-Vamos Qin, no seas tan frío conmigo por favor. Somos amigos

-jamás sería amigo de alguien como tu

- ¡Oh, Zheng! sigues tan salvaje como siempre - el alfa se acercó con pasos torpes al mostrador -justo como me gustas

- ¿estás ebrio? -pregunto el omega frunciendo la nariz ante el olor a alcohol

-un poco, si -soltó una carcajada - ¡oh! Zheng no lo sabes, mi mujer me acaba de abandonar llevándose a mi cachorra -lloró el alfa golpeando sus manos contra el mostrador con enojo

- ¿descubrió tus infidelidades? -el omega estaba tensó pero fingía tranquilidad

-lo hizo, y me dejo ¿puedes creerlo?

-lo que no puedo creer es como lograste casarte

-jajaja tan elocuente como siempre -el alfa intento tomar su brazo, pero Qin se alejó -mi mujer era una omega bastante fácil, solo la embaracé y ya. Hice lo necesario para tener descendencia y así me paga

-me das asco

-y tú me encantas

-estás borracho, lárgate de mí tienda ahora- el omega comenzó a soltar feromonas inconscientemente, era algo que generalmente hacían los de su especie cuando sentían peligro

-tu tienda...tu estúpido omega te crees la gran cosa, rechazando alfas, coqueteando con quien se te cruza enfrente con esa carita y ojos lindos. Pero sé que solo eres una ramera- la voz del alfa sonó más grave, aun arrastrando las palabras

- ¿viniste solo a insultarme? -preguntó Qin alejándose más del mostrador, acercándose a la salida del mismo

-no, te dije...mi mujer me dejo así que vine contigo, después de todo siempre te he deseado

Ahí Qin se dio cuenta que el hombre no solo estaba borracho sino también a punto de entrar en celo, su cuerpo se tensó aún más, aquello era peligroso ya que los alfas generalmente tenían mayor fuerza en el celo al soltar sus instintos. No estaba muy preocupado, podía aprovechar el hecho de que el otro estaba tomado ya que era más torpe pero aun así sería una pelea difícil.

-Por tu bien Chiyou, lárgate

-tu no me mandas puto omega

El alfa se abalanzo al mostrador y Qin se acomodó para defenderse cuando alguien tomo a Chiyou de la ropa y lo aventó al otro lado de la tienda, el olor a granada y menta cubrió la zona y Qin observo con sorpresa a Hades Olympus completamente enfurecido.

- ¿qué carajos crees que hacías? -la voz alfa de Hades retumbo en la tienda causando un escalofrío en Qin

- ¡ugh! no ¿tú que carajo crees que haces? -gritó el alfa levantándose con esfuerzo

-aléjate de Qin

-Yo vi a esa zorra primero

Qin observo el instante en que Hades perdió completamente el control ante sus instintos tomando al otro del cuello y azotándolo contra uno de los aparadores de la tienda. El crujido del vidrio se escuchó hasta donde él se encontraba.

-mis vidrios -murmuró Qin más preocupado por su negocio que por la pelea en si

Salió con rapidez detrás del mostrador y corrió hacia Hades tomando su brazo con delicadeza intentando que soltara al otro, más el alfa no parecía ni notarlo, sus ojos violetas tintados ligeramente de rojo, sus colmillos sobresaliendo junto a sus garras y el olor a granada y menta aplastando todo a su pasó.

-Hades, suéltalo

-voy a matar a este desgraciado- gruñó el otro ejerciendo más presión a su agarre, Qin pudo ver algo de sangre en el cuello y cabeza de Chiyou, sus vidrios apenas soportando la fuerza del alfa

CaosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora