—Entiendo, y ¿En cerio no sabes quien soy?—Pregunto Katherine.

—Creo que te conozco. Pero dame pistas.—Dijo Jade.

—Jardín de niños, mejores amigos, hacíamos todo juntos.—Respondió Katherine.

En eso llegaron demasiados recuerdos de mi niñez donde pude recordarla totalmente.

—¿Por qué te alejaste de mi?—Preguntó Jade.
—¿Ya sabes?—Esta levanto su cabeza y miro extrañada a Jade.

—Mi memoria es corta, lo sé, pero ahora te recuerdo completamente. Fuiste como mi otra mitad desde el jardín de niños. Me apoyabas en todo e incluso en mis peores momentos. Nos reíamos sin parar. Pero a medida del tiempo te hacías cada vez mas ausente y así fue como lamentablemente te olvidé. Hasta ahora.—Dijo Jade.

—Exactamente eso, crecimos y tu cambiaste radicalmente. Cuando tuve el valor de hablarte, el Jade tierno, amable, ese que reía por todo, sincero y generoso con el tiempo desapareció. También hice nuevas amigas. En las que pude confiar. No puedo negar que me dolió que me apodaras con esos nombres falsos sin saber quien era en realidad.—Respondió Katherine.

—Me pasaron muchos acontecimientos desagradables. Sin nadie en quien confiar, me sentí solo y el antiguo e indefenso Jade cambio totalmente. Quisiera que fuésemos amigos como eramos antes. Quiero saber de ti un poco mas, —Dijo Jade

—Yo también quisiera saber un poco mas de ti y como has estado en estos últimos años.—Respondió Katherine.

—Oigan Romeo y Julieta si no nos damos prisa no terminaremos nunca.—Exclamó Augusto.

—Tu cierra la boca rubio descerebrado.—Dijo Jade bromeando con Augusto.

Después de una hora en clases terminamos las tres paginas de Geografía que pidió el profesor y salí a la cafetería con mis amigos.

Era obvio que no iba a comer, ya que había comido en casa pero solo iba a charlar.

En una de las mesas estaba Katherine, me acerque a ella para platicar.

—Katherine si quieres puedes ir a la casa mañana, comeremos pizza y puedes llevar amigas yo invito a mis amigos y así conocernos de nuevo. A las 07:30 P.M.—Dijo Jade.

—Ahí estaré, cuanta conmigo.—Respondió esta.

Seguí caminado y estaba Ashley que dijo que no se le escapó una.

—Hola Idiota.—Dijo Ashley.

—¿Tan idiota soy que no me dejas de molestar?, que raro que no estés intercambiando saliva con Brad.—Respondió Jade.

Narrador omnisciente; Industrias Apple.

—Cielo hoy tenemos la junta con los ejecutivos asiáticos, dile a Marta que preparé el salón "Pods" para que esté todo listo.—Dijo Edward.

—Tranquilo cariño ya Marta se encargo de eso, cambiando de tema no vi a Jade salir esta mañana ¿tu si? Cuando bajé le pregunte a Margarita y me dijo que había salido temprano y que no quería desayunar pan tostado pero a la final desayunó.—Respondió Caitlin.

—Sabes como es de egocéntrico aveces y hay que hablar con el sobre eso, su actitud no me gusta para nada pero ya sabes es la adolescencia.—Dijo Edward

—Perdonen que los interrumpa pero tengo malas noticias, el Presidente de Apple acaba de aterrizar junto con los ejecutivos asiáticos pero me pido hablar asolas con ustedes, y no es nada bueno.—Intervino Fusherman.

[...]

—Buenos Días Sr. Carlos ¿como esta usted?—Preguntó Edward.

—Me pueden explicar por qué solicitaron que los ejecutivos chinos vinieran a dar sus malditas opiniones piratas a nosotros, pensé que eran lo suficientemente inteligentes como para decir que no aprobaban sus opiniones y que no les interesaban. Ya les di muchas oportunidades y esta es la ultima. A partir de ahora ya no trabajarán en ninguna industría Apple. Y sus cuentas bancarias serán bloqueadas. Es que son tan imbéciles los dos. A nadie les interesa la mercancía china. Hace un mes intentaron fabricar un iphone que se convirtiera en niñera, y lo único que lograron fue traumatizar a un niño de cinco años.

—Se supone que nosotros como vicepresidentes también tenemos derecho a hablar, y a hacer nuestros propios movimientos par lo mas factible en este techo. Y no se nos pide tratarnos de esa manera.—Respondió Caitlin.

—Estoy muy de acuerdo con Caitlin. Y hace unos meses usted mismo nos pidió esa cita. Además hicimos lo posible para que se diera porque si no lo sabía, usted se fue por dos semanas por un crucero en el caribe dejando un líos aquí. Ellos ofrecían nuevas cosas, y le dimos la oportunidad de eso. Y si alguien esta harto aquí, somos nosotros de su actitud e impaciencia. Eso no era lo que Steve Jobs quería para esto. —Dijo Edward.

—Pero no nos vamos por su palabra. Es un negocio y hay más puertas esperándonos. Ustes sabe perfectamente lo que está haciendo. Y por ello mi esposo y yo nos vamos por nuestra cuenta. Recogeremos todo hoy mismo. Y mañana le entregaremos la contraseña y todos los datos.—Dijo Caitlin para culminar.—Que tenga un día.—Dijo esta muy natural a lo ultimo al ver la cara de frustración del Señor Carlos, para luego marcharse con su esposo.

Narra Jade.

Volví a casa agotado como de costumbre, papá y mamá habían llegado temprano y eso era muy raro.

Tomé una ducha y bajé a cenar con mis papás que no me dirigieron la palabra lo cual causó un clima incomodo.

—¿Todo Bien?, ¿estuvo difícil el día hoy en la empresa?.—Preguntó Jade.

No queremos hablar de eso cariño, sube y ve a dormir.—Dijo Caitlin.

—¿Okey?, Buenas Noches señores perdón padres, los quiero.—Respondió Jade.

Subí a mi habitación y revisé las redes sociales, luego dejé el teléfono sobre la mesa de noche y me fui a dormir pero olvidaba algo.

Atrévete a Cambiar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora