Desde que tenía uso de razón se le había dicho que tiene una prometida, él no entendía en un principio lo que quería decir aquello, eso, hasta que sus maestros particulares le dijeron su significado.

[Esposa] [Compañera de cultivo].

Jin ZiXuan la odió, aunque al ser pequeño el odio no le duro mucho, más lo que prevaleció fue la curiosidad, asi que al obtener un retrato de la menor y muchas alabanzas en cuanto a su belleza y personalidad, cayó flechado.

Si, asi de fácil fue.

El pequeño de ojos castaños no pude evitar estar de acuerdo en cuanto a su belleza, ella era simplemente adorable y frágil, como una perfecta muñeca de la más fina porcelana.

... Pero aún así la odiaba, una vez más, él no iba a casarse con ella, no cedería ante sus padres. Es más, le diría que se olvidará de él, que jamás podría corresponder sus sentimientos por mucho que lo amara.

La risa jovial y suave de un infante hizo que Jin ZiXuan alzará su mirada he hiciera caer por la misma la taza de té que estaba por tomar.

-¡A-Xuan! -grito Madame Jin preocupada-

Las doncellas rápidamente se acercaron y limpiaron aquel pequeño desastre.

Jin ZiXuan se ruborizo, bajando la mirada se limpió la inexistente pelusa de sus túnicas, frunciendo el ceño volvió a alzar la mirada, pretendiendo que la pequeña Jiang no lo descoloco con solo su inocente sonrisa.

-Oh, ZiYuan -saludo Madame Jin en cuanto vio a la araña violeta- lamento el alboroto -suspiro, colocándose de pie- este hijo mío es aún torpe -negó sonriendo ligeramente-

Las mujeres, especialmente la de orbes y cabellos castaños, se encontraron en un efusivo abrazo aún y con la pequeña YanLi en brazos.

-A-Li, querida, estas tan hermosa como siempre -alago la mujer con una maternal sonrisa-

YanLi sonrió, con un toque hizo que su A-Niang la bajara para realizar una perfecta reverencia de mejillas sonrojadas.

-¡Oh, dioses! ¡Vamos! ¡Rapido, rápido, vamos a sentarnos! -dijo con alegría la Madame de las peonias-

Jin ZiXuan, ignorando por su A-Niang y los presentes, simplemente se cruzó de brazos indignado, eso hasta que recibió una corta mirada y sonrisa por parte de quien sería su prometida.

-¡Hmpo! -bufo, desviando la mirada-

Mejor que no se haga ilusiones porque el estaba a mil años luz de casarse con ella.

Jiang YanLi, al ver su actitud, recordó los poco convencionales consejos de su madre, así que dignamente aceptó la taza de té que le era servido, ignorando al joven mientras bebía y escuchaba la plática de las mujeres mayores.

-¡¿Eso le dijistes?! -exclamó entre sorprendida y divertida Madame Jin-

Yuri bufo, en un principio creyó que no podría adaptarse bien al papel de "mejor amiga" de Madame Jin, más una vez más comprobó que el chisme unía a las personas, más si eran contra alguien tan nefasto como Jin GuangShan

-El se lo buscó -gruñi-

Madame Jin rio, notando en ese momento a su enfurruñado hijo.

-A-Xuan, A-Li, deben estar aburridos -sonrió hacia los menores- ¿porque no dan un paseó juntos? -sugirió-

-"Oh, oh, oh" -pensé al ver cómo el regordete niño arrugaba su cara- "esto se pondrá bueno" -me dije con cierta diversión-

Un golpe contra la mesa de madera, de las más cara podrían imaginar los presentes, atrajo la atención de Jiang YanLi y su madre.

¿¡Soy La Araña Violeta!? -MDZS- [En Pausa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora