Desde entonces, no habían podido estar a solas.
— ¿Te sientes mejor, Apo? – alguien más le preguntó.
— Estoy mejor.
Y cuando parecía que iban a estar bien, al ensayar de nuevo la escena, ambos se sintieron mal al grado del desmayo, ya que el aire era escaso.
— Pero hace un rato... - Apo intentaba hablar con la máscara de oxígeno en su rostro.
— ¿Así que no me hablas ahora? – le preguntó Mile a Apo, ya que por fin podían estar juntos, aunque fuera por unas esposas que utilizarían para la escena y porque debían compartir el oxígeno.
Habían agarrado sus manos esposadas, entrelazando sus dedos entre sí, cosa que Apo no puso objeción esta vez, a la cercanía de Mile. Hasta le pasó la mascarilla de oxígeno para que también pudiera respirar. Se mantuvieron tomados de las manos hasta que estuvieron listos para grabar su escena.
Para cuando terminaron, ya era un poco tarde y morían de hambre, aun así, Apo se las arregló para bromear con el staff, retardando estar a solas con Mile.
Después de tontear un poco con el staff, Apo por fin se acercó a Mile, ya que les dieron un poco de descanso. Aún faltaban escenas nocturnas para ellos, donde sus personajes estaban perdidos en aquel bosque y en todas las tomas debían permanecer con las manos esposadas.
— Deja de ignorarme. – susurro Mile al oído de Apo, pues lo tenía abrazado por la espalda.
— No te ignoraba, fue más bien un castigo. – y en seguida Apo se rio, ya que sus costillas estaban siendo atacadas por las manos de Mile —. Déjame, déjame, está bien, no estoy enojado.
Cuando Apo dejó de reír, se encontraba frente a Mile entre sus brazos, sonrojado y sin poder dejar de mirar la boca de Mile, de la que se había privado hace algunos días.
— Bésame, quiero que me beses. – pidió Apo seriamente.
Estaban a solas en ese momento, aun así, Mile miró a todos lados cerciorándose que no hubiera nadie cerca antes de acatar la orden de Apo. No deseaba problemas en su relación.
Mile recorrió el rostro de Apo con la mirada hasta terminar en sus labios, después tomando su mentón acercó su boca. Tímidamente junto sus labios con los de Apo y lo besó. Comenzó como un beso casto, pues Mile quería disfrutar el tener nuevamente la boca de su Po. Como un manjar que debe ser degustado, Mile tomó su tiempo en disfrutar de aquellos labios, hasta llevarlos a ambos a un toque más apasionado.
Pronto sus respiraciones y besos eran lo único que se escuchaba, Mile sostenía la cintura de Apo con una mano mientras que con la otra sujetaba su cuello. Y Apo tenía sus manos enredadas en el cuello de Mile, ya que no quería que hubiera nada de espacio entre sus cuerpos, no le importaba nada en ese momento, solamente tenía presente el placer que le causaba estar junto a Mile, recordar que le pertenecía y que nada ni nadie podría quitarle su amor. Mucho menos un rumor con una chica.
Separaron sus bocas con la respiración entrecortada, aún sin soltarse del abrazo en el que estaban.
— En mi siguiente viaje, haré lo que mi madre me diga. – dijo Mile aún agitado.
— ¿Qué dijo mamá? – preguntó Apo curioso.
— Que soy un tonto. – y Mile comenzó a reírse al recordar cómo se burló de él su mamá.
— Mamá no pudo haberte dicho eso, ¿qué te dijo?
— Literalmente me dijo: "Te dije que lo trajeras amor, Apo es demasiado lindo para dejarlo solo un fin de semana."
ESTÁS LEYENDO
ENTRE LA IMAGINACIÓN Y LA REALIDAD - KINNPORSCHE
FanfictionEste fanfic es una colaboración de Xixi Castilla, Tony Ramirez, Judith y HeeChan, respetando la esencia de cada una, por lo que en algún momento la narrativa pueda cambiar. Sin embargo, consideramos esto el encanto de lo que estamos escribiendo. To...
Part 50 - (En el bosque)
Comenzar desde el principio