Donde cada vez es mas común que los hombres puedan concebir. Yuri Plisetzky termina un amorio; Con el corazón destrozado y lleno de dolor promete no volver a enamorarse.
Una confesión de la persona menos esperada pondrá su vida de cabeza. Había pr...
Camino a la salida, pero por alguna razón, sus ojos se desviaron a la aduana, justo al otro lado...
"Pasajeros del vuelo 2346 con destino a Rusia, inicia el abordaje en la puerta A"
Esta vez solo vio una maleta de animal print, la siguió hasta la mano que la sostenía, siguió el delgado brazo cubierto por una chaqueta negra, recorrió el torso y cuando por fin vio el rostro, ahí estaban esas hermosas esmeraldas que dejaron sin aliento a Otabek.
Su corazón se debo cuando vio que el muchacho también se había percatado de su presencia, sus ojos hicieron contacto. Camino de forma lenta hacia la aduana; A su mente llegaron muchas posibles reacciones.
Pero no llego a pensar, que el rubio solo lo mirara extrañado.
Y que se apresuraría a subir al avión.
Como si huyera de él.
No pudo hacer nada contra la lagrima que bajo por la comisura de su ojo.
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- ¿Yurio? - Apenas escucho la molesta voz de Viktor quiso acelerar el paso con tal de no hablar con el calvo ese. - ¡Que sorpresa! No tenía idea que te hospedabas aquí.
-Viktor, déjalo ya- Le pidió Yuuri, al cual llevaba de la mano- ... ¿Y esas maletas? No me digas que ya te vas- Pregunto con un ligero tono de decepción en su voz.
-La boda acabo y estoy harto de estar aquí, quiero volver a casa y seguir practicando mis rutinas- Mintió con habilidad.
-Cierto, pronto iniciaran las competencias para GPF- Menciono Viktor- Pero yurio- Alargo la "o"- Queríamos salir por ahí a turistear contigo
- ¿Ha? ¿Por qué querría salir con ustedes par de acaramelados?
-Viktor creyó que será divertido
- ¡Y lo será! - El japonés negó divertido
-Me da igual, me tengo que ir- Se levanto de la silla y camino en dirección a la salida- No tengo tiempo para estupideces, perderé mi avión...
O otabek podría venir y arruinarlo todo, pensó el rubio.
Ciertamente había una chispa de culpa que le remordía la conciencia. No estaba bien lo que hacía, estaba jugando con Otabek... Aunque en ningún momento Yuri le había dicho que lo amaba, entonces no estaba mintiendo ¿No? Lo único que el quería era un poco de placer, para así poder olvidar el dolor.
-Para que haya sexo no hace falta amor...- Murmuro para si mismo.
Hizo la parada a un taxi para que lo llevara hacia el aeropuerto. Pago y dejo que el conductor se quedara con el cambio. Miró el enorme lugar por fuera, ya no había marcha atrás. Se convenció de que era lo mejor. Entro, se registró, paso la aduana. Solo quedaba esperar que llegara la hora para que por fin pudiera abordar y largarse de una vez.
Su teléfono comenzó a sonar.
Lo ignoro la primera vez, lo ignoro una segunda.
Para la tercera, se desesperó y contesto la llamada.
- ¿Qué? – Grito
- ¿No le avisaste a Otabek que te ibas? - El tono era sereno, pero se podía detectar el enojo.
- ¿Eso a ti en que mierda te afecta Mila?
- El pobre acaba de llamarme, ¿Sabes? No importo cuanto se esforzó por sonar tranquilo. Su tristeza se detectaba a kilómetros- Eso removió la conciencia del chico.
-... ¿Y eso a mí en que mierda me afecta? - La chica al otro lado de la línea suspiro.
-No sé si lo hayas notado, pero ese chico te quiere. -Menciono severa, volvió a suspirar. - Escucha Yuri, sé que eres...así, pero al menos avísale que te estas yendo. Se supone que son amigos, ¿Por que te empeñas tanto en lastimarlo?
Se quedó callado, ¿Lo estaba lastimando? Toda la culpa le cayó como un balde agua fría... Y solo reacciono.
- ¿¡Y tu porque mierda te empeñas tanto en defenderlo!? ¡¿Te gusta!? ¡Pues bien! ¡Ve y cógetelo! ¡Deja de molestarme vieja bruja!
-Pero Yu...
No se detuvo a escuchar pues colgó la llamada y apago el teléfono, maldijo haberlo encendido en primer lugar. A el nadie lo había defendido cuando JJ lo había lastimado.
"Pasajeros del vuelo 2346 con destino a Rusia, inicia el abordaje en la puerta A"
-Al fin- Murmuro molesto.
Se levanto de su cómodo asiento y se dirigió hacia la puerta A que estaba cerca de la aduana, se formó tras otros pasajeros, estaba centrado, no dejaba de pensar en la estúpida de Mila, seguramente le gritaría cuando se vieran en la pista. Entonces se percató, sintió un extraño hormigueo recorrer su cuerpo, una incómoda sensación que lo obligo a mirar hacia la aduana... No, un poco más lejos.
Ahí estaba.
Los ojos chocolates parecían gritar su nombre, los segundos se hicieron horas, horas en las que no dejo de ver los hermosos ojos que su amigo poseía... Claro, si es que aún era su amigo. El muchacho se movió.
"Su tristeza se detectaba a kilómetros"
No quería.
"¿Por que te empeñas tanto en lastimarlo?"
No podía.
"No sé si lo hayas notado, pero ese chico te quiere."
En medio del pánico, solo atino a apresurarse. Subir al avión con rapidez.
No quería ver a Otabek, no quería llorar.
Apenas llego a su asiento, las lágrimas recorrían su rostro, soltaba unos cuantos sollozos, hasta el punto en que una azafata le pregunto si estaba bien. ¿Por qué ese dolor le era tan familiar? ¿Por qué Otabek lo miraba de la misma forma en la que el miro a JJ?
¿Por qué sentía que estaba siendo como JJ?
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Agradecimientos a DanielRdg ♥ , este cap va para ti, i lof yu :v
No sé ni porque sigo agradeciendo, cada que menciono a alguien pareciera que dejara de leer ¿Por qué me persigue la desgracia? :,v
En fin, amor a todos los fantasmitas de la historia uwu♥♥
