Tightrope. || Raura. || TERMINADA

Capítulo 19.

—El día en el que dejen de asustarte las mariposas creeré en tus intentos de asesinato —dijo él, con una sonrisa burlona.

Yo fruncí el ceño y saqué la lengua, como una infante ofendida. Ross estaba por responder de la misma manera, pero un carraspeo interrumpió su acción.

Ambos dirigimos nuestra mirada hacia quien produjo ese sonido, y vimos a Raini, de brazos cruzados y con una sonrisa de satisfacción.

—Así que me llamaron para decirme que por fin Ross tuvo agallas y te pidió ser su novia, ¿cierto? —me dijo ella, yo la miré confundida.

—Ross y yo... —dije, ella asintió— Juntos...

—Sipi —me dio la razón.

Miré a Ross, y tenía la cabeza gacha, se lo veía nervioso.

¿Acaso él...?

No, era una estupidez.

—Raini, te volviste completamente loca, él nos va a decir algo a ambas, y es sólo mi amigo. Lo somos hace dos semanas, un poco más tal vez ¿tan rápidas van a ser las cosas?

—Bueno... —dijo ella, con una mueca que significaba un "podría ser posible" de su parte.

Despejé mi cabeza de ese asunto y, de una vez por todas, me centré en la razón por la que estábamos allí.

—Ya basta de tonterías, ¿qué querías decirnos, Ross? —le dije.

— ¿Qué? —inquirió, siendo tomado de improviso— Oh, sí, lo que quería decir, bueno... —alargó la palabra, haciendo una mueca extraña— No hay manera de decir esto y que suene como algo positivo, así que lo diré, creo.

—Basta de rodeos, Ross —advirtió Raini.

Él bufo y dejó caer sus brazos, anteriormente cruzados, a los costados de su cuerpo.

—Está bien, ya -respiró profundamente —. Pasamos días con mi familia tratando de ver qué era lo mejor, si decirlo o no, pero lo correcto siempre fue decirlo —me miró a los ojos por un momento, y podía notar que quería darme seguridad y apoyo con su mirada —. Papá recibió un paquete en la empresa, hace unos días. Tu nombre estaba en él, Laura, e inmediatamente me pidió explicaciones.

—No me digas que... -espeté, asustada.

—No sé si es lo que piensas o no, pero tu padre lo hizo, nos amenazó a absolutamente todos —confirmó él.

Mi visión comenzó a ser obstruida con las lágrimas que se comenzaron a acumular en mis ojos.

¿Por qué no podía dejarme en paz? ¿Por qué tenía que ser hija de un psicópata?

Comencé a llorar, e inmediatamente mis amigos me abrazaron.

Mientras, yo sólo seguía despreciando el día en que nació ese monstruo.

No podía meterse con mis amigos, con la gente que me importaba, con mis padres.

Las únicas personas involucradas en esto debíamos ser Sawyer y yo. En lo posible, hubiera sido mejor que fuera yo sola.

No debía permitir que les haga nada a los demás. No cuando el resto no tenía la culpa.

Pero estar llorando como lo estaba haciendo definitivamente no era la solución.

Lentamente, paré de llorar, y me decidí.

—Debo hacerlo —susurré.

Ross y Raini dejaron de abrazarme y me observaron.