Capitulo 18 "Reencuentro"

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¿Por qué no, cuando llegues lo haces tuyo?
¡Vaya!, pero si hablo el preocupado, ¿Qué te paso? ¿Te comió la lengua el gato sonriente?
Nop, tu no querías escucharme, yo en ningún momento me callé
Espera, ¿eso quiere decir que si te puedo ignorar y no escucharte?
El que me escuches solo depende de ti, pero también el que me escuches es porque quieres hablar conmigo
¿Quién rayos querría hablar contigo?, eres pedante, malcriado y con un ligero nivel de egocentrismo.
jajajajaja ese no soy yo, estas describiéndote tú, ¡NO ESPERA! Jajajaajajaja ese es el sabio jefe
Mmm... pensándolo bien, tienes razón, es el sabio jefe
Volviendo al tema, quiero hacerte una pregunta, si tienes tantos deseos de hacer tuyo a Bill, ¿qué es lo que le harías? ¿Tener sexo con él o hacerle el amor?
¿Y porque esa pregunta?
Porque si estás enamorado de Bill no tendrías sexo sino que tú y el harían el amor
Supongo que haríamos el amor, nunca he hecho el amor siempre he tenido sexo
¿Y Bill, que habrá hecho con ese humano? ¿El amor o tuvieron sexo?
No lo sé, cualquiera de las dos no me importa, el tío ese ya está muerto, ¿Qué importa ahora eso? Y no sonrías así
Eres gracioso Tom, hasta hace poco te importaba mucho si Bill se acostó o no con el humano, ahora te da lo mismo, has cambiado, ese ángel te ha cambiado
Todos cambian, no creo ser la excepción a eso
Espero que te dure
Yo también lo espero.

Esa vos me ayudo a llevar el viaje algo más relajado, bajo mi ansiedad y muchas otras cosas más en mi entre pierna, me faltaba poco para llegar, me estacione unas calles antes de la casa de Theo, tenía planeado dejar la moto en ese lugar he irme caminando hasta la casa, así no les daría la ubicación de donde me encuentro realmente, deje la moto amarrada a un árbol y seguí mi camino a pie, me saque la chaqueta de mi cadera y me la puse, hacia algo de frio, seguía cojeando y el dolor con cada pisada era insoportable pero las ganas de ver a Bill eran mucho más y mitigaban cualquier malestar.
A los pocos minutos llegue a la puerta de la casa de Theo, toque con mi mano temblorosa, parecía como si me fuera a presentar delante de mis futuros suegros, joder sí que estoy nerviosos, lo único que esperaba era en no encontrarme con Alex y rogaba porque no le haya dicho nada a Bill, espere unos segundos, detrás de la puerta se escuchaban pasos que venían hacia mí, vi la manilla moverse, sentía que me iba a dar un ataque cardiaco, no tenía idea quien era, ¿y si era Bill?, ¿Cómo estaría?, ¿seguiría igual a cuando me fui?, ya no podía más de los nervios, de la ansiedad, pero para mí asquerosa suerte y matando cada cosa que sentía quien abrió la puerta fue Theo que al verme su expresión y su mirad demostraba que solo quería asesinarme, me miro de pies a cabeza frunciendo el ceño al llegar a mi pierna

-Te dije que no quería volver a verte Tom-

Nuestras miradas se cruzaron pero ya estaba ahí y no me iría aunque intentara asesinarme -necesito hablar con Bill- le hable con una seriedad y confianza absoluta que solamente demostraba pocas veces

-¿Para qué?, solo eres capaz de traerle desgracia y sufrimiento, este último tiempo a estado mejor sin ti- no podía pasar porque me impedía el paso con su cuerpo simulando una muralla impenetrable.

-No es de tu incumbencia- lo empuje hacia un lado logrando pasar trate de caminar pero mi rapidez en esos momentos se veía afectada por mi pierna.

Me detuvo del brazo impidiéndome seguir -Vas a decir que encontraste otra solución, lo vas a ilusionar nuevamente, eres egoísta y asqueroso, lárgate de aquí Tom- me apretaba el brazo con fuerza, al parecer Bill ya era apreciado por Theo por la forma en que intentaba protegerlo.

-No me jodas Theo Bill tiene que decidir, no tu por él, se supone que deberías ayudarnos no obstruirnos- moví brusco mi brazo para poder liberarme del agarre de Theo y funciono, camine más hacia el interior -BILL!, BILL! ¡¿DONDE ESTAS?!- grite con todas mis fuerzas o al menos con las que me quedaban. -¡BILL! ¡BILL SOY TOM!-

Después de unos segundos vi a Bill en las escaleras, tenía una sonrisa tan hermosa, tan amplia, se alegraba de verme se le notaba, estaba con unos jeans negros ajustados y una ramera blanca sin mangas, su pelo, su pelo tenía algo nuevo, estaba más largo y unas pequeñas rastas blancas que eran cubiertas por su pelo negro se balanceaban de un lado a otro, al llegar frente a mí me miro primero mis ojos, después mi boca, bajo hasta mi cuello y de ahí a mi pecho, su mirada hacia mí era demasiado notoria, llego hasta mi pierna y justo en ese lugar su expresión cambio, seguramente vio el torniquete y la sangre ya seca -¡¿Tom que fue lo que paso?! ¡Tú pierna! ¡Hay que curarla!- lleve mi mano a su barbilla subiéndole la mirada para que sus ojos conectaran con los míos. -¿Estas bien?- me pregunto preocupado, sus ojos brillaban y una pequeña chispa de luz resaltaba de ellos.

-Estoy bien, tengo algo más importante que una pierna herida Bill, al fin encontré la solución Bill pero tienes que ir conmigo-

Me miro sorprendido y algo confundido -¿De que hablas?, ¿podremos ser libres al fin?-

-Si Bill, encontré quien nos puede hacer felices, quien al fin nos puede liberar, pero necesito que me acompañes, necesito de tu ayuda... Bill ¿Me acompañarías?-

-¡S-SI!, Te acompañó a donde sea Tom- extendió sus brazos a los costados y después me abrazo, el sentimiento fue mutuo porque yo también lo abrase con fuerza.

-Eres un maldito tramposo Tom- Theo se dirigió a mí con frustración en sus palabras, sabía que yo había ganado, el ya no podría hacer nada más.

Me separe de Bill y mire a Theo –Siempre gano- maldita sea soné como esa estúpida voz.

–no te dejare llevarte a Bill con esa herida en la pierna, así que primero te curare y después de podrán ir- Se acercó hasta a mí y me tomo del brazo pero esta vez me tironeo hasta el sofá sentándome ahí. –Bill ven conmigo y Tom quédate ahí- me apunto y luego se fue con Bill entraron en una habitación y unos minutos después, salió Alex de esa misma habitación con una bandeja que contenía vendas e hilo y aguja para cerrar mi herida.

-Así que... ¿ya no podré ver más a Bill?- se sentó en el suelo, al parecer quería simular que nada había pasado.

-Tienes bolas para preguntarme eso mocoso- deje que me curara, realmente no quería más problemas con Theo y quería evitarme un mal rato provocado por Alex.

-Bueno fue un mes, le tome aprecio, además... no le conté nada si eso te preocupa. Tomo el hilo y la aguja y comenzó a suturar la herida mirándola concentrado, de seguro serias tres o cuatro puntos.

-Ya me di cuenta- me apoye en el respaldo de sofá mirando el techo –si le hubieras contado no me habría recibido de la forma en que lo hizo-

-Lo siento Tom, estuvo mal lo que hice y realmente después de conocer a Bill, de cómo hablaba de ti, me arrepiento de ello- se detuvo y me miro –de verdad lo lamento- dijo apenado y arrepentido.

Lo mire y suspire, lleve mi mano hacia el cabello de Alex y lo alboroté –Ya no importa-

Alex me sonrió con alivio en esa sonrisa y se paró –Termine-

Theo y Bill al parecer habían charlado pero se notaba que Bill poco le puso atención, seguramente solo quería volver a donde me encontraba yo.

-Listo Tom, ya nos podemos ir- se acercó a mí y tomo mi mano.

Alex se caminó hasta el lado de Theo mirándonos –cuida de Tom Bill- dijo Alex con algo de gracia –Es una gran persona-

-lo hare-

-Deberían hice pronto, estoy seguro que rastrearon a Tom- dijo Theo con algo de preocupación y no estaba incorrecto lo que había mencionado yo también estaba seguro que me habían rastreado.

-Gracias por cuidar de Bill- asentí con mi cabeza agradeciéndoles y me voltee a tomar el bolso, me lo puse al hombro y de la mano camine con Bill hasta la puerta, salimos Bill cerrando detrás de él la puerta y nuevamente tomamos un camino pero esta vez, si sabíamos perfectamente a donde ir.

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