Lauren me recibió con una sonrisa cálida y los brazos abiertos para un abrazo, que no tardé mucho en corresponder. Se sentía bien estar entre sus brazos, mientras su perfume me envolvía y su suave cabello rozaba mi piel desnuda.

— Hola, Camila— me saludó.

—Hola— respondí de vuelta, sin la misma emoción que ella. Lauren frunció el ceño de inmediato.

— ¿Estás bien?

— Si, no te preocupes.

Lauren asintió algo insegura, pero pareció entender que no quería hablar mas sobre el tema. Bajé la mirada porque no soportaba mirarla a los ojos y saber que le estaba mintiendo a una persona tan pura e increíble como ella. Miré mi ropa por instinto y me di cuenta de que tenía la misma ropa con la que había llegado el día anterior a su casa.

— No tuve tiempo de cambiarme— le expliqué antes de que hiciera alguna pregunta, ella asintió de manera comprensiva.

— ¿Quieres que te dé mi chaqueta?

— Estoy bien así— le aseguré. Ella sonrió algo insegura, pero no insistió porque sabía que por mas que lo intentara yo no cedería.

Cuando estábamos llegando, empezamos a escuchar gritos en la parte de afuera del edificio en donde sería la entrevista. Un gran grupo de personas esperaban ansiosos la llegada de Lauren, y sus gritos aumentaron cuando nos estacionamos frente a ellos.

Lauren me arrastró fuera del auto y quedé aturdida por el volumen de los gritos cuando los vidrios de la camioneta ya no aislaban todo el ruido.

Ella empezó a tomarse fotos con algunos fans y yo me quedé cerca del auto esperando a que terminara para poder entrar. Sin embargo, mi plan fue interrumpido por Lauren, quien me tomó del brazo y me llevó con ella mientras conocía a más fans.

— Permíteme.— Tomé el teléfono de una chica y le hice señas a Lauren de que fuera hasta ella para tomarse una foto. Hice lo mismo con unas diez chicas más, quienes me miraban en ese momento como si fuese una especie de Dios. Escuché varios gracias y sonreí al ver que había podido ayudar a esas chicas a conseguir algo que tal vez para Lauren no era nada, pero para ellas significaba el mundo.

Lauren tardó media hora más de la que tenía permitida y por eso apenas entró fue rodeada por las personas encargadas de coordinar todos sus movimientos y se la llevaron para prepararla para su entrevista.

Sabiendo que tendría que esperar un rato antes de que empezara la entrevista, fui hasta una sala que se encontraba vacía y saqué mi libro para seguir leyéndolo.

— Eres la amiga de Lauren, ¿no? — Preguntó una mujer que se asomó por la puerta.

— Eres la chica que me acaba de interrumpir, ¿no?— Ella rió, y tomó eso como una invitación para pasar y sentarse junto a mi.

— Estás bastante popular estos días— comentó. La miré interrogadoramente—. Los medios te han visto con Lauren y empezaron a inventar una posible relación entre ustedes. Pero no te preocupes, ya me encargué de eso.

— ¿Trabajas para Lauren?

— Estoy pendiente de que no hable de mas y de lo que las personas dicen de ella.

— Mmm, ¿publicista?— Ella asintió—. ¿Es difícil?

— No cuando trabajas con alguien como Lauren. El rumor de una relación entre ustedes dos fue la primera cosa de la que tuve que encargarme en meses.

— ¿Debo decir que lo siento?

— Camila, ¿no?— Preguntó, a lo que asentí—. No importa, Camila. Es mi trabajo y a veces es aburrido no hacer nada.

made up; camrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora