Mientras los minutos pasaban, el pequeño robot empezó a sentirse algo mal, sus sistemas empezaban a fallar, volviéndose inestable a cada segundo, Larry intento no prestarle tanta atención, para seguir brindando lo mejor en el trabajo, pero fue en vano, dar esas sonrisas cada vez eran más difíciles, y su voz se empezaba a escuchar más apagada. Ante está situación, Larry no pudo evitar empezar a desesperarse, vio la hora, dió gracias a todos sus superiores al ver que por fin su descanso comenzaba, sin dudar salió de su puesto, caminando sin rumbo alguna por algún lugar del parque.

Al caminar con nerviosismo y preocupación por los fallos que su sistema largaba a cada minuto, diviso a la parejita que había visto justo ayer, nuevamente estaban sentados juntos, siendo muy melosos y empalagosos ante la vista de muchas personas, pero esta vez, estaban sentados en la fuente que se encontraba en la zona de descanso del parque, viendo cómo ambos compartían pequeños besos lentos, sin apuro, simplemente demostrando ese gran cariño y confianza que se tenían. El pequeño oficial no pudo evitar sentirse triste, para luego , con suma urgencia su sistema empezará a repetir un solo nombre en su mente "Lawrie, Lawrie, Lawrie" estaba seguro, necesitaba a su hermano mayor urgentemente.

Con pasos algo apresurados, empezó a caminar por todas las zonas del parque, sus ojos amenazaban con derramar esas lágrimas que tanto estaba guardando, Larry se sentía sumamente vulnerable, su cuerpo temblaba, sintiendo esa sensación de frío que llaman los humanos, llevando su mirada a su alrededor, con intención de encontrar al oficial más serio, sin éxito alguno, "Lawrie te necesito" repetía infinitamente el más pequeño en su interior, solo lo necesitaba a el, con tan solo su presencia estaba seguro que todo volvería a la normalidad.

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Por otro lado, en la zona de cine del parque, se encontraba el oficial de ojos amarillos, al parecer estaba tratando de solucionar un pequeño inconveniente en una de las salas de función, al parecer una pareja de adolescentes estaban demasiados melosos en los asientos del fondo, llegando quejas de algunos clientes por "sonidos" extraños que escuchaban al estar reproduciendo la película.

Lawrie no dudo en ayudar a los trabajadores del lugar a poner orden ante los adolescentes hormonales, habían roto algunas reglas, que no podía pasar por alto, habían rompido la calma y armonía del cine, y más que nada, incomodaron a los clientes, sin poder disfrutar de la película de acción que estaba en ese momento.

-Entiendo que estaban en un momento más que íntimo, pero este no es lugar para demostrar tales afectos, recuerden que están en un lugar público, no tengo más remedio que prohibirles la entrada a esta zona del parque por lo menos un mes- explicó serio y algo enojado ante los adolescentes, estando en una postura recta, cruzado de brazos mirándolos severamente ante sus acciones. La pareja estaba sumamente avergonzada, sin poder mirar a la cara al oficial, simplemente dieron una disculpa ante el robot, para también dar una disculpa a los trabajadores del lugar.

-Bien, si no tienen más que decir, les invito a la salida del cine, los acompañaré para más seguridad- y así como dijo, acompaño a los más jóvenes a la salida del establecimiento, viendo cómo estos le agradecieron por su amabilidad ante la situación, para luego ver cómo ambos adolecentes se iban de esa zona del parque, para por fin perderlos de vista. Lawrie se sintió aliviado, por fin adolecentes que eran obedientes, sin mostrar rebeldía a obedecer y disculparse por sus acciones.

-Bien hecho oficial, gracias por ayudarnos, realmente no sabía que decirle a esos jóvenes, más que estaba sumamente ocupada arreglando una de las luces de la sala B- el oficial al escuchar esa voz más femenina detrás de el, se giró de su lugar para poder observar a Maisie, la tan conocida mujer con su brazo robótico, sonriéndole de una manera dulce y agradecida. Ante sus palabras el robot simplemente asintió en forma de respeto -No se preocupe, simplemente es mi deber mantener la calma y armonía del parque, si necesita algo más no dude en pedírmelo señorita Maisie- la mujer sonrió ampliamente, diciendo un "gracias oficial" para así, volver adentro del cine a seguir con algunas reparaciones del lugar.

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