Las últimas palabras de Johan Liebheart al Dr. Tenma en su sueño y en toda la serie.

Personalidad:

Tenma: ¡No puedes andar matando!
Johan: ¿Por qué no?”

Johan expresando su total falta de empatia.

Johan Liebert puede describirse mejor como una entidad de maldad pura, fuertemente alegórica a la Anticristo y la La Bestia. Su crueldad sin sentido y malicia profunda no parecen humanizarse por rasgos o impulsos como el odio, la venganza, la lujuria, un punto que demostrar, o incluso el sadismo; siendo plenamente consciente de su naturaleza y desprovisto de cualquier necesidad de justificarse a sí mismo, sus acciones son tan sin razón, sin emoción y nihilista como posiblemente haciendo su mal tan literalmente puro y sin diluir como puede ser, dada su falta de cualquier ganancia discernible de ella o incluso una identidad consistente.

Es tal vez por esta razón que él gana tales condenas como monstruo, demonio, vampiro, y por lo que Schuwald afirma haber visto el Infierno en sus ojos. Las claras tendencias psicópatas que exhibe cuando era niño junto con el destino infernal que inflige al orfanato Kinderheim 511, incluso antes de la mayoría de sus traumas pasados demostrar claramente que está lejos de ser víctima de las circunstancias, dados los asesinatos premeditados y calculados de sus familias de acogida; un ex director de dicho orfanato, Hartmann, admite que ni siquiera un lugar tan inhumano podría haber creado una "obra maestra" como Johan. Su creencia más consistente es que toda vida es insignificante, igual solo en la muerte.

Una vez más, como el Anticristo, Johan enmascara su viledad y frialdad con una carilla persuasiva e infalible de compasión y cortesía, y lleva un aura de perfección. Cuando se acerca a otros, es casi angelical tanto en apariencia como en comportamiento, posiblemente también paralelo a Lucifer mismo antes de su caída; Schuwald, antes de caer víctima de los verdaderos colores de Johan, incluso lo describe como no de este mundo debido a su aparente miríada de rasgos favorables. Es un maestro de ajedrez altamente inteligente, paciente y metódico que siempre está cinco pasos por delante, y su destreza sin precedentes para la manipulación le permite usar incluso a los criminales más intransigentes a su favor y corromperlos aún más, de quien dispone invariablemente una vez que su utilidad expira.

Posee la misma capacidad de tortura psicológica y puede persuadir a casi cualquiera a matar a otros o a sí mismos; sin embargo, siempre que sea posible, Johan someterá a sus víctimas al peor sufrimiento y pérdida posible en lugar de matarlos él mismo, como cuando obliga a Helmut Wolf a ver a su esposa, hijos y muchos amigos y conocidos morir uno tras otro, reduciéndolo a un miserable roto y paranoico, a pesar de que él y Anna fueron salvados por Wolf de una experiencia cercana a la muerte. Johan ha expresado una falta similar de gratitud al Dr. Tenma, quien también le había salvado la vida, envenenando a su jefe y compañeros de trabajo, lo que incriminó a Tenma por los asesinatos debido a su severa degradación antes de esto.

Con una expresión inmutable y una manera monótona de hablar, Johan parece ser patológicamente estoico, si no casi desprovisto de emoción; conserva una calma inquietante independientemente de las atrocidades que comete y cuando se enfrenta a ellas. Solo una vez ha expresado una emoción genuina al redescubrir El monstruo sin nombre (un libro ilustrado que es un componente clave de su pasado) Gritando y desmayándose por estar abrumado por sus recuerdos. En dos ocasiones, derrama lágrimas que son, con toda probabilidad, engañosas. Él muestra una sonrisa maliciosa al atacar implacablemente la psique del detective Richard Brown, que es el único caso que puede implicar sadismo genuino; de lo contrario, tiene suficiente inclinación por la corrupción y la ruina de vidas para tratarla como una mundanidad.

Las únicas dos personas que parece negarse a matar son Anna y Tenma, lo más probable es que simplemente jueguen con ellos. A menudo se cree que Johan realmente se preocupa por Anna, sin embargo, viendo que no tiene reparos con (y no expresa ningún remordimiento por) traumatizarla una y otra vez para promover sus propias metas, iluminarla, y casi llevarla al suicidio, Es bastante transparente que su idea de "amor" sea retorcida o con muchos de sus otros rasgos fingidos. También se da a entender que solo "ama" a Anna porque la ve como su "otra mitad" o una extensión de sí mismo. Aunque afirma ver a Tenma como una figura paterna, no tiene ningún problema en matar frente a él, incluso cuando pide que no lo haga, y parece ahorrarle solo por un mezquino deseo de aplastar su idealismo.

Como ejemplo de su naturaleza engañosa, Johan una vez insinúa tener múltiples personalidades; una criminal que es la personalidad dominante, y una angustiada que desea evitar los crímenes, Este último nunca vio físicamente, que es rápidamente descartado como un mero intento de engañar a Tenma, Anna y/o a las autoridades.

En esta sección me comentan sus opiniones y análisis personales sobre este villano ➡️

Lista de votación para el próximo villano:

–Breeder (Manhwa: Jungle Juice)

–Jason Voorhees (Viernes 13)

–Freddy Krueger (Pesadilla en la Calle Elm Street)

–Flash Reverse (The Flash)

Tienen hasta el 7 de marzo para votar, la opción con más votos será el ganador.

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