*Top*
—¿Eh?
De repente, un copo de nieve cayó sobre mis párpados.
—¡Ah!
Levanté la mirada hacia el tranquilo cielo nocturno mientras recordaba lo que sucedió algo similar hace unos días. Precisamente el día que Perion me incriminó, desde el techo vacío cayó un copo de nieve sobre mi nariz...
—Es lo mismo...
Tuve una sensación de deja vu, además...
—Hace frío otra vez —murmuré mientras un aliento blanco fluía de mi boca.
Definitivamente experimenté antes este extraño fenómeno. Aquel día, en el que un enorme muro de hielo apareció alrededor del Palacio del Príncipe Heredero y estuvo a punto de destruirlo.
«... Esta molesta sensación fría que parece congelar hasta mis pulmones. No me equivoco, ¡es la misma!»
Junté las manos y miré a mi alrededor.
—Dime tu nombre. Dímelo y haré que se detenga todo ese hielo.
El chico desconocido, que desapareció tan pronto como escuchó mi nombre, apareció en mi mente sonriendo.
—Ugh... Snif...
Los sollozos del Príncipe Heredero resonaron en el jardín vacío.
«... ¿Estaba alerta?»
Me perdí en mis pensamientos que olvidé por completo al Príncipe Heredero, quien sollozaba tristemente.
—Su Alteza, no pasa nada. Por favor, no llore.
—Ugh, y-yo no qui-quise hacer esto...
—S-Sí, lo sé. Su Alteza no se ve mal en absoluto.
Toqué con el pie el lugar congelado donde estaba sentado el Príncipe Heredero.
«No creo poder ayudarlo sola.»
No podía hacer mucho porque invocar espíritus estaba prohibido.
—¡Iré a buscar a alguien! ¡Por favor, espere un poco!
En el oscuro jardín, las rosas rojas brillantes en plena floración cubrían ambos lados del camino.
Cuando comencé a correr, las rosas rojas parecían correr conmigo.
«Es extraño...»
Sin importar cuanto corriera, no encontré el final del camino.
—... ¿Qué ocurre?
Dejé de correr.
—Claramente tardé menos de cinco minutos en entrar al jardín...
¿Cómo podía seguir sin ver el final del camino cuando parecía que había estado corriendo por más de 10 minutos?
Negué con la cabeza y miré a mi alrededor.
El jardín de flores, donde las rosas rojas estaban en plena floración hasta donde alcanzaba mi vista, no era diferente a lo que vi antes de correr.
—...
Sin embargo, el cautivador dolor rojo añadía una extraña inquietud, causando una sensación tenebrosa por razones desconocidas.
En cuanto fui consciente de la situación anormal, el miedo y los escalofríos me invadieron de golpe.
—Bueno, caminaré un poco más... —murmuré mientras me abrazaba a mí misma—. Debe ser solo mi imaginación...
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Nacida como la hija oculta del protagonista masculino y la villana
RandomUn día, el protagonista masculino de la novela apareció y se arrodilló. Me quedé boquiabierta y asombrada, pero repentinamente el protagonista me miró con sus hermosos ojos y habló. -... Eres la hija de Mariette. *Pok* Al escuchar ese nombre, dejé c...
🪻Capítulo 24🪻
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