-¡Hey, hurón!

Ron llegó en ese momento junto a su esposa Lavender Brown y su hijo Hugo. Los dos habían regresado después de la guerra luego de que Lavender entendiera que no debía estar besuqueando a Ron todo el tiempo y que Ron aceptara que todavía sentía algo por ella.

-Aquí estás comadreja-Draco y Ron se abrazaron.

-¿Por qué le dices hurón?-preguntó Narcissa.

-Algún día te lo contaré.

-No, que va. Si quieres se los cuento...

-Algún día, dije-dijo Draco fulminando a Ron con la mirada. Luego centró su atención hacia Hugo-¿Emocionado por tu primer año en Hogwarts, Hugo?

-¡Claro padrino! Ojalá me toque en Gryffindor.

-¿Por qué todo el mundo está tan obsesionado con Gryffindor?-preguntó Draco-todos sabemos cual de las casas es mejor.

-Desde luego-dijo Cho-Ravenclaw.

Draco puso los ojos en blanco mientras los demás se reían.

-¡Chicos, por aquí!

La familia Lupin iba llegando al andén. El joven Teddy, quien luego de unos años se reveló para alivio de su padre que no era un licántropo sino un metamorfomago como su madre, llegó junto a sus padres a la plataforma para despedirse de su primo y de su amigo.

-¡Teddy! ¡Que gusto verte!-James y Teddy chocaron los cinco al encontrarse.

-¿Cómo va todo primo?-preguntó Teddy.

-Genial, gracias-respondió Scorpius-oye, el otro día James y yo te vimos besándote con Victoire.

Teddy se puso rojo.

-En... ¿en serio?

-¡Sí!-respondió James-¡¿Oyeron eso?! ¡Nuestro Teddy tiene novia!

-Me alegro por ti Teddy-dijo Draco sin darle la importancia que los jóvenes esperaban de su parte.

-Gracias tío-dijo Teddy todavía sonrojado-no es algo muy serio todavía, pero vamos avanzando poco a poco.

-Que lindo. Esperar también es bueno-dijo Cho-sólo no te tardes demasiado en dar el siguiente paso cuando estés seguro.

-¿Por qué ya no nos vienes a visitar?-preguntó Rose.

-Mucho trabajo en el Departamento de Misterios-dijo Teddy encogiéndose de hombros-pero si quieren este fin de semana podemos ir a comer con ustedes.

-¿Y si mejor te vienes a vivir con nosotros?-propuso Narcissa-Es más, los tres podrían vivir con nosotros. Yo compartiría habitación con Rose y...

-¡Ni hablar!-dijo Hermione firmemente-¡Tú y tu hermana van a dormir en el mismo cuarto el día que tu padre y yo queramos demoler la mansión!

Volvieron a reírse. En ese momento, sonó un silbato. El tren ya pronto se iría.

-Cuídate Hugo. Dale un beso de nuestra parte a Luna.

Harry Potter y las Reliquias de la Muerte: Amor y Redención.Kde žijí příběhy. Začni objevovat