Él los usaba y después los mataba.

Hasta que un día, lamentablemente se vio obligado a hacer una excepción.

"Harry"

Lo había conocido solo días antes de que follaran.

No parecía un completo bastardo..

Pero eso a Tae no le importaba.

Ese día intentó matarlo.

De verdad que si.

Pero el muy maldito se habia dado cuenta. Deteniendolo al instante. Y diciendole que no importaba el daño que le hiciera, que él estaría siempre a su lado.

Taehyung en ese momento no sabía si reír o reír.

"Me das pena" pensó.

Decidió no matarlo.
Pensó que algún día le serviría de algo.

Y aún pensaba eso. Usaría a Harry para su beneficio y después solo dejaría de existir.

Una de las razones por las que Tae mataba a todos los Alfas con quienes follaba.
Era porque le nacía desde lo más profundo de él.

Siempre.

Sin importar quien fuera el Alfa.
Esa necesidad siempre estaba ahí..

Pero entonces...

¿Por qué justo ahora no sentía eso con Jungkook?

Es decir..

Aún si sintiera esa necesidad..no podría hacer nada...pero...

El tema era que no la estaba sintiendo...

Esa necesidad de querer ver sangre..
Esa necesidad de ver sufrimiento..en Alfas.

Esa necesidad no estaba.

No se sentía..

Simplemente no había lugar para ella.

Taehyung no sabía que estaba sintiendo..

-¿Qué quieres comer?- escucho que Jungkook le preguntaba. Al mismo tiempo en que salía de él.

-Mm no sé ¿Qué quieres comer tú?- le respondió. Acomodándose en su pecho.

-Pastel- se oyó de la boca de Jungkook -Puedo hacer uno de naranjas-

-Claro se oye bien-

-Quiero llevarte conmigo- soltó Jungkook.

-¿Quieres que te acompañe a la cocina?

-Puedes sentarte en una silla mientras hago el pastel-...-No quiero que te quedes aquí solo y pienses que después de esto algo va a cambiar entre nosotros o algo. Tú sigues siendo lo más bello que tengo. Tae- le dijo mirando sus ojos con cariño.

-C-claro- fue lo único que le respondió.
Todo lo que había dicho. Todo eso. Había causado en Tae, un nudo en su garganta..

Jungkook le sonrio y lo cargo hasta salir de la habitación y llegar a la cocina.

Lo dejó encima de la pequeña mesa. Y lo cubrió con una manta que había traído.

Luego dejó un beso sobre su cabeza...beso que fue acompañado por una sonrisa.

Se alejó del Omega y sacó un par de envases. Al mismo tiempo en que sacaba naranjas, harina, huevos, azúcar y una pequeña barra de chocolate.

-Quiero ir al baño- soltó de repente Tae.

-¿Puedes ir solo?- le preguntó.

-S-si- Respondió saltando ligeramente de la mesa. -Ah~ - Gimió al sentir su espalda baja doler.

𝚆𝚒𝚗𝚝𝚎𝚛 𝙱𝚕𝚘𝚘𝚍   Donde viven las historias. Descúbrelo ahora