𝗝𝗨𝗦𝗧 𝗞𝗜𝗗𝗗𝗜𝗡𝗚, walker scobell.

dos.

– Ah, verdad. Me había olvidado que estábamos en el colegio.

Los dos empezaron a reír y emprendieron camino a su salón. Una vez ahí, se sentaron en sus respectivos lugares y poco después llegó su profesora.

Xander nunca fue ‐y esta seguro de que nunca va a ser‐ fan de matemática. Odia la materia y odia aún más a su profesora. Así que, como hacía en todas las clases, en vez de prestar atención; se puso a usar su celular.

Entro a Instagram, como siempre. Como era de esperarse, luego de lo que paso ese fin de semana, sus seguidores habían aumentado considerablemente. Luego, se puso a pensar en lo que Vera le había dicho.

"Es eso, o seguir siendo un fracasado que solo tiene dos views por stream."

Xander no quería aprovecharse de eso. Osea, ¿ganar seguidores por alguien más? No era lo que quería.

Pero, a la vez, pensaba que tenía las puertas abiertas. Que algo como ser un streamer reconocido se podría cumplir si seguía con eso.

Suspiro con frustración e inconscientemente entro a la cuenta de instagram del rubio. Vio sus publicaciones y mientras las miraba se dio cuenta de algo.

Su sonrisa era hermosa.

– Ay dios amigo, sos re gay. –Xander pego un salto en su lugar y apagó su celular en un intento de que no haya visto nada. Medio tarde, porque Juan, quien estaba sentado al lado suyo, le miraba mientras sonreía con burla.– Tranquilo, Xan, yo te respeto. Soy un Ally.

– Cállate Juan. –Aparto su mirada hacia la ventana que estaba al lado suyo. Sus cachetes se habían sonrojado ligeramente por la vergüenza de haber sido descubierto con las manos en la masa.

Su amigo castaño guardo silencio por un rato, fingiendo prestarle atención a su profesora. Pero un rato después volvió su vista al pelinegro.

– Igual, ahora que lo pienso. Medio rari que el Walker te siga, ¿o no? –Esas palabras despertaron la curiosidad de Xander, quien levantó la vista para ver al de pecas que estaba sentado al lado suyo.

– ¿Que queres decir?

– No se, tipo. –Aguardo silencio unos segundos, pensando en lo que iba a decir.– Si yo fuera famoso... y me shipearan con un random.. con todo respeto, eh Xandu... yo no seguiría en redes al random. ¿Me entendes? –Hizo una mueca.– Onda, me refiero a que, es un random más con el que me shipean, ¿Por qué le voy a seguir? Tipo, me chupa un huevo.

Ahí Xander cayó en cuenta. Su amigo tenia razón.

– Juan... dijiste algo inteligente... ¿Estas bien?

El castaño miró ofendido a su mejor amigo, quien parecía que había dicho eso con toda la sinceridad del mundo.

– Ay bueno Xan, no soy tan burro ¿sabes...?

– No, burro si sos. –Nuevamente, esa sinceridad que ofendió al de pecas.– Tenes razón... ¡Tenes toda la razón! ¿Por qué? ¿Por qué me empezó a seguir?

– Para mi, que le gustas. –Asintió y recibió un golpe de su amigo.– ¡Dale Xander, deja de pegarme! –Se sobo donde le había golpeado.– Pero, lo digo posta. Si, ¿Por qué te iba a seguir?

Xander rodó los ojos, sin ser capaz de creerle.

Después de esa charla, el tema no se volvió a tocar. Aparte de chistes y Juan jodiendo a Xander, su tarde pasó normal.

Finalmente, la jornada de clases acabó. Y le tocó ir a buscar a Vera para volver a casa.

La menor salió del colegio sonriente, con dos trenzas que obviamente el Ortiz mayor no se las había hecho. Alzo una ceja, pero no enfatizó en el tema.