—¿Dónde vamos? —pregunté y Shawn se dedicó a tararear la canción de la radio.

Decidí dejarlo con su música y saqué mi móvil, el cual casi lanzo contra el cristal al ver la notificación que me había llegado.

Dylan O'brien ha comenzado a seguirte

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Dylan O'brien ha comenzado a seguirte.

—¡Ivie no grites! —me regañó mi amigo asustado puesto que me había sido imposible no gritar.

—¡Dylan me ha dicho que espera conocerme pronto Shawn! —le hice saber, mirándolo entusiasmada, a lo que él deslizó una pequeña sonrisa.

Volví a mirar la pantalla y contesté a lo que me dijo, además de a algunas fans que me habían felicitado. Era el mejor día de toda mi vida. Incluso Kian me felicitó por Twitter y después me mensajeó diciéndome lo que feliz que estaba por mí. En parte me sentí mal, ya que él me dijo que me quería y me lo demostraba, y yo era un cacao de ideas.

No me fijé en dónde nos encontrábamos hasta que Shawn paró el coche. Bloqueé mi móvil devolviéndolo al bolsillo, y miré a mi alrededor, sin tener idea de donde estábamos. Shawn salió del coche y yo imité su acción, acercándome a él para que me dirigiese a saber dónde. Como era otra de nuestras costumbres, él tomó mi mano como seguridad y comenzó a andar hacia un edificio algo extraño. Allí le pidieron una identificación la cual él tenía y nos dejaron pasar con total libertad.

—Del 1 al 10 ¿cuánto te alegraría saber que el "pronto" de Dylan se cumplirá en un momento? —me preguntó y yo lo miré perpleja.

Volví a mirar al frente y pude divisar los decorados de una película o serie. Mi pulso se aceleró, sin poder creer que Shawn había contactado con el equipo para poder conocerlos. Tiré de su mano con fuerza, caminando hacia donde estaban las cámaras. Y como si el paraíso se hubiese presentado ante mis ojos, pude contemplar a mis actores favoritos allí, a unos metros de mí.

—Shawn, Shawn, ¡Shawn! —chillé emocionada, di unos saltitos y agarré fuerte a mi amigo del brazo.

Todos miraron en mi dirección y chistearon. Acababa de cagar una escena, propio de mí.

—Ven, nos quedaremos a un lado y después podrás ir a conocerlos -—me dijo Shawn y yo lo miré durante unos segundos antes de abrazarlo con fuerza.

Le di las gracias repetidas veces y me mantuve abrazada a él en todo momento, a lo que él puso sus manos en mi espalda y me acercó a su cuerpo con cariño. No sabía cuantas veces lo había dicho pero él era el mejor amigo que jamás podría haber pedido.

Al rato se sintieron unos aplausos, anunciando que la escena había sido grabada satisfactoriamente y gritaron un "descanso" a lo que mis nervios se triplicaron. Shawn me soltó para volver a tomar mi mano y acercarme a dónde estaban los actores. Tragué saliva, quedándome estática en el sitio. Dylan O'brien estaba frente a mí, me estaba mirando, ¡me estaba sonriendo!

I'm not the Magcon girl.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora