"Destrucción"

Capitulo 1

¡Eres una estúpida!

No tendrías que haber nacido

Gritos atormentan a mi mente, duele.

¡Basta!

Basta por favor- suplico

¡No me hagas daño!

-Basta, basta, basta- Susurro antes de desmayarme.

Abro los ojos y veo un lugar blanco, me levanto enseguida y me mareo. Y entonces recuerdo donde estoy, es la enfermería del instituto.

- Que hago aquí?- Pregunto con la voz raspada, tengo la garganta seca.

- Te desmayaste en el baño- Me dice la enfermera.

- Quien me trajo hasta aquí?- Pregunto con frialdad, no quiero que se acerque, tengo miedo.

- Un chico nuevo... que se llama, Em. Como era? Adan, ya se, Adam- Dice recordando.

- Te desmayaste porque estas débil, no estás durmiendo nada, estas demasiado delgada y estas con nervios y miedo, te preocupa todo. Estas bien?- Pregunta con voz maternal.

-Sí, estoy bien- Miento. Pero no quiero explicar, me siento como una mierda, por lo tanto no estoy bien, a veces quiero acabar mi dolor, otras veces quiero salir flotando del mar, que me siento que me estoy ahogando, siempre me destruyo a mí misma, en las muñecas me quedan cicatrices de recuerdo.

-Ok, ya puedes salir, y espera!- Busca algo en la mesita y me da un papel- La falta de la clase que tenias.

Yo solo asiento y salgo, afuera hay un chico, alto, castaño oscuro, con ojos marrones café. En cuanto me ve, se levanta del asiento nervioso y se acerca.

-Hola, como estas?- dice nervioso e impaciente, yo retrocedí para atrás y no lo mire.

-Bien- Dije fría y me fui. No quiero que el me hable, yo le podría hacer daño y no sé lo que él me podría hacer.

Ahora tengo biología y ya estoy llegando tarde, llego al aula y toco la puerta, el profesor me mira y me deja pasar, entro al aula y se escuchan murmullos, voy hacia donde esta el para entregarle el papel y asiente. Voy para mi lugar, que es al fondo y que nadie se sienta ahí, por eso me gusta sentarme ahí. Siento que todos me miran y realmente lo están haciendo.

El profesor comienza a explicar hasta que fue interrumpido, acababa de entrar Adam, disculpándose por llegar tarde.

-Perdón profesor, es que tuve que llevar a alguien a enfermería- Se disculpo y me miraba fijamente.

- Primera y ultima vez- Dijo el profesor y Adam asintió- Bueno, elegite un lugar libre.

Quedaba al lado le una rubia plástica, zorra o al lado mio. Y se fue al lado de la rubia.

El profesor siguió explicando y yo no estaba concentrada, estaba dibujando en mi cuaderno, era un ángel que le quitaron las alas, el ángel demostraba que era temeroso, y estaba llorando por el dolor que soportaba. Me representaba tanto a mi, que casi iba a llorar, pero contuve las lagrimas.

Toca la campana, y todos van para la cafetería y yo busco a Julie, a lo lejos la encuentro saliendo del aula, me ve y se acerca hasta donde estoy.

-Hola Ann- Me saluda con un beso en la mejilla.

- Hola- Respondo con la voz temblorosa, ella me analiza como estoy y niega con la cabeza, se fija en mis ojeras y se da cuenta.

- Oh no, tuviste la misma pesadilla?- Pregunta preocupada, yo solo asiento y ella me abraza con tanta fuerza- Ven, vamos a la cafetería.

Cuando llegamos allá todos me ven y después apartan la vista, menos Adam, me dirijo para donde esta la comida y solo me sirvo un poco de lo que hay hoy, puré, y después me agarro agua. Espero a Julie que agarra un montón de comida, a ella no le preocupa ser delgada, porque básicamente lo es, come de todo y no engorda nada. Cuando nos vamos para la mesa que esta alejada al fondo, alguien me pone un pie en el medio del camino y yo no me di cuenta, me caigo al suelo y escucho unas carcajadas, que provienen de Ashley, la mas popular del instituto, ella es la "Doña Perfecta" de los chicos.

- No podes ser mas patética- Dice- Miren, alli esta la Suicida, ¡Tengan cuidado!.

Lagrimas amenazaban salir, pero me van a ver, junto fuerzas y me las trago.

-Cállate zorra- Me defiende Julie, la otra se mostró ofendida.

- Disculpa? Me has llamado zorra?

-Si, porque realmente lo eres, oh vamos! cualquier persona que tenga pene, vas y te lo tiras! Ya te has tirado casi a todo el colegio!- Dijo Julie, realmente ella tenia razón.

Todas las chicas empezaron a darle la razón, Ashley no dice nada, pero al rato reacciona y se acerca a mi, y me dice algo al oído:

-Maldita perra, te haré la vida imposible, tenlo seguro.

Y se va. Con Julie vamos a la mesa del fondo, que no había nadie y entonces decidimos sentarnos.
- Por que te pusiste poca comida?- Me pregunta Juli al rato- No tenes hambre?
Niego con la cabeza- solo tengo un poco de hambre- miento, tengo tanta hambre, pero tengo que dejar de comer, hace tiempo que no como buena cantidad de comida, hoy es la primera vez de hace 2 años, es mucho no? Pero nadie se da cuenta, porque yo distraigo a la persona a la hora de comer, y hago que ya comí todo, pero no es así, mama sabia que estaba pasando esto, pero piensa que ya me recupere, y yo realmente no la quiero hacer preocupar por estupideces mías. Julie por supuesto que también lo sabe, pero no sabe que volví a recaer, yo nunca me podría recuperar. Pero nadie lo entiende, solo mi soledad y yo.
- Estas muy delgada, deberías comer mas- dijo Juli, mientras comíamos, yo solo comía pequeños bocados de puré.
-No estoy bien Juli, debería estar mas delgada- Digo y al rato me arrepiento. Porque supe que se dio cuenta lo que pasaba.
- Oh no, Ann, que no entiendes, estas delgada, y sos hermosa, por favor no decaigas de nuevo- Me suplico. Me quede callada y con la cabeza para abajo.
-No entiendes Juli, nadie entiende, NO ME SIENTO BIEN CON MI ASPECTO! ME ODIO! ES QUE NO ENTIENDES?- Grito y me largo del comedor, directo al baño. Abro la puerta y no había nadie, me voy hacia unos de los baños y cierro la puerta.
Comienzo a vomitar al inodoro, sabia que no debería haber comido el desayuno, me haría peor.
Al final de vomitar todo lo que comí hoy, empiezo a sentir ardor en la garganta, era por el vomito, pero ese ardor ya me acostumbre.
Yo... No quise decir eso a Juli, pero necesitaba liberarme, yo no me siento bien, y se que nunca me voy a recuperar. Odio no poder dormir con la misma pesadilla de siempre, odio verme al espejo y no verme aceptable, odio ser tan débil, odio mi vida.