El deseo del sicario

Capítulo 8: Como Llego Se Marchó

—Trafico de armas, prostitución, sicariato, robo, drogas, invasión a la propiedad privada, ya no sé cuantos cargos más podría agregar a esa enorme lista de delitos. ¿nunca te arrepentiste de nada? porque yo sí, me arrepiento desde hace tanto de haberte conocido, si yo hubiera sido Ryo, jamás dejaría a alguien como gulf por una persona como tú, si yo lo hubiera conocido antes mi vida sería diferente y podría ser feliz con él. Todo lo que tocas lo destruyes, a nuestro único padre, aunque era un hombre desconocido al principio, él nos quiso, a mi que solo viví apoyandote todo el tiempo pensando que realmente el mundo nos odiaba cuando nunca fue así, a Ryo que como un idiota creyó todas tus historias de deshacerte de la gente que se interponía les daría mejor pasar.

Derepente la puerta detras de Roxana se abrió de par en par, mew por fin levantó la cabeza y miró a aquel investigador. Este hombre que lo había perseguido durante mucho tiempo intentando atraparlo, que quiso detenerlo y hoy unia fuerzas con él para desbaratar una serie de acontecimientos sin precedentes.

—Yo puedo seguir agregando cargos a la lista de Roxana Novoa. —Dijo el investigador Carter mirando a mew. Ellos no tenían la más minima intención de apresar al alfa pero no podía hacer tal preferencia. Era la ley y según mew, también era hora de pagar, si con eso podía proteger a gulf para siempre, diría todo lo que hiciera falta para que esas dos personas estuvieran durante mucho tiempo en prisión.

El investigador Carter lo miró con un poco de lástima, por un momento no supo cómo mover sus manos, el resto de su equipo apresó a Roxy que aún no salía de su asombro mientras leian sus derechos.

“Tienes derecho a guardar silencio y solicitar un abogado …”Blah, blah, blah,bla. Lo único que ahora puede recordar es como se ve la vista desde aquella ventana y sin embargo no puede evitar pensar en que quiere ver a Gulf.

Ryo había sido detenido en su casa, en cuanto Roxy salió la policia entró para evitar que se pusieran en contacto, con alguien más, el allanamiento lleo varias horas en que siguieron los pasos de la mujer de cerca hasta que estuvo en el apartamento de mew.

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Eran 104 páginas de declaraciones, todo se desarrolló de forma tan lenta, por suerte mew también advirtió a carter sobre eso, por lo que las cuentas de la pareja fueron congeladas por si pedian salir bajo fianza, algo que no fue necesario hacer mucho uso de esa información ya que el juez no otorgó fianza para roxy, teniendo esto en cuenta, parasalir del paso, ella declaró contra Ryo.

En el proceso se averiguaron muchas cosas, sobre todo mew se fue enterando de temas tan delicados que nunca imagino estuvieran tan involucrados en el mercado negro. El abogado de Gulf llegó para exigir el divorcio que fue facilmente otorgado después de las acusaciones contra Ryo y su intento de matarlo.

De Gulf no pudo tener noticias ya que su telefono y laptop fueron confiscados como parte del procedimiento y cuando por fin llegó la condena, esperaba que nadie le dijera nada al omega. No quería que viera esa parte de él.

A diferencia de lo que imagino sería estar en la carcel, era demasiado “Comodo” dentro de lo que se puede decir, de alguna manera sintió que muchas cosas estaban mal, el cuerpo de seguridad parecía mantener una línea de respeto hacía él incomprensible, los demás reclusos lo defendian y quienes estaban en su contra, rapidamente eran amedrentados por otros y se volvian a su parte. Diferente era la situación para Ryo que tuvo que ser encerrado en una celda de aislamiento y bien sabía que los de gendarmeria tampoco le tenian “entre sus favoritos”.

Recibió después de tres meses, una llamada de Leti. La mujer preguntó tantas cosas; como lo trataban, si habían sido rudos con él y si tenía planes de comunicarse con gulf. En la útima pregunta sólo pudo pedir que Gulf se olvidará de él. La condena era larga y aún faltaban cargos que agregar. No se atrevía a pensar siquiera volver a mostrar su rostro frente al omega, como sería el día que gulf se enterara que lo conoció porque lo enviaron a asesinarlo. Pedir y rogar por una pizca de su amor podría ser facilmente motivo de burla y una bala en la frente.

“No creo que lo tengas tan fácil, gulf no olvida rápido”

Fueron las palabras precisas de Leti, la mujer se rió y corto sin volver a llamar.

Así pasaron 5 meses en total, mew estaba muriendo y según las palabras del médico de la prisión, mew estaba imprimado a voluntad, seguramente su omega no lo sabía y no tenía la menor intención de ser solo de él pero en la mente de mew era tan destructivo pensar que alguien más en su vida existiera, que se imprimo. Una marca psicologica cuando los alfas se sienten parte de su omega sin necesidad aún de llegar a la marca física, demasiado romántico para algunos y un signo de debilidad y posesividad para otros. Un alfa imprimado es como un alfa castrado, aunque no hubiera demasiada tentación como para pensar siquiera en ser infiel.

Por supuesto no había infidelidad, si Gulf encontraba otra pareja no podía reclamar, no había futuro para ellos, no existía nada que los uniera y mucho menos, existía algo más que bonitas palabras a las cuales aferrarse. Si mew hubiera tenido otro pasado, un futuro que ofrecerle y algo que lo hiciera digno de sentir merecedor del amor del menor. Sería todo diferente.
No había un futuro para ellos, mew lo supo desde que descubrio que no era solo sexo y deseo, cuando se dio cuenta que desde la primera vez que lo vio estaba destinado a caer por ese chico, ya sabía que el futuro solo podía ser malo para él, viviendo una vida sin su pareja.

Pasaba de la hora de dormir cuando toda la cárcel se tiñó por las luces rojas de emergencia, parpadeaban acompañadas de un fuerte pitido de emergencia y hacía rechinar los dientes, mew vio que la puerta de la celda de alta seguridad, corrediza y pesada como el infierno, se deslizaba suavemente entre una rafaga de humo que llenaba el pasillo con vision directa al patio de los reos.

Leticia tenía una sonrisa algo espeluznante, no daba cabida a que esa misma persona se veía la mayoría del tiempo como una estudiante.

Mew salió de su cama y pensó en hablar primero pero no pudo hacerlo, Carter también apareció detras de Leti y se cruzó de brazos.

—¿piensas volver a dormir? Tienes solo 20 minutos.

—Creo que siempre es un poco lento, ¡mew, de prisa!

El interior de la prisión era una locura, todo se movía y temblaba pero los reclusos seguían dentro de sus cuartos y ni luces de la seguridad, leticia comenzo a hacer que lo siguiera y en cuanto ella dio una orden en un idioma extranjero, todos los hombres que cuidaban las barreras de seguridad la siguieron. Parecía más una actuación que una real fuga de prisión.

Subieron hasta el techo donde se encontraba una pequeña pista de aterrizaje y un helicoptero. No fue hasta casi diez minutos que despegaron y por fin pudo abrir la boca sin ser interrumpido por una nueva avalancha de humo y estruendosas explosiones.

—¿Qué haces aquí?¿Qué es todo esto?—Pregunto alterado y sin entender que ocurria.

—Mi jefe dijo que era suficiente castigo, que ya debías saber la lección.

—¿tu jefe? como es carter también fue parte de esto, qué pasará cuando me busquen, sabes que lo harán.

—Claro que no, yo no dejo cabos sueltos, aunque por supuesto, tu identidad debería ser un poco diferente, aunque tu cara nunca se mostró en los medios de comunicación.

—¿mi cara? ¿Todo esto salió en los medios? entonces…

—Claro que Gulf lo sabe. 

—¿Quién es tu jefe? ¿porque me liberaron? yo prometi no hacer el mismo trabajo nunca, no les serviré.

—¿Quién dijo que volverias a lo mismo? además a quien se lo prometiste aparte de ti mismo.

—Le prometi a gulf que regresaria por él y eso significa no ser nunca más quien era.

—Tienes suerte, ya no necesitas hacer nada así, además, si mi jefe se enterá que andas en lo mismo es probable que pierdas mucho más de lo que ganas.