—¿Por qué carajos hay una morsa en la ventana? —escupe Estefan con vehemencía al mismo tiempo en el que su cuerpo vacila con irse para adelante sin embargo lizzy lo ayuda a sostener de la espalda, y ladea su cabeza en señal de que la auxilie, corro de inmediato.

—Te tomaste hasta el agua del florero. —le digo con fatiga por lo pesado que esta mientras lo arrastró y lo sentamos sobre la cama, él nos tira a ambas hacía atrás, haciéndome soltar un gritito.

—Qué lindas, me van a acompañara dormir. Aunque bueno, si quieren ni dormimos —contesta arrastrando las palabras mientras esboza una sonrisa risueña,yo lo empujó con fuerza para levantarme ocasionando qué lizzy caiga al suelo del otro lado.

Jev se ríe estruendosamente, Estefan lo voltea a ver, —Sino sabés tomar es mejor que ya te duermas.

—Dormir sólito no es una buena opción, ¿No, Camille? —se dirige hacía mi mientras lizzy lo ayuda a acomodarse, y yo le saco el dedo de enmedio.

—¿Qué carajos hace Jev en la ventana? Bájate de ahí. —Interviene Lizzy.

El mencionado blanquea los ojos, —No se me había ocurrido, lizzy, se me olvida que cuando estas borracha tu cerebro funciona más.

—¡Sé que fue ironía! —lo señala molesta, —Respetame. Pero ya, ¿Cómo fue que llegaste ahí?

Jev y yo nos miramos, —Es que se le cayó algo del otro lado y pues decidió meterse por la ventana.

—¿Qué se te cayó? —frunce el ceño mientras pasa por detrás de mi, dirigiéndose hacía la puerta.

Corro rápidamente para que no se den cuenta de que en lo absoluto no había nada, olvido que la cuerda del yate está en el suelo y para sostener mi caída me agarro del short de Jev. 

Ella se queda con los ojos abiertos desmesuradamente, yo me levanto rápidamente, y me giro hacía ella. —Eso se le cayó.

—¿Cómo es que se le va a caer en short..? ¿Qué era lo que hacían realmente? —entrecierra sus ojos con sospecha y yo respondo.

—Nadar desnudos, pero se quedo atorado en la ventana cuando volvíamos a la habitación, ¿Por qué le miras tanto el trasero? —me cruzó de brazos.

Ella rueda los ojos y se voltea entrado otra vez a la habitación. —Te agradecería si me subes el short, gracias.

—Lo siento mi vida, lo olvidaba. —digo mientras le subo el short.

Decidimos romper el borde de la ventana con ayuda de unas herramientas que encontramos en el armario, Jev salió y se tiró a la cama junto a Estefan quién se levantó apenas sintió la pierna de Jev sobre la suya.

—¡Siento una tercera pierna!

—No la tienes grande, así que no te asustes que solo fue un sueño. —le contesta Jev acomodándose mejor.

Estefan lo mira de reojo, —Al menos tengo.

—Al menos no se me ve con una lupa.

Yo me echó a reír y Lizzy dice, —Los chicos ya se fueron a dormir, así que haremos lo mismo, descansen y dejen de pelear por quién la tiene más grande. —arruga la cara como si ambos fuesen unos raritos.

Los chicos salen de la habitación h y yo me quedo con Jev quién me atrae de la cintura haciendo que caiga sobre la cama, para luego besarme en el cuello, ocasionandome cosquillas, me echo a reir para luego quedar sobre él. —Deberá hacerte un masaje.

—Lo necesito.—dice reclinandose para adelante mientras hace el mohín de voltearse pero lo tomo de los hombros y esbozo una sonrisa.

—La lesión fue en la cintura—digo tocándolo en esa zona. Él se ríe con morrongueria.

—Me sorprendes.

—¿Por qué? —me hago la ida

—Porque sí.

Ladee la cabeza, —Uhmm, pues entonces te la voy a comer porque sí.

—Me encantas. —Contesta.

Me agarra del cabello para luego besarme ferozmente, siento como el calor de su cuerpo se compenetra con el mío, jadeo en su boca en cuanto siento como sus dientes muerden la inferioridad de la mía, mis manos tiemblan bajo el contacto de su piel, siento la anticipación ansiada del momento y trago con dificultad.

Sus manos se posicionan sobre mi cintura al mismo tiempo en el que me meneo de adelante para atrás con suavidad.

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El día por fin había llegado, ya todos estábamos alistándonos para la boda del hermano de Jev. Yo era una de las damas de honor, las chicas a mi lado parecían nerviosas sin embargo en cuanto ingresó la novia a la iglesia todos se incorporaron, jev estaba frente a mi junto a los chicos que lo acompañaban, la ceremonia transcurrió con tranquilidad, ambos se veían espléndidos, hasta que llegó el momento de la fiesta en el que salimos a bailar, un chico que parecía tener dos pies izquierdos estaba frente a mi intentando no pisarme, sin embargo entre mas precavido intentaba ser, más lo hacía accidentalmente. Jev vino a mi rescate y juntos bailamos una canción de ed sheeran que sonaba con suavidad a través de los parlantes.

Las luces se movían al ritmo en el que nuestros cuerpos lo hacían, las personas a nuestro alrededor se disipaban por las miradas penetrantes que emitiamos el uno hacía el otro, un hormigueo me recorrió cuando sus manos se acentuaron sobre la mía como si fuese rompecabezas que no le faltase ninguna pieza.

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⏰ Última actualización: Jun 21 ⏰

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