rebelde 4 temporada

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Miguel se había cambiado de ropa, se había tirado los pantalones al suelo y había
estado durmiendo un rato, le habían dejado el móvil en el bolsillo del pantalón y, además de
dormir mucho, no podía oír su teléfono móvil. llamando.
Mia lo intenta una vez, su teléfono celular simplemente suena.
Ella no se rinde y vuelve a llamar. Pero sin éxito, respira hondo - ¡maldita sea,
responde! - llama de nuevo, el celular ya estaba en sus últimas etapas, y con la insistencia
de Mia, en medio de la llamada se le acaba la batería y el celular se apaga.
Mía: ¡cayó, qué diablos! - ella vuelve a llamar - responde Miguel, responde!
Vick: ¡MIAAA!
Selina: Mia, por favor, esto sólo te hará más daño, necesitas darle espacio para que
se enfríe.
Mia vuelve a ignorar la liga
Luego recibe el mensaje de que la llamada no se pudo completar porque el celular
estaba apagado o fuera del área de cobertura.
Mia, al recibir este mensaje, se desespera más.
Mía: ¡RESPUESTA, RESPONDE!
llama de nuevo.
Vick: Dios mío, Mia. - ella va hacia la chica y le toma la mano, Mia comienza a llorar
de nuevo.
Mia: me está ignorando, él... Apagó su celular, ¡ya no quiere hablar conmigo Vick! El
nu vrea...
Vick: Mia, eso no es todo, él.. él.. ¡Dios mío, necesitas calmarte!
Selina: Llamaré a Roberta.
Vick: ¡eso es todo, buena idea! - abraza a Mia mientras rompe a llorar.
Selina sale de la habitación y llama a Roberta.
Selina: Espero que Roberta sepa cómo resolver esto.
Roberta estaba rodando, entre las portadas con Diego, los dos habían hecho el amor
por la mañana, por la tarde tocaron y volvieron a hacer el amor.
Roberta escucha su teléfono celular llamar mientras Diego la colma de besos.
Roberta: jajajajaja espera, suena el celular.
Diego: déjalo llamando, ven aquí jajaja.
Roberta: ¡cálmate, sólo un minuto, semental! Jaja ja

5Unos momentos y Roberta responde.
Roberta: hola?
Selina: Roberta? Es Selina.
Roberta: dime hija mía, ¿qué quieres?
Selina: ¡ven al apartamento de Mia ahora!
Roberta habla en serio, ¿qué pasó con Mia?
Selina: es muy mala Roberta, Miguel rompió con Mia por teléfono y se fue a
Monterrey.
Roberta: ¿QUÉ? ¿MIGUEL ROMPIÓ CON MIA Y SE FUE?
Diego mira seriamente a Roberta.
Selina: ¡sí! mira, ven aquí, Mia es realmente mala.
Roberta: ok... Yo.. Voy allí ahora, ¿vale?
Selina: está bien, está bien.
Colgan.
Diego: ¿te oí bien?
Roberta: sí, te lo diré.
Diego: cierto.
Los dos se duchan, se preparan y salen de casa, y poco después estaban en el
departamento de Mía y Miguel.
Al llegar allí, Selina le da la bienvenida a Roberta.
Roberta: ¿dónde está?
Selina: en la habitación con Vick dejó de llorar un poco pero todavía se siente mal.
Roberta: está bien. - va al dormitorio y ve a Mia con la cabeza apoyada en el regazo
de Victoria.
Fue una escena que rompió el corazón de Roberta.
Roberta: ¡aaai, Miguel es un idiota!
Cierra la puerta del dormitorio, se queda afuera y saca su teléfono celular.
Diego: ¿qué vas a hacer?
Roberta: ¡llama idiota a ese!
Ella va a la libreta de direcciones de su teléfono celular y comienza a llamar.
Recibe el mensaje de que no pudiste llamar a ese número. Pruébalo unas cuantas
veces más y nada.
Roberta lo intenta con el celular de Diego y nada.
Roberta: su celular debe estar apagado, ¿alguien tiene el celular de Loli?
Selina: Mia lo tenía, pero dijo que perdió su teléfono celular o algo así.
Roberta: Dios mío, ¡qué genial! Todo va mal, parece una historia sobre un guionista
despistado que quiere causar problemas en la historia. - ella va al dormitorio, se sienta al
lado de Mia.
Roberta: hola, Barbie. Háblame, vamos.
Mia mira a Roberta, no podía decir ni una sola palabra
Roberta: Mia, ayer no se encontraba bien, todos vieron la forma en que salió.
Diego: sí, me tiró cuando intenté detenerlo. Giovanni dijo que sólo necesitaba volar la
bicicleta.
Vick: ¿Y cómo sabe Giovanni cuándo se quedó en la fiesta?
Diego: Natasha fue tras Miguel y lo calmó.
Mia frunce el ceño cuando escucha eso.
Roberta: ¿ves? Es sólo un monstruo estúpido.
Mia: ¡se fue, me dejó Roberta!
Roberta: Hola hermana. ¿Confías en mí? - Roberta toma la mano de Mia.
Mia mira - mmm.
Roberta: entonces escucha lo que te estoy diciendo, él volverá aquí. Hablaré con él y
lo solucionarás, sabes que estabas drogado.
Tenemos un informe médico para el examen, tenemos testigos, no hiciste nada, está
un poco loco con sus ideas. Así que cálmate, lo solucionarás pronto. ¿bueno?
Mia: pero ¿y si...?
Roberta: "pero ¿y si" nada! Usa esa neurona tuya única que tienes en esa hermosa
cabeza vacía.
A veces necesitamos pensar con la cabeza, no con el corazón. Calmate. Lo conoces
más que nadie aquí, es impulsivo. Y cuando eres así, no piensas muy bien.
Mia comienza a aclarar sus ideas con lo que dijo Roberta.
Mía: sí.. tienes razón.
Roberta: por supuesto que sí.

Mira, sí.. ve allí, ducha para relajarte. ¿Quieres que te bañe? Por amor de Dios, di no,
eres demasiado mayor para que alguien te bañe.
Mia sonríe un poco e intenta jugar.
Mia: ni siquiera sabes qué tipo de champú uso, ni el acondicionador. Déjame tomarlo
yo mismo.
Roberta: uf, que alivio. Ve allí, relájate un poco, recogeremos tus cosas y te
llevaremos a casa de Franco y mi madre. Quedarte aquí solo no te servirá de nada. Y no te
preocupes por el estúpido Miguel.
Tal vez tenga su celular apagado, o lo haya perdido.. o lo robaron.
Mia la mira.
Roberta continúa: o lo secuestraron... O el avión se estrelló...
Mía: ROBERTAAAA, ¡PARA!
Roberta: bine... Está bien... Ya no hablo. Ahora ve a ducharte, ¡vamos!
Mía sale al baño.
Vick: lo hiciste bien, Roberta.
Selina: logró hacerla detenerse rápidamente.
Roberta: sí.. Tuve que usar mucho la cabeza con este para no asustarme.
Diego: ¡oye!
Roberta: de todos modos. - ella respira hondo - pero Miguel me escuchará cuando
pueda hablar con él, ahhh vete.
Lo que Roberta le dijo a Mia la hizo sentir más tranquila, podía pensar mejor en qué
hacer con Miguel, y llegó a la conclusión de que la desesperación no lo traería de regreso, y
lo que la hizo feliz fue saber que tendrían un hijo, pronto serían una familia. Pensó esto
mientras sonreía, acariciando su vientre. Me alegró saber que iba a ser madre. Termina la
ducha, se seca y se pone algo de ropa.
Roberta había empacado las cosas de Mia y había puesto a Diego a cargar unas 5
maletas.
Roberta: Creo que esto se puede usar un fin de semana, cualquier cosa que pueda
usar más.
Y tiempo después, Mia se instala en casa de su padre, la gente vino, la dejó y se fue y
pronto Mia se lo contó a Franco y Alma. También le dieron algunos consejos.
Y Mia los escuchó atentamente.
Alma: eso es todo, querida. Sólo dale tiempo. El tiempo es la mejor medicina para
que lo que se sale de control vuelva a la normalidad.

Mia: da... Creo que tienes razón. - ella los mira a ambos, mira su vientre.
Mía: yo.. - iba a decir, pero decidí que era mejor hacer eso cuando Miguel estuviera
allí, si él le decía que rompieron y que estaba embarazada, tal vez la reacción de Franco no
sería muy buena.
Mia: Voy a subir a la habitación ahora. Quiero.. Quiero hacer algunas cosas. ¿Todo
bien?
Franco: está bien querida, si necesitas algo ven a hablar conmigo. ¿bien?
Mía: mmm. Gracias papá.
Franco: de ninguna manera, querida.
Mia sale de la habitación donde estaban.
Alma recurre a Franco.
Alma: pobre niña, lo ama mucho. Puedes verlo en tus ojos.
Franco: esto viene sucediendo desde hace algún tiempo, creo que será así para
siempre. Me alegro de eso, espero que no tengas la misma suerte que yo.
Alma golpea a Franco.
Alma: ¿DE QUÉ HABLA CULOTE? ¿EH? ¿HAS PERDIDO EL RESPETO?
Franco: ¡AIII! ¡no estaba hablando de ti! Estaba hablando de los demás, como sería
cierto, por ejemplo. Entonces duele.
Alma: Creo que está bien, ¡eh!
El teléfono empieza a sonar.
Franco responde.
Franco: hola.
Era Aurora, la madre de Antônio Manuel.
Aurora: hola Franco querido, ¿cómo estás?
Franco: Lo estoy haciendo muy bien, ahora estoy menos preocupado por Mia.
Aurora: eso es genial, me imagino que es mejor.
Franco: sí, me da mucho alivio por ahora, ya que Mia está aquí en casa. Parece que
tuvo un desacuerdo con su novio.
Aurora: ¿tuviste algún desacuerdo con tu novio? Pero qué pena - Aurora sonríe -
bueno, ¿me importaría si Antônio y yo fuéramos a visitarla mañana? O habría algún
compromiso. Sabes, Mia es como una hija para mí.

Franco: bine... Sí puedes, mañana es sábado, no haremos nada. Ven por la mañana y
quédate a almorzar. Nos pusimos al día con la conversación, ¿qué opinas?
Aurora: bueno, está bien. Estuvimos de acuerdo así.
Franco: genial. Combinado.
Ambos cuelgan
Aurora va inmediatamente a la habitación de Antônio.
Aurora: hijo, tengo noticias para ti...