Fue a su taller y comenzó a limpiarlo para olvidarse de todo por lo menos un instante, era tan complicado tener que escapar de su cabeza.

Había estado persiguiendo a varios maleantes que solían andar en camionetas bastante sospechosas, observó que éstos estaban usando tecnología muy avanzada, la cual dedujo fácilmente, que podría ser robada

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Había estado persiguiendo a varios maleantes que solían andar en camionetas bastante sospechosas, observó que éstos estaban usando tecnología muy avanzada, la cual dedujo fácilmente, que podría ser robada.

Esa noche se encontraba por el mismo barrio donde varias noches antes los había encontrado pero no obtenia nada.

Era como jugar al gato y el ratón pero en esa ocasión el ratón sabía que el gato estaba merodeando por allí y si osaba a salir podría nunca regresar a su ratonera.

Aún tenía muchas cosas en mente, muchas cosas que aún no había resuelto mentalmente.
Primero que nada estaba el hecho de que sabía quién era el asesino de sus padres, por supuesto que seguía reacio a solamente perdonar al soldado del invierno, pero también sabía que no podía volver a cometer una estupidez como la que había hecho la última vez.

Primero porque el señor Stark, el cual era el segundo problema, había confiado en él por segunda vez, no podía volver a hacer lo mismo, y segundo, porque muy probablemente Steve y sus amigos ya no estarían en el mismo lugar, podrían estar incluso en otro país.

No iba a perdonarlo porque jamás podría, pero iba a tratar de no pensar en ello, quizá y el karma si existía y lo iba a cobrar muy caro. Realmente esperaba que así fuera.

Escuchó, con su super-audición, como varias personas conversaban. Ésta habilidad funcionaba pero solamente cuando se concentraba lo suficiente.
Llegó hasta el lugar y observó cómo dos tipos hacían negocios con otros dos tipos.

A simple vista la transacción no se miraba para nada legal, observó cómo le entregaron a los hombres dos armas de fuego, y a éstos entregarle una bolsa con lo que supuso era dinero.

Antes de que pudieran hacer algo lanzó una telaraña para distraerlos lo cual logró y después se enfrentó mano a mano con cada uno de los hombres.

Cuando todos estaban fuera del combate levantó una de las armas de fuego que habían caído al suelo luego de la golpiza que les propinó.
Sintió esa sensación de alerta, uno de los hombres había alcanzado una de las armas y le había disparado.

La bala soltaba un aura verde en todo el trayecto hacia él, definitivamente eran armas modificadas.
Cómo pudo intentó esquivarla sin embargo logró darle en el brazo.

Sintió como si tuviera hielo justo en el lugar donde había recibido el disparo. Rápidamente, con la mano derecha, le envío una telaraña que lo dejó completamente fuera.

Observó su brazo, éste sangraba.

—¿Para quién demonios trabajan? —les preguntó el arácnido.

Los dos hombres que eran los vendedores no dijeron nada, solamente, atrapados en la telaraña, bajaban la mirada con vergüenza. Peter pensó que podrían estar bajo amenaza o solamente eran muy leales.

What If... (Starker)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora