Un Tiempo Para Recordar.

Un lugar, un día, una hora, una persona, para recordar.

Hoy despierto con un leve vacío en mi pecho, un vacío diciendo que ya no estás aquí.

Hubo un tiempo en el que yo acudía a mi lugar favorito, para tomar un café, para leer en tardes de lluvia. Y hubo un día en el que tu apareciste de forma inadvertida, saludandome con esa cálida sonrisa, esa sonrisa que recibiría todos los días.

Después de conocernos esa tarde lluviosa nos encontrábamos seguido en ese lugar, incontables las horas que hablamos de cualquier cosa hasta que un día, ese día fue torpe y de sorpresa, con una propuesta tan tentativa que no pude negarme, y una vez más confirmaba que para mi serías todo y más.

Una hora, esa hora que sabía que tarde o temprano llegaría, quise hacerla menos probable entre nosotros, pero ciertamente llegó partiendo en dos mi humano corazón.

Una persona, la persona que más amo, la que fue todo para mi, la persona con quien realicé cosas inimaginables, la persona que me llenó de recuerdos, la persona que me enseñó una lección de vida, una perspectiva, la persona que me llenó de sueños, el arquitecto que me diseñó un futuro juntos, la persona, esa persona que amo en todos los sentidos, hoy ya no está conmigo...

Y por ello, le escribo para darme un tiempo y recordar.