Vante realmente no sabía qué responder. Nunca antes se había detenido a pensar en su apariencia. La única persona que solía fastidiarlo al respecto era Momo, pero no podía tomar en serio las palabras de esa arpía que le irritaba demasiado.
Sin embargo, escuchar esas palabras de Jungkook tenía un efecto extraño en él. Su corazón latía descontroladamente con cada palabra que salía de los labios del menor, disipando cualquier atisbo de duda. Si Jungkook le decía eso con ese brillo en sus ojos, ¿quién era él para contradecirlo?
La Muerte esbozó una pequeña sonrisa y negó con la cabeza. —Yo creo que de ambos, el chico bonito eres tú.
El menor abrió sus ojos con emoción. A lo largo de su vida, había escuchado innumerables veces a sus amigos y familia decirle que era alguien precioso, sin importar la enfermedad que lo aquejara. Sin embargo, él nunca pudo creerlo realmente, especialmente ahora que su apariencia se veía tan demacrada a causa del cáncer. Parecía imposible.
Pero las palabras de Vante tenían un peso singular, una fuerza que no podría explicar con palabras exactas. Quizás era la convicción con la que las pronunció, lo que le impidió siquiera considerar negarlas.
El momento entre ambos se sentía increíblemente íntimo, pero estaban tan fascinados el uno por el otro que apenas se daban cuenta. Vante no entendía cómo estaba dispuesto a quebrantar tantas reglas, pero al ver a Jungkook frente a él, sentía que valía la pena desobedecerlas si eso significaba poder verlo sonreír de esa manera.
Esa noche, La Muerte se quedó junto a Jungkook, y juntos compartieron una conversación que abarcó una variedad de temas, en su mayoría relacionados con el Inframundo. Vante le relató con detalle cómo funcionaba realmente el mundo de los muertos, y el menor escuchó con atención cada palabra, completamente asombrado por la revelación de que todo lo que los humanos creían acerca de ese lugar estaba completamente equivocado.
—¿Llevas mucho tiempo siendo una Muerte? —preguntó el menor con curiosidad, a lo que el ser asintió.
—Si —fue todo lo que dijo, y Jungkook sintió que ese era un tema que no debía explorarse más, por lo que decidió hacer otra pregunta en su lugar.
—¿Existe algún período determinado para que se lleven un alma?
La Muerte se encogió de hombros y trazó una línea con sus labios mientras negaba levemente. —Tenemos la libertad de elegir el momento para transportar el alma —explicó—. Sin embargo, tampoco solemos tardar demasiado, después de todo, el alma que nos ha sido encomendada ya está muriendo.
Jungkook permaneció en silencio, sumido en sus pensamientos mientras procesaba la información. Había algo que lo intrigaba profundamente en todo esto.
—¿Cuál es el período más largo que has tardado en hacerlo?
—Cuatro días —respondió La Muerte, tomando una breve pausa antes de elevar la mirada para encontrarse con los ojos del chico a su lado—. Bueno, ahora eres mi nuevo récord —añadió con una sonrisa tenue, aunque sus ojos mostraban un conflicto que Jungkook pudo percibir. Finalmente, decidió formular la pregunta que llevaba rondando en su mente.
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・⁺ 𝐇𝐀𝐒𝐓𝐀 𝐐𝐔𝐄 𝐋𝐀 𝐌𝐔𝐄𝐑𝐓𝐄 𝐍𝐎𝐒 𝐒𝐄𝐏𝐀𝐑𝐄《𝚅𝙺𝚘𝚘𝚔》
Fanfiction¿Qué sucede cuando la mismísima Muerte se encuentra inesperadamente enamorada de la vida que debe llevarse? En un mundo donde lo inevitable no puede ser pospuesto, Taehyung se ve atrapado en un dilema insólito. Cuando se le encomienda la tarea de ll...
✦VIII: La última revelación y el naciente calor del alma
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