Bang Christopher es el empresario mas poderoso y millonario de todo corea a sus 25 años, teniendo en su patrimonio miles de negocios con los cuales a formado una de las fortunas más grandes del mundo, pero a pesar de estar forrado en dinero siempre...
- De tomar no sabía muy bien que traerte, en lo personal me gusta comer el bulgogi con maehswasu pero no se con que te guste comerlo así que traje maehswasu y cheongju.
- Awww eres un amor, hasta de tomar me trajiste.
- Pues si no vaya a hacer que se te atore la comida en la garganta.
- JAJAJAJAJA ay mi cielo, para mi seria un honor morir ahogado por tu comida. Pero mejor ven – palmea sus piernas – siente aquí conmigo a comer, ¿sí?
- ¿Pero y si alguien entra y nos ve?, ¿qué pensaran de ti?
- No te preocupes pediré que no nos molesten y si nos vieran no me importa al contrario le gritaría al mundo entero que te amo.
- En serio, no te importaría que nos vieran juntos o que digan cosas horribles e hirientes hacia los 2.
- Por supuesto que no, pobre de aquella persona que se atreva a ofenderte o hacerte algo porque se seria como meterse con el diablo. Te protegeré contra todo y todos nunca lo dudes mi cielo. – dice mientras acaricia su mejilla – ahora será mejor que comamos antes de que se enfríe la comida no crees.
- Tienes razón deja saco la comida, ¿qué quieres de tomar?
- Emmmm maehswasu, me gusta más que el cheongju.
- De acuerdo deja lo sirvo.
- Señorita Kang – hablo Christopher por el altavoz del teléfono –
- Dígame señor Bang.
- No quiero que me molesten por favor, si alguien pregunta por mi diles que estoy ocupado por favor.
- Sí señor, no se preocupe.
- Gracias.
- Ya esta servida la comida.
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- Wow se ve y debe saber riquísimo.
- A ver di ahhhhh.
- Ahhhhhh – come el pedazo de carne que le dio Felix. –
- ¿Esta bueno?, ¿te gusto?
- Dios esto esta buenísimo Felix, no había comido un bulgogi tan bueno como este ni siquiera en los mejores restaurantes sabe tan bien. – come otro bocado –
- Hay tampoco es para tanto jaja.
- No estoy exagerando, cocinas muy rico. No puedo esperar a probar los hoeddeok.
- Gracias me alegra que te haya gustado, pero los hoeddeok son hasta que termines la comida.
- De acuerdo papá jajaja, hoy estas muy atento conmigo, ¿a qué se debe eso? – dice mientras lo toma por la cintura. –
- Bueno tu has sido muy lindo conmigo, es lo mínimo que puedo hacer.
- No sabes cuanto te adoro corazón.
Así pasaron un rato comiendo y tonteando hasta acabarse todo el bulgogi.
- Oye bby ya acabamos de comer, ¿ahora si me puedes dar un hoeddeok por favor?
- Si, ahora si puedes comerte los hoeddeok – abre el toper – toma uno.
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- Se ven muy buenos. – toma uno –
- Y están buenos, yo me comí uno en la casa.
- Mmmmm están muy suavesitos.
- Te lo dije, además de los hoeddeok ¿qué otros postres te gustan?
- Me gustan mucho los pasteles de vainilla y fresa, el pay de limón, oreo y fresa, adoro la nieve más la de napolitano, las crepas, también me gustan mucho unos dulces muy suavesitos que parecen como si fueran chicles, pero no lo son ¿no se si los conozcas? Cuando salga del trabajo pasare a comprarte unos para que los pruebes estoy seguro que te gustaran, también hay uno chocolates que….
Christopher seguía hablando y hablando mientras que Felix solo lo miraba con gran admiración, poco a poco iba tomándole cariño a aquel hombre sobre el cual estaba sentado, a aquel hombre que lo había hecho sentir especial es tan poco tiempo.
