciones de su hijo.

BOOK II: CÁZADOR DE CAZADORES.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora