Moonlinght (CHANSOO) **TRADUCCIÓN**

Capítulo 1

Chanyeol despertó después de un rato después de escuchar una risita parecida al tintineo de las campanas.

Adormilado, parpadeó, y miró alrededor buscando la fuente del sonido. Le tomó un momento, pero sintió algo sobre la seda de su fina camisa que le hizo mirar hacia abajo, justo en su brazo.

De pie, sobre su muñeca, estaba lo que Chanyeol sólo podía suponer, era un hada verdadera.

A primera vista, la impresión de Chanyeol era que la figura femenina posada sobre él, era algo pequeña y tenía las alas tan finas como el hilo de una araña. Estuvo bastante rato mirándola estúpidamente antes de darse cuenta de que su feminidad era una ilusión y la pequeño persona era, de hecho, de sexo masculino, pero en su defensa, el hada tenía las piernas desnudas muy largas, era muy pálido, tenía curvas en las caderas, y bueno, de todas formas, lo único que había visto al principio, sólo era las alas azules y púrpuras como de un insecto.

"Hola...", dijo Chanyeol medio adormilado pero amable como siempre.

"¡Hola!" Dijo la pequeña criatura, su rostro se iluminó mientras le daba una sonrisa que casi brillaba. Chanyeol parpadeó. "¿Eres un príncipe?".

¿Cómo era posible que algo que tenía una voz como campanillas de viento sonara masculino? Más importante aún, ¿cómo sabía que Chanyeol era un príncipe?

Bueno, podía preguntarle. "¿Cómo sabe que soy un príncipe?"

"Bueno", dijo el hada, "Obviamente, estás en medio de una aventura y ningún caballero sería tan idiota como para quitarse la armadura mientras se dirige al Bosque Encantado. Podrías ser un leñador de buen corazón o el hijo de un panadero, supongo, pero dudo que alguno pueda permitirse una armadura con llamas doradas en relieve". Él revoloteó - revoloteó, como un colibrí - sobre el pecho de Chanyeol y le pinchó las llamas doradas que mencionó.

Todavía aturdido, Chanyeol frunció el ceño. "Bueno. Mi madre quería que usara todo dorado. Esto es por compromiso". Era normal ver príncipes, reyes y similares con una armadura dorada y con incrustaciones de joyas que brillaban como faros en el campo de batalla - bueno, los pocos que luchaban sus propias batallas. Su armadura era mucho más práctica, al tiempo que rendía homenaje a su familia y estatus, además pensaba que le ayudaba a hacer más accesible a las personas. En realidad estaba bastante orgulloso de su armadura, y lo que sentía que decía de él. (No es que nadie más lo hubiera notado alguna vez).

"Ah," dijo el hada, "tu madre". Levantó las cejas. "¿Tienes... veintiséis? ¿Veintisiete?".

Chanyeol frunció el ceño. "Tengo veintitrés años, para su información y está siendo grosero, señor".

Sorprendido, el hada se echó a reír. "Me caes bien", declaró. "Eres descarado. No hay muchos seres humanos que se atreverían a ser descarados con un hada". Aterrizó en rodilla doblada de Chanyeol y se sentó. "Soy Baekhyun. ¿Cuál es tu nombre príncipe descarado?".

"Chanyeol", le respondió. "¿Por qué los humanos nos son descarados con las hadas?"

"Porque tienen miedo de ser maldecidos, obviamente", dijo Baekhyun. "Pero bueno, está bien que teman".

Chanyeol, quien a pesar de la conversación, todavía estaba bastante soñoliento, frunció el ceño y preguntó: "¿Qué quiere decir, con maldecido?".

Baekhyun arqueó una ceja. "No te preparaste muy bien para esta aventura, ¿verdad?".

El calor subió a las mejillas de Chanyeol. "Fue un poco más como una decisión apresurada", murmuró. "Entonces las hadas maldicen a la gente, los despiertan de la siestas y aparentemente también fastidian. ¿Hay algo más que debería saber?".