Perú apoyó sus manos en el pecho del Rubio y, sobre éstas, su cara. ⸺Es un poco extraño que ahora te dignes a recordar todo.
El mayor se mordió el labio inferior. Debía admitir que había estado armándose de valor para contarle todo a Perú desde hacía más de una semana, pero justo en ese momento, ni una sola palabra era capaz de salir de su boca.
Pero parecía no ser necesario, pues, estando completamente hundido en sus pensamientos, el único que pudo sacarlo de ahí fueron los exquisistos y tersos labios de Perú posándose sobre los suyos.
Perú se acomodó de modo que quedó sentado sobre el abdomen de Estados Unidos y enredó sus dedos en el suave cabello del meyor, quien se derritió instantáneamente ante el toque, enlazando su lengua con la de Perú.
Perú se recostó contra el cabecero de la cama, se sentó e hizo que el mayor se deslizara por su estómago hasta que su trasero cayera en su entrepierna. Perú se acomodó, moviendo sus caderas contra las de Estados Unidos, algo que los hizo jadear en pleno beso, apretando los ojos y apartando al menor, quien lo miró con esos ojos anhelantes y brillosos y con los labios hinchados y rojizos.
⸺No puedo, Perú... no puedo...⸺ murmuró el mas alto, mientras juagaba con su propio cabello.
⸺¿Qué no puedes?⸺Inquirió el peruano, elevando una ceja. Estados Unidos dudó muchas veces antes de mirarlo, pero al final, lo logró.
⸺No puedo hacer nada contigo hasta que sepas... todo⸺ confesó, mordiéndose el labio inferior. Perú sonriendo con una mirada comprensiva, y Estados Unidos tuvo que contenerse un infierno para no lanzarse encima en ese momento.
⸺Bueno... puedes empezar...⸺pidió el bajito, acariciando levemente las clavículas del rubio.
⸺Primero... siéntate en otro lugar, no puedo concentrarme si estás ahí⸺ le hizo saber el americano, señalando un lugar a su lado en la cama. El castaño soltó una risita traviesa y se acomodó donde el rubio le había pedido.
⸺Listo...
Estados Unidos se lamió los labios, ansioso.
⸺Soy un sátiro.⸺ soltó de golpe, haciendo que Perú se sobresaltara.
⸺Eh... bien... supongo que...
⸺No, terminé...⸺ lo interrumpió. ⸺La primera vez que tuve sexo fue a los quince. Fue con una chica y fue... horrible.⸺ La mueca de asco que hizo Estados Unidos en ese momento hizo reír a Perú.⸺No lo intenté hasta medio año después... pero fue, esa vez, con un chico. Él no quería dejarme ser activo por mi falta de experiencia, pero yo me negaba a ser el pasivo, por lo que esa noche solo nos tocamos y no pasó más allá del sexo oral. A pesar de eso, fue una de las mejores noches de mi vida. Así que asumí que el problema eran las chicas.
El americano hizo una pausa.
⸺ Entonces me eduqué en el tema del sobre sexo homosexual y empecé a hacerlo con chicos... demasiado seguido.
⸺No podía estar un fin de semana sin estar entre las piernas de un chico... con el tiempo empeoró porque los hombres no eran suficientes para mí. Por más que me había traumado con el tema de las mujeres, no pude resistirme. Comencé a hacerlo con chicos y chicas y con ambos al mismo tiempo. Llegué al punto de no poder pasar un día sin tener sexo. Mi resistencia se volvió aterradora...⸺Estados Unidos hizo una mueca de angustia.
⸺Podía hacerlo hasta cinco veces seguidas... e incluso a veces sentí que no quedaba satisfecho. Mi familia se dio cuenta... fue lo más vergonzoso que tuve que admitir ante ellos, pero, en ese punto, ya sabía que tenía un problema de hipersexualidad. Gracias a eso, fui a tratamiento durante un año y medio. Para cuando salí, tenía dieciocho años y fue cuando me fui de intercambio a Europa. Cuando llegué ahí, me di cuenta de que llamaba demasiado la atención, las chicas y los chicos literalmente me caían y seguian por todos lados. Así que pensé que no era nada bueno para mi autocontrol si tenía la tentación tan cerca.
⸺Siempre he sido un chico un poco tímido, por lo que me encerré en mí mismo. Pareció funcionar porque nadie me prestaba atención...⸺ Estados Unidos se cubrió la cara con las manos. ⸺Hasta que tuve que venir aqui, a la universidad y entrar al equipo de baloncesto y ahora todos están detrás de mí...
Estados Unidos se calló de repente. Quizás una apresurada confesión de una historia tan patética como aquella no era una buena idea... lo mejor era esperar por la reacción de Perú.Asi que con miedo se volteó a mirarlo, encontrándose con los adorables ojos del bajito muy abiertos y perdidos en la nada, procesando la información recién recibida.
⸺Bueno... yo... no sé qué decirte...⸺admitió el castaño, encogiéndose de hombros. ⸺ Lo único que puedo pensar es que no te va a servir de nada reprimirte sexualmente. Todo saldrá peor. Además, tienes las bases de tu tratamiento y las pautas a seguir, sabrás qué hacer cuando sientas necesidad de tener sexo... como lo has hecho todo este tiempo.
⸺Hay un problema más grande que ese...⸺murmuró Estados Unidos, mirándolo fijamente. Perú correspondió su mirada, sonrojándose levemente.
⸺¿Cuál es el problema?⸺ preguntó el azabache, moviéndose para volver a su posición anterior, sobre el regazo del Estado Unidense.
El americano tragó saliva, desviando su mirada de los labios a los ojos del latino americano en repetidas ocasiones.
⸺Que me gustas.
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