25. Un Odio Inocultable

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XX: – Le devuelve el celular a Edison. – Gracias Edison, puedes retirarte. – lo mira. 

Edison: – Con permiso alteza. – Mira a al rey. – con permiso Princesa Natalia. – mira a Natalia.

Natalia: – Pasa. – Mira a Edison.

XX: – Adelante. – También mira a Edison.

 Edison: – Se retira del comedor, dejando a la pareja a solas. –

Natalia: – Me voy a empezar a ir. – Mira a su futuro prometido.

XX: – De acuerdo mi amor, diviértanse mucho. – Sonríe.

Después del desayuno, Natalia se levantó de su silla. Su futuro prometido se despidió de ella con un beso en los labios, al cual la peliazulada hizo un esfuerzo por corresponder. Natalia después se fue a su habitación a tomar su capa y su bolso para después dirigirse a la cochera por su camioneta.

Natalia se puso su capa, seguido, se subió a su camioneta, cerró cuidadosamente la puerta del chofer, se puso su cinturón de seguridad, encendió su camioneta con la llave para después arrancar.

Primero, Natalia llegó a una clínica de ginecología, donde le dieron su primera cita para revisión, la cual iba a ser para el Martes entre dos semanas a las 11:00 de la mañana. Después de haber agradecido por la asistencia, Natalia salió de la clínica y se subió devuelta a su camioneta, guardo la tarjeta en su bolso y después arranca. 

La peliazulada se detuvo en un estacionamiento de un centro comercial, pues iba a hacer una llamada. La peliazulada sacó su celular y marcó el número de la modista quién la ayudó a probarse su vestido de novia, pues iba a pedir su domicilio para pedirle que modifiqué su vestido de novia.

 XX: – Diga. – Responde a la llamada.

Natalia: – Hola, soy Natalia Ruíz. – Dice al responder.

XX: Hola Natalia. – La saluda. – Dime que necesitas. – quiso saber. 

Natalia: – Necesito que por favor me dé su domicilio. – Responde. – la razón es que me gustaría que le hiciera unas modificaciones a mi vestido de novia. – lo que pasa es que estoy embarazada. – termina de explicar.

XX: – Felicidades por tu embarazo. – La felicita.

Natalia: – Gracias. – Dice tímida.

XX: – Bueno, te enviaré mi dirección por mensaje de texto. – Le dice con una sonrisa. –

Natalia: - Me parece bien, muchas gracias. – Agradece con una sonrisa.

*Se termina la llamada*

Después de unos 10 segundos, Natalia recibió el mensaje de texto de parte de la modista. La peliazulada encendió su coche para irse del estacionamiento y buscar su destino. 10 minutos después, la peliazulada encontró su destino y después de haber apagado su camioneta, quitarse su cinturón de seguridad, haberse bajado de su camioneta y haberle puesto la alarma, Natalia se dirigió hacia la casa de la modista.




Castillo de la Mafia.

El Rey de la Mafia se encontraba sentado en la silla de su escritorio. Después que Natalia se había ido, él se había venido a su despacho, sentándose en su silla de escritorio, sacó su celular, metiéndose a las redes sociales y empezó a mirar lo que le había enseñado Edison acerca de lo que los Guerrero habían publicado de Emi hace unos minutos atrás.

Los Descendientes de la MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora