¡¿Esposa de mi jefe?! © #1 [Amores Inesperados] *REESCRIBIENDO*

CARLOS LOMBARDI

—¿Ok?, Voy a presentarme a los trabajadores, ¿No te molesta que dejemos la conversación para después, verdad?

—Claro que no, vé.

—Gracias, nos vemos luego.

Licencia Lilliam hizo lo que le pedí y ahora me dispongo a hablar a los trabajadores.

—Buenos días a todos, soy Carlos Lombardi, me haré cargo de la empresa mientras no esté mi primo Noah, así que me verán muy seguido, espero que trabajemos bien y si tienen alguna duda me pueden preguntar sin ningún problema y muchas gracias, que tengan buen día.

Fué algo conciso, preciso y exacto. Cómo a Noah le hubiera gustado. Estaría orgulloso de mí.

Todos comenzaron a retirarse a sus puestos de trabajo, cuando divisé a la chica más linda que había visto en mi vida, es ojos castaños oscuros, cabello castaño oscuro también, es baja de estatura, lleva en vestido muy bonito y se ve que ella es muy decente, eso es algo que me agrada.

Se me ocurre hacer un recorrido por las diferentes áreas de la empresa para así poder encontrarme con esa linda chica.

Después de haberle pedido a licencia Lilliam que por favor me diera un recorrido por la empresa y ella aceptara, ahora me estoy dirigiendo al área de administración y ahí está.

—Muy buenos días, el es el Señor Carlos Lombardi, como ya todos saben, se hará cargo de la empresa junto con el señor Pietro durante la ausencia de el señor Noah —mencionó Lilliam.

—Mucho gusto, es un placer conocerlos, ya escucharon mi nombre y ahora quiero saber los suyos.

—Mi nombre es Abraham, es un placer tenerlo en esta área— dijo un chico muy carismático.

—Yo soy Stefani, y también es un placer conocerlo— ésta vez habló una chica bastante alegre.

—Mi nombre es Ruby Gómez— dijo la chica que me tenía como loco buscándola por toda la empresa, es un poco tímida por lo que observé, pero eso hace que me guste más.

—Ellos son los que están de pasantía por aquí, son estudiantes de cuarto año de la universidad y están aprendiendo la labor y todo lo que esté relacionado a la administración.

—Fué un gusto— dije, y me quedé observando unos segundos a Ruby.

Después de recorrer otras áreas de la empresa, me fuí a mi oficina a trabajar.

Más tarde, a la hora del almuerzo, tuve una larga conversación con Pietro sobre nuestras vidas, se mostró bastante alegre al volver a verme y yo también me alegré de verlo nuevamente, le agradecí a Dios porque fué un encuentro que resultó bastante bien.

...

Ya han pasado dos semanas de estar aquí, mi relación con Ruby ha mejorado en el ámbito laboral y pienso invitarla a cenar, me dí cuenta de que es cristiana, en realidad ya lo sabía porque se le nota a kilómetros, pero igual le pregunté para sacarle un tema de conversación el primer día que hablamos.

Que ella sea cristiana es una buena noticia para mí, hace como una semana comencé a visitar su congregación y por lo que me han contado los chicos, mi primo también asistía a la misma.

Como asisto a la iglesia Grace y me he involucrado mucho en las actividades, ella se ha convertido en mi amiga, luego de que yo se lo propusiera, ya han pasado tres días desde que le ofrecí mi amistad y es por esa razón que la invitaré a cenar.

—Hola Ruby.

—Hola— me saludó un poco tímida.

—Quiero invitarte a cenar, si no te molesta.

—No, claro que no me molesta, pero... no me gusta salir en la noche, como dices cena está claro que será en la noche ¿Cierto?

—Si —contesté.

—Sé que somos amigos, no me malinterpretes, pero debo cuidar mi testimonio. No sé cómo sean los hermanos en cristo en tu país, pero aquí debes tener mucho cuidado.

—Entiendo, entonces a almorzar ¿Qué dices?

—Esta bien —respondió sonriendo.

El almuerzo lo tengo programado para mañana, espero que sea todo un éxito.

RUBY GÓMEZ

Carlos Lombardi me invitó a almorzar. Resulta que ahora somos amigos.

Ya en el restaurante ordenamos el almuerzo y platicamos de muchos temas, Carlos me contó de su infancia con su primo, yo le conté de cosas que me pasaron en la secundaria y otros temas, hasta de nuestra vida cristiana.

Carlos me resulta un tipo agradable, me cae bien, no me resultó difícil entablar conversación con él, aunque debo confesar que al principio si me costó, en mi defensa, soy muy tímida cuando se trata de hablar con chicos.

Le pregunté acerca de su trabajo y me dijo que va muy bien, dice que le agrada la personalidad de Silvia y por lo que me comentó ella, también le agrada como es Carlos porque no es como Noah de monstruoso. Esto último me hizo reír, porque no es tan malo como dice.

Cuando terminamos de almorzar me fui a casa en taxi y fuí directo a donde vive mi vecina para invitarla a la iglesia en la noche, ella accedió.

Ya en la iglesia la presencia de Dios se movió de una manera sobrenatural y mi Luisa aceptó a Jesús como su salvador, yo estaba muy contenta por ello.

Después de que el pastor ministrara, después del mensaje, nos despedimos diciendo el texto lema de todas los noches.

Aunque tu principio haya sido pequeño, tu postrer estado será muy grande

Job 8:7

En este momento me dirijo al grupo de jóvenes para despedirme.

—Dios les bendiga chicos.

—Amén —respondieron todos al unísono, como siempre lo hacen.

—Nos vemos mañana  —dijo Carlos.

—Hasta mañana— respondimos Abraham, Stefani y yo, porque los tres íbamos saliendo, yo junto a Luisa.

Me dirigí a mi casa muy contenta de que mi vecina haya aceptado a Jesús en su vida, hasta su bebé mostraba alegría, Matías es un amor.

Me dirigí a mi piso y una vez llegué, me bebí un zumo de manzana, me cepillé, me puse mi pijama, oré y me acosté a dormir porque mañana sería un día libre pero tengo planeado visitar a mis padres y para hacerlo debo levantarme temprano. Le avisaré a Carlos que no podré estar libre mañana, para el almuerzo, sí, me volvió a invitar otra vez.

Será cuando regrese.

***

¡Aquí tenemos la imagen de nuestro querido Carlos Lombardi!

Carlos Lombardi